Capítulo 2 Quieto ahí, William Shakespeare

333 27 15
                                    

Capítulo 2
Quieto ahí, William Shakespeare

Pov Will

"Es en serio, Grace. Yo la vi y me llamó cazador". Volví a insistir. Después de todo, tuve que decirle la verdad porque de nada me servía quedarme callado si no tenía ni idea de quién era yo en realidad.

"¡Eso es imposible! ¿Cómo tú puedes ver a alguien y yo no? ¿Me estás diciendo que soy ciega?" ella se cruzó de brazos.

"No me refiero a eso, Grace. Quiero decir que esa criatura, lo que sea que haya sido, solo me habló a mí y contigo hizo como si no existieras. Desde que la vi, supe que ella no era normal. Había algo en ella que me pareció familiar que..."

"Estás loco. Vámonos mejor." Ella me tomó por los hombros y empezó a empujarme fuera del lugar

"¡No estoy loco! Es en serio, además, ¿Y mi comida? Me prometiste más que un pan" le recriminé y me solté de su agarre.

"Maldición. Eres un grano en el trasero" ella bufó y rodó los ojos. "Bien, te daré un pan si es lo que quieres"

"Más que un pan" le recordé.

"¡¡¡Sí, lo sé!!! Ash, no sé porqué me tienes que corregir en todo"

"Yo que culpa tengo de recordar todo lo que me dicen"

"¿Se te ha quedado la palabra mierda?" preguntó curiosa tratando de no reír.

"Sí, pero no sé qué significa eso" admití. Ella rió fuertemente.

"Es una palabra muy bonita y común. Significa hermoso." ella trataba de estar seria pero siempre se reía.

"¿Hermoso? No molestes. No te creo. Esa palabra la ocupaste cuando estabas enojada. Cuando alguien está enojado solo dice incoherencias como esa palabra tuya."

"Maldición. No te pude engañar"

"Ahora dime el verdadero significado"

"Está bien. Me rindo. Significa..." cualquier cosa que haya dicho, fue ahogada por un grito que se escuchó afuera. Mis instintos despertaron rápidamente y yo fui corriendo hacia la puerta. En el exterior, las personas corrían en dirección contraria a la entrada del Burough Market.

