Cortos "One shots" de IsagixBachira/BachiraxIsagi.
Las imágenes y personajes utilizados en esta historia no me pertenecen sino a sus respectivos autores.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Bachira estaba sumido en sus pensamientos. tales pensamientos y preguntas como "¿Por qué sucede esto o aquello?" surgirían en su cabeza.
No podía entender el hecho de que otros tenían cosas que él no tenía. Y por qué siempre fue excluido. Cosas como estas le hacían odiar tener que asistir a clases.
Odiaba sentarse solo sin un compañero de banco. Y sin nadie con quien hablar durante los recesos.
Envidiaba el hecho de que otros pudieran tener tantos amigos y daría cualquier cosa por tener un solo amigo.
Por eso, cuando supo que tendrían un nuevo compañero, la curiosidad lo invadió. Más y cuando decidió sentarse a su lado e iniciar una conversación ligera después de su presentación.
Su nombre era Isagi Yoichi. Y la verdad sonaba bien.
Yoichi y Meguru en poco tiempo se llevaron bien. Se podría decir que eran inseparables. No había lugar al que no fueran juntos. El trabajo en grupo no hace falta decir que lo hicieron juntos. Aunque Bachira no era el mejor estudiando, decidió esforzarse un poco para mejorar.
Al principio Isagi de alguna manera parecía bastante "deprimido" y eso fue lo que Bachira había notado en los primeros días que hablaron.
Y si Yoichi lo hizo tan feliz, lo menos que considero hacer por él es devolverle el favor y animarlo.
Todos los días Meguru pensaba en alguna locura nueva, muchas, pero solo dejaba las que le parecían mejores y descartaba las más simples.
Definitivamente estaba complacido con el hecho de que podía escuchar pequeñas risitas escapar de sus labios. Y verlo sonreír.
El de ojos azules a su lado se sintió agradecido de haberlo conocido. Amaba que aquel chico de ojos color dorado estuviera mirándolo siempre con su mirada iluminada y con palabras de aliento en saliendo.
Tiempo atrás ninguno de ellos necesariamente la estaba pasando bien, pero ahora se podría decir que la compañía y la alegría invadían sus vidas.
Mientras se tuvieran el uno al otro era difícil que hubiera días tristes en sus vidas.
Meguru y Yoichi agradecian no tener que estar más solos y tener a alguien que los acompañara y estuviera a su lado.
