-ODIAME POR PIEDAD (Yo te lo pido)

5. Lejos de ti no se vive feliz

LUCIANO

La adrenalina corría por mis venas mientras trataba de alcanzar a Julia que se alejaba de mí, justo me pareció que aquel hotel era enorme, ella esquivó todos mis intentos por frenarla mientras gritaba su nombre desesperadamente, no podía creer lo que me estaba pasando, mis peores pesadillas siempre giraban en torno a que alguien descubriese lo que pasaba entre Soledad y yo, me aterraba si quiera pensarlo por las consecuencias que podría tener, ahora estaba aquí enfrentandome a ese terror convertido en realidad y justo con la última persona que hubiese querido que se enterara. Cuando ya íbamos llegando a una de las salidas del hotel alcancé a tomarla del brazo y la frené en seco.

-Julia por favor, espera

El aire me faltaba y el corazón parecía que se me iba a