"¿Pero qué diablos...?" ella no terminó la palabra cuando le tapé la boca y la escondí dentro de un pequeño ambulante puesto. Si estaba equivocado con lo que vi o no, no importaba. Pero vi que dos hombres gigantes con sus caras desgarradas y unas hachas en sus manos destrozaban un puesto de pescados de toda clase. El dueño, un ser peludo, pequeño de estatura y robusto, se lanzó con algo que no pude descifrar.
"Mira disimuladamente hacia donde están destrozando el lugar y dime qué ves" le pedí a Grace. Ella asintió y yo la solté.
"Veo dos policías destrozando el puesto de pescado y el dueño gordo se está defendiendo" me dijo. "¿Y solo por eso el gran escándalo?"
"Los mundanos tienden a ser así todo el tiempo. Pero mejor que sea así porque lo que yo estoy viendo, no son policías ni hombres gordos. Yo veo algo diferente y no me estoy volviendo loco. Observa con más atención. Trata de ver lo que yo veo. Tal vez está ahí pero..."
"Espera un momento, Williamcito. ¿Dijiste mundanos? ¿Observar con más atención?"
"¿Sabes qué estoy viendo yo?" le contradije "Yo veo dos hombres desfigurados de las caras con dos hachas en sus manos y el dueño es peludo y..."
"Will, eso es imposible. Mira, la gente está volviendo a la normalidad. Vamos a comprar esa docena de pan y luego vamos a ir a mi casa. Suficiente con esas cosas locas que dices como si viviéramos en un mundo mágico"
"Pero..."
"Pero nada" me jaló la camisa blanca y me llevó a un puesto de panadería. Después, sin decir nada más, nos fuimos de ahí. En todo el camino, iba viendo cosas raras y sobrenaturales que mejor me las guardé para mí, antes de que Grace me siguiera llamando loco. Antes, no las había visto pero ahora estaba más despierto y vi lo que de camino al mercado no había visto. Pequeños seres alados jugaban en los árboles y al verme pasar, ellos se escondían. Era como si me tuvieran miedo. Otros seres más feos que los anteriores me observaban con atención y murmuraban cosas que no alcanzaba a escuchar.
"Will"
"¿Ummm?" pregunté distraído.
"Estás pálido y raro. ¿Te encuentras bien? ¿Porqué ves inquietamente a todos los lados?"
"No, es solo que... Me siento muy desorientado en estos momentos" mentí.
"No te preocupes. La amnesia no puede ser permanente. Ya verás que muy pronto vas a ser como antes"
"Pero no soy de este siglo. ¿Qué pasa si no puedo volver a mi hogar?" ella suspiró fuertemente.
"Primero, esfuérzate en recuperar la memoria. Luego, veremos si puedes regresar o no. ¿De acuerdo?" me dijo con un suave tono que no había usado antes.
"Está bien. Pero no estoy loco, Grace. Estoy viendo muchas cosas que no creo que alguien como tú podría ver"
"Estás empezando con lo mismo otra vez. Will..."
"No, Grace. Te lo voy a demostrar" le dije firmemente. Había ya marcado a una pequeña criatura alada que estaba siguiéndome desde hace un par de minutos. Pero si lo quería agarrar tenía que ser sigilosamente cuidadoso. Así que agarré a Grace de la cintura y la acerqué a mí para que se viera como si la iba a besar. Ella abrió sus ojos ampliamente pero yo le puse un dedo en su boca y le susurré cerca de su oído.
"Quédate quieta y haz lo que te digo, Grace." Ella se estremeció y yo vacilé al sentir una corriente extraña dentro de mí.
"William, si intentas..."
"No te preocupes. No te daré el privilegio de besarme, querida. No soy un chico fácil." dije juguetonamente. "El problema es que hay un pequeño ser alado que me viene siguiendo desde hace unos minutos y lo voy a agarrar para ti para que puedas ver lo que yo veo"
"Eres un idiota, ¿sabes? ¿Que no eres un chico fácil? ¿El privilegio de besarte?" rió irónicamente pero pude escuchar el pequeño temblor en su voz. "Pero está bien. Te voy a seguir el juego solo para ver si estás en lo cierto o no" y como resultado, ella pasó sus brazos por mi cuello. Olía exquisitamente delicioso. Sus curiosos y claros ojos me miraban coquetamente y yo dudé en hacer mi próximo paso. "Ahora, retrocede conmigo despacio lentamente y cuando yo diga tres, me sueltas y te quedas ahí. ¿Entiendes? Ahorita tú y yo vamos a bromear un poco y voy a darte el honor de ser mi chica por unos instantes"
"No, Will. Este es mi mundo no el tuyo. Por lo tanto, yo te estoy dando ese privilegio, pequeño tonto" ella rió guasonamente y cuando menos lo vine a sentir, ella besó mi mejilla. Yo, me quedé sorprendido por varias razones.
1. Ella me besó desprevenido.
2. Nunca pensé que una dama podría hacer eso.
3. No pensé que fuera tan atrevida como yo lo pensé.
4. Me gustó el beso.
5. Ya no me importaba el ser alado.
6. Mi plan fracasó.
7. Le regresé el beso pero no en su mejilla sino que en su boca.
Por los primeros 30 segundos ella me correspondió el beso, luego, íbamos retorciendo y supe reaccionar cuando vi al pequeño ser diabólico riéndose de mi situación.
"Tres" susurré de mala gana. Ella me miró sorprendida pero supo a lo que me refería y me soltó. Increíblemente me giré hacia una velocidad máxima y el ser alado supo lo que iba a hacer pero ya era demasiado tarde. Yo lo agarré de las alas.
"¡Noooo!" gritó agudamente.
"¿Quién eres pequeña cosa fea?" inquirí. Grace me miró con una ceja levantada. "¿Porqué yo te puedo ver y ella no?"
"¡No te diré nada!" chilló.
"¿Ah no?" dije con tono burlón. "Entonces tal vez esto te haga cambiar de opinión" sonreí malevolamente mientras sacaba una daga de mi bolsillo.
"Will, es suficiente. Estás hablando con una mariposa" me dijo Grace con tono irritante. Yo la ignoré y puse mi cuchillo en las extremidades de sus alas.
"No te atrevas, cazador de sombras."
"¿Cazador de sombras?" pregunté confuso. Este pequeño ser me miró diabólicamente.
"Te ves tan patético, cazadorcito"
"Muéstrale tu verdadero ser a esa chica y te dejaré ir con tus dos alas" le amenacé.
"Will, la gente..."
"Ahorita no, Grace. Ten un poco de paciencia y ya verás" le dije.
"Si tú lo dices" agregó amargamente.
"Vamos, enseñale lo que eres."
"No lo haré. No al menos que vengas conmigo."
"¿Porqué me iría contigo?"
" La Reina Seelie quiere verte"
"¿Quién es ella?"
"Lo verás cuando lleguemos"
"No pienso ir a ningún lado" gruñí.
"¿No quieres saber quién eres?" me musitó diabolicamente suave, poniéndome en duda lo que quería hacer. "La Reina puede ayudarte a recuperar los recuerdos. Una mundana como ella," el ser la miró despectivamente, le sonrió y luego volvió a verme. Gracias al ángel que ella no lo podía ver. No me gustaba esa mirada. " nunca podrá hacer que recuerdes si este no es su mundo. Pero si vienes..."
"Él no irá a ningún lado contigo, estúpida cosa horrible" dijo Grace enojada mientras llegaba a mi lado.
"¿Haz podido verle y escucharle?" pregunté sorprendido.
"Sí, por unos cinco segundos, después volvió a desaparecer, pero alcancé a escuchar lo que dijo y no pienso dejarte ir con esta despreciable cosa que me miró de una forma horrible. No pienso dejarte ir."
"He dejado que me veas a propósito. Tonta muchacha." siseó la criatura. "Si yo no hubiera querido, tú jamás me hubieras visto. No te metas en asuntos que no te pertenecen, tonta niña fea"
"Eres un hijo de..." antes de que ella siguiera, hablé yo.
"Tonto eres tú si no me dices quién eres. Sería una lastima ser mas feo de lo que ya eres sin tus enanas alas" le advertí. La criatura se enfadó y me miró cruelmente.
"No, me pediste que ella me viera no que te dijera quién era yo. Sino vienes conmigo, cazador, entonces es todo lo que haré por ti. Hasta nunca" la criatura nos sacó la lengua y luego, desapareció.
"WTF?! Esa cosa..."
"Lo sé, sé fue." comenté entre furioso y decepcionado.
"Esa enana criatura te quería llevar. ¿A dónde?" me preguntó enojada.
"No lo sé. Donde una tal Reina Seelie."
"Estoy empezando a creer que la que está loca soy yo y no tú" susurró ligeramente. "Pero ahora si te creo, Will "
"Te costó un encantador beso mío para creerme" sonreí ampliamente satisfecho. Ella me devolvió la sonrisa y se acercó a mí.
"Respecto a eso..." ella tomó mi mejilla y por un segundo pensé que me iba a besar, pero al instante que ella se acercó a mí, vi la horrible transformación de su rostro a uno totalmente furioso. Quise reaccionar pero ya era demasiado tarde. Ella pellizcó fuertemente mi mejilla.
"¡Auch! Grace pero qué..."
"Escúchame bien, William. Jamás vuelvas a besarme sin mi permiso. Eres un idiota..."
"Te di el honor de besarme, Grace. Admite que te gustó" la desafié divertido. No sabía porqué pero me gustaba hacerla enojar.
"Que si me gustó o no, eso no importa, imbécil. Mi punto es..."
"Que quieres volverme a besar"
"¡Siiii... Quiero decir noooo! No me confundas, William. A lo que quiero llegar... "
" Que te gustó mi beso. Y eso es todo lo que a mí me importa" me encogí de hombros. Luego, empecé a caminar.
"Quieto ahí, William Shakespeare" ella gruñó. Yo la ignoré y seguí caminando. Escuché que bufó y luego corrió para alcanzarme. Cuando llegué a la esquina, ella me alcanzó y me miró asesinamente.
"Mira, idiota. Esto no se va a quedar así. Tú no me vuelves a..." ella no terminó la frase porque la empujé contra mí, al ver uno de esos artefactos con ruedas venir hacia nosotros a toda velocidad. Como acto reflejo, la tomé en mis brazos para alejarla lo más pronto posible de esa área. Empecé a correr y cuando supe que no había peligro, yo la intenté bajar pero ella no me quiso soltar y se aferró a mí firmemente. Vi que unas lágrimas salían rodando por sus mejillas y entonces algo despertó dentro de mí. Un sentimiento de protección y cariño por ella. Algo que no esperé que llegara a pasar en mi vida. Algo, que a pesar de que no recordaba nada, dentro de mí sí sabía que no me había dado ese lujo de tener.

Menudo lío el que pasó xD pobre Will. Sufre mucho u.u ¿les está gustando? /.\ por favor, sed sinceros.
Gracias por leer :* no olviden votar y comentar...

Con amor,

@your_fallen_angel_

¿Un Herondale mundano?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora