EL COLOR DE LA ESPERANZA

Hama

—¿Quién es cariño? —cuestionó con mucho interés Fran a su novia.
—Es papá —respondió ella.
—¿Pasó algo malo o te acompaño?—dijo Fran.
—No,no, estaré bien— anunció Leticia recogiendo lo que trajo.
—Estás segura, es no quiero que nada malo te ocurra—
—Ya te dije que estaré bien, no voy a la guerra, voy a ver a mi papá —,dándole un beso corto dijo—nos vemos pronto,hasta pronto a todos — se despidió Leticia.
Fran y yo la acompañamos hasta la puerta. —Hasta pronto a ti también Soraya— musitó y le volvió a dar otro beso a Fran.
—Sí, hasta nunca,bruja— murmuró casi inaudible Soraya.
Juro que pude ver como le hinchaba la vena de la frente en el momento en el que Leticia,le dió el último beso a Fran.
—Que siga la fiesta— gritó Fran nada más irse su novia.

Elvira.

Leticia se fue y noté como se aliviaba un poco Aya.
Repito que Aya no me habia confesado nada hasta el momento pero se notaba a leguas y tampoco quería preguntárselo.

*—¿Pero de verdad le gusta ese capullo?,
si nada más irse su novia lo celebró como si no tuviera corazón... En fin , a gustos colores— discutí unos segundos con mi voz interna.

Tras la salida de Leticia, el juego prosiguió.
—Creo que le ha tocado a Fran y Soraya— anunció Larry con esa voz tan varonil.
—No creo que debamos seguir con ese juego— fue la respuesta de Soraya.
—¿Enserio...crees que te libraras tan fácil de mi?—dijo Fran.
Y por primera vez,creo haber estado de su lado en todo la vida.
—Elegid papeles— ordenó Larry.
Ambos eligieron, a Soraya se le veía claramente disgustada pero eran las "normas".
—A ver qué salió — mirando a soraya dije yo,
—qué quieres que te parta la cara— preguntó ella en con tono violento pero estaba de broma, o eso espero.
—Oye, parece que disfrutas viendome sufrir— añadió ella con la cara de loca que solía tener cuando se altera.
Yo sonreí y luego la dije —no sabes cuánto lo disfruto Aya, no sabes cuánto—.
—A mi me ha tocado...fundirme en un beso lento con la renacuaja—musitó la larva haciendo alusión a Soraya.
—No, eso si que no —protesto al instante Aya.
—Las normas son las normas —murmurro Larry, a lo que Aya le contestó con una mirada fulminante.
—Sí, así es— asentí yo también. En realidad,era todo un poco raro esa noche,yo jamás había estado en acuerdo con esos dos idiotas y de repente parecía una abogada de ellos dos.
Me hizo algo de gracia que mi amiga no tenia a que o a quien agarrarse, eso jamás había pasado en todos esos años que eramos amigas.

—Vas a seguir montando tanto drama o qué, no muerdo— cuestión que salió entre los labios de la larva.
—Tú te callas— respondió Aya algo relativamente más relajada.
—Mocosa—
—Cerdo—
—renacuaja—
—larva—
—estupi..— ; —¿¡vais a parar de una vez!?— les interrumpió Larry. Y menos mal,porque esos dos eran ratón y gato.
—¿Soraya,qué te ha tocado en el papelito?— preguntó Larry aún con el timón del juego.
—De..dejarle una ropa interior mía — susurró Aya.

Larry.
El juego seguía y a mi prima le tocaba fundirse en un beso lento con Fran, y a ella como ya sabéis le había tocado dejarle a Fran una ropa interior suya.
Después de unos 40 segundos de tensión y silencio sepulcral, los dos se dieron ese beso tan lento y placentero para ambos por lo que se podía apreciar en sus rostros faciales. Mi prima había entrecerrado los ojos deslizando suavemente el labio superior suyo con el inferior de Fran.

Era un beso tan pasional que creo que por unos segundos se les olvidó nuestra presencia. Es más, creo que sin decirnos nada entre Elvira y yo asentimos en no interrumpirlos.

—No lo besas tan mal enana— pronunció Fran después del beso tan películero que se acababa de dar con mi prima.
—Qué te habías creído cabrón — replicó ella casi sin aliento.
—¿Vemos una peli?— propuso Elvira de manera espontánea, y todos asentimos.
Fran puso una película de vampiros que nos encantaba a él y yo.
Estoy seguro que a mi prima le daba muchísimo miedo pero eso jamás lo admitiría y mucho menos delante de Fran.
Nos sentamos en el sofá que era amplio, las dos amigas se acurrucaron entre un par de mantas que había traído Soraya de su cuarto. Entre tanto que comenzaba la peli yo me fui a la cocina para traer un par de cuencos de palomitas precocinadas.
Nos dispusimos para ver la película y por un largo tiempo creo que a todos se nos había olvidado que teníamos teléfonos móviles. El caso es que la peli daba miedo y estoy seguro que después del beso Soraya ya se atrevería a casi todo, más que nada para no mostrar debilidad ante Fran quien la miraba de reojo constantemente.
—¿A que es divertida enana?— preguntó Fran con mucho vacile a Soraya.
—Tú estás mejor callado— dijo al instante mi prima, como si lo esperase.
Fran sonrió negando con la cabeza y dijo —no dirás lo mismo esa noche cuando tengas que dormir solita—
y Soraya le fulminó con la mirada y continuó viendo la película.
Acabó la peli y entre conversaciones,discusiones y risas muchas risas acabamos la noche. Recogimos el fuerte y nos fuimos a las habitaciones.
—Eh tortolitos que tengais dulces sueños juntos— dijo Soraya recordándonos que debíamos dormir juntos Elvira y yo.
—¡Usar condón!— gritó Fran antes de entrar en el cuarto de Jerry,instantáneamente le mostré el dedo corazón en señal de protesta.

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