PIÑACOLADA || son como niños

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Ya era de noche, estabamos recostados hablando por "teléfono" los unos con los otros. Habíamos instalado unos telefonos de juguetes con vasos e hilos luego de que los padres nos decomisaran los nuestros debido a que "debemos disfrutar nuestros dias aquí"

— ¡Oigan, dije que sin celulares! ¡Niños teníamos un trato! — Lenny entró a la habitación viendo lo que haciamos, posó la vista en sus hijos y sonrió al ver a Becky y a Liam riendo abrazados — Esos son...¿vasos? —

— ¡Si! Charlotte y Alice nos enseñaron, son geniales — Keithie sonrió emocionado — Ahí está el de Becky — la señaló.

— Mira, tengo un vaso en espera — mostró sus vasos — Te llamaré, estoy con Bob Esponja.

El perro de los Lamonsoff tenía un vaso en su hocico por lo que se escuchó su ladrido distorsionado — ¿Oigan eso fué un pavo? — preguntó su pequeño dueño.

— André ¿Puedes oírme? — preguntó Greg.

— ¡Atención niños! Hubo una solicitud de la compañía telefónica ¿quieren instalar estos teléfonos en los dormitorios de los adultos de inmediato? — dijo Lenny a través de un vaso y todos salimos a instalar los teléfonos en el cuarto de nuestros padres.

Los Feder ya habían empacado y estaban subiendo las cosas a su auto mientras los niños jugábamos. Estabamos tratando de ver quién lanzaba la roca más lejos, lamentablemente mi actividad física es nula y nunca podía lanzar la roca tan lejos como otros. Por más que intentaba e intentaba no podía a lo que me frustré, Liam se posó a mi lado y lanzó una roca llegando al doble de lejos de lo que yo lo había logrado, sonrió victorioso y yo rodé los ojos.

Liam se adentró al agua un poco junto con su hermano y André mientras la madre de los primero venía — ¿Sabe lanzar rocas señora Feder? —  preguntó Donna.

— ¿Estás bromeando? Soy la mejor en esto — le pidió una roca a su hijo — Miren esto — se preparó y lanzó la roca, pero calculó mal y le dió en el estómago a Liam todos hicimos ruidos de dolor y yo no pudé evitar reirme un poco a lo que me miró mal — Lo siento mi amor ¿estás bien?

— Si, mamá me alegra ver que diviertas — dijo adolorido y todos reimos.

Minutos después de que la señora Feder entrara a la casa nuestros padres nos llamaron y nos dijeron que nos prepararámos para ir al parque acuático. Antes no había ido al parque acuático, por lo que no sabía nadar, pero eso no me detuvo de emocionarme. No traía trajes de baño conmigo, pero no quería comprar uno así que me puse un top con un short negro y listo.

Ya estabamos en el parque acuático y los chicos y yo compramos unos helados. Vimos a mi padre llegar con las hijas de Rob y rodé los ojos cuando dijeron donde compraron los vestidos de baños. André y Greg al verlas apretaron tanto su puño que botaron su helado al suelo a lo que les dí un leve pellizco — No desperdicien la comida— cuando mi padre pasó a mi lado me tiró una toalla en la cara y dijo — Cúbrete — sonreí divertida y me fuí de ahí.

Ya estábamos en la fila para subirnos a una atracción del parque.

— Esta fila no avanza — se quejó Charlotte y todos estuvimos de acuerdo.

— Yo solo quiero leche de mami — le dijo el pequeño Lamonsoff a su padre.

— Ya lo sé hijo —

— Si quiere leche de mami denle leche de mami — dijo Lenny apoyando al niño.

— Leche de mami, leche de mami, leche de mami —

— Que no, diablos, no más leche de mami ¿sí? Si quieres leche tendrás que tomar leche normal — dijo — A ver, niño — le quitó la leche a un niño y este se quejó — No me discutas niño, toma un dólar — le dió el dólar y el niño se fué — A ver, bebe esta leche del envase.

— No sé si mami esté de acuerdo con eso —

— Solo bébela ¿si? Mira te enseñaré — bebió un poco y se lo devolvió a su hijo.

— Está bien — bebió de la leche — ¡Soy como mi papi! — dijo emocionado y sonreí con ternura.

Ya estabamos cansados de esperar en la fila y nos estabámos quejando por lo que los padres dijeron que cuando eran niños ellos se colaban. Nos llevaron a dónde antes entraban en la fila y fuimos de uno a uno bajando la resbaladilla. Que divertido fué estar en la piscina, disfrutaba tanto del sol, pero no lo suficiente como para quedarme mucho tiempo así que fuí por algo de comer.

Regresé con una papitas y cuando llegué ví como Liam se lanzaba desde una ¿tirolesa? Y hacía un salto perfecto, cuando salió todo el mundo le aplaudió, incluyendome. Cuando me vió me guiñó el ojo, y por primera vez sentí algo que jamás había sentido.