Almas gemelas

Un mes sin ÉL.

30 días sin verlo, sin escucharlo, sin que me abrace, creí que el dolor se iría en menos tiempo, pero no. Dolía como el primer día.
Cómo es que alguien puede meterse debajo de tu piel, conquistar tus huesos, tus organos y tus sentimientos?

Mis amigas creen que exagero, pero solo yo se lo que viví a su lado.
- Vamos Loli salgamos a algún bar. Si la pasas mal volveremos- Insistió otra vez mi mejor amiga Madie, es una de las mejores, siempre cuento con ella para lo que sea. Paso por una ruptura hace muy poco y necesita distracción. Solo por eso acepte su propuesta.

Dentro del bar divisé a dos compañeros del gimnasio donde iba, se acercaron a saludar y charlamos toda la noche. Eran simpáticos, aun así nadie era como Juan.

- Lola necesitas que te lleve? Al parecer Madie se ira a comer hamburguesas con mi amigo- Me informó Gabriel. Era un chico musculoso y atractivo, antes de conocer a ya sabemos quien, me hubiese babeado por Gabe.
- Si claro- Respondí, solo quería ir a casa a llorar.

Mi teléfono no paraba de sonar, no tenia ganas de sacarlo de la cartera, sin embargo, luego de 3 llamadas lo tomé.
El número era desconocido.
- Hola?-
- Lola? Dónde estas? Te extraño-
- Juan?-
- Ssssssssi-
- Estas ebrio?-
- Unnn poquititito-
- Donde estas? Donde esta Manu?-
- No lo se, pero sabes que se? Que nose que hiciste conmigo. Yo estaba bien como estaba Lola, no tenia que preocuparme por nada mas que mi carrera y mírame ahora. Soy un desastre. Porque apareciste Lola? Qué querías de mi?-
- Solo surgió así Juan, porque no mejor te acuestas? No quiero que mañana te arrepientas de algo.-
- No finjas que nada pasa Lola. Debemos dejar de hablar y seguir con nuestras vidas.-
- Será lo mejor. Que seas muy feliz Juan, fue un placer coincidir en esta vida-

Colgó luego de la ultima frase. Si antes estaba mal, no se imaginan ahora. Gabe se ofreció a llevarme a una cafetería para hablar. Acepté porque necesitaba mas que nunca contarle a alguien lo miserable que me sentía.

- Y bien? Qué opinas?- Pregunté luego de contarle todo el relato.
- Que te has metido en un problema grave Lola, aun así me molesta que te haya hecho eso-
- Si solo fuera para dañarme, no es la persona que creí que era-
- Nadie es quien parece, mucho menos conociéndolo solo 20 días Loli-
- Tienes razón Gabe, gracias por oírme-
- Fue un placer, cuando me necesites estaré en este numero- Y me tendió un papel con su teléfono.

Llegué a mi habitación y me dediqué a llorar.