—Iván..tienes que prometerme algo— salí de bañarme mientras Iván estaba en la cama pensativo —Promete que jamás le dirás a nadie lo qué pasó..promételo Iván—
—Lo prometo— bajo de la cama y camino hacia mi tomando mi cara con sus manos —pero no quiero que te sientas como te estás sintiendo ahorita— no quiso decirlo como es pero tiene razón, me siento asqueada de mi misa —¿No es la primera vez verdad?—
—N.No— me pegue a su pecho abrazándolo recordando lo qué pasó la primera vez
—No llores no te quiero ver así— su mano pasó por mi cabeza calmándome mientras lloraba en su pecho —duerme un rato, te hará bien— me llevo a la cama y me tapó pero aún así tenía frío
—Q.Quédate conmigo— se quito la camisa y se acosto junto a mi abrazándome, sentir lo caliente de su piel me hacia abrazarlo mas
—estás helada— tocó mi cara y me tapó más —traeré más cobijas—
—No, no hace falta sólo quédate conmigo— antes de que se pusiera de pie lo detuve —Solo te necesito a ti— era verdad, con solo estar en los brazos de Iván todo estaba perfecto
—duerme tranquila aquí estaré yo—
꧁ɴᴀʀʀᴀɪᴠᴀ́ɴ꧂
Mi Estrella...odio lo que le pasó pero no puedo hacer nada porque me lo prohibió. A mi las mujeres me pueden inspirar lastima compasión o amor pero nunca temor...eso fue hasta que la conocí a ella, hasta que conocí a Estrella Zambada. Por naturaleza un hombre siempre será más fuerte que una mujer, Estrella a demostrado que eso no es cierto, menos en esta ocasión donde el perro de Alfredo la violó, aunque ella me dijo que no hiciera nada eso es imposible
Verla dormir es como ver a un ángel dormir, hasta dormida su mirada aún brilla, esos labios siempre jugosos y carnosos su cabello largo y suave, aunque se lo haya pintado rubio aún se mira hermosa, siento sincero ella es lo más valioso en mi vida. Podrán haber miles de mujeres pero al elegir a una ella siempre será esa mujer. Me quise poner de pie pero ella aún dormida se aferró a mi, baje la mirada a sus hermosas manos en mi abdomen y recordé el anillo que siempre cargo conmigo el anillo que nunca puse en su dedo pero siempre fue para ella, baje a mi pantalón y saqué el anillo colocándolo en su dedo
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La única mujer en mi vida siempre será ella, esa plebita que siempre rezonga la que conocí por primera vez en su fiesta de bienvenida con la que pase en Mazatlán la mejor noche la peleonera la berrinchuda corajuda, podrá tener miles de defectos pero para mi son perfecciones
꧁ɴᴀʀʀᴀᴅᴏʀᴏᴍɴɪᴄᴇɴᴛᴇ꧂
Como ordenado Alondra llegó a la nueva casa con todo y maletas —lleva mis maletas al cuarto principal— aventó las maletas delante de la nueva sirvienta y ella hizo caso sin saber que ella es solo la amante
—Sus cosas ya están todas ordenadas señora—
—Bien ahora prepárame algo de comer ¿sabes a donde fue mi esposo?—
—No señora, yo apenas llegue...perdón si soy imprudente pero el señor se consiguió a una esposa muy hermosa—
—Pues dice lo a el...—
—No se preocupe las demás solo son unas zorras que quieren su dinero pero jamás serán la principal como usted— le dio mucha seguridad a Alondra, se sentía la señora de la casa y de Iván
—Eso si pero yo soy la única...¿como te llamas?—
—Leonor Señora—
—Leonor quiero que cuando no esté me digas quien entra y quien sale mas si son mujeres—
—No se preocupe señora yo seré sus ojos y sus oídos siempre—