Estoy por la ruta, entre las montañas, y me acordé de vos (otra vez). De nosotros. Y se me vienen miles de recuerdos y todos son hermosos.
Los viajecitos a Cosquín en la moto, esos si que estaban buenos. Vos y las montañas eran la mejor parte del viaje, tus mates sentados a la orilla de la ruta, las risas, las quejas de que estábamos incómodos pero al final siempre admirabamos el paisaje con una sonrisa en la cara. Después eran con la Mavi, a esa loca le gustaba (y lo sigue haciendo) sacar la cabeza e ir en dos patas mientras le pegaba el aire en la carita y se le volaban los rulos. Era la mejor combinación: el amor de mi vida, Mavi y las montañas. Era la mejor parte del viaje. Tenía todo lo que siempre quise, y todo lo que me gustaba estaba incluído en un solo plan. Que más podía pedirle a la vida? Me sentía afortunada, me sentía tan viva y mi corazón estaba en paz.
Y no sabes cuántas veces le pedí a Dios que se sigan repitiendo esos viajes del amor, cómo los llamaba yo, que hacíamos juntos.
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Lo que oculta su silencio.
De TodoSon palabras que salen de mi cabeza y de mi alma, cuando tengo y siento la necesidad de escribir y de expresarme. Cuando ya no puedo mas, o simplemente cuando estoy feliz, en cualquier momento. ✨Correr ejercita el cuerpo, escribir ejercita el alma✨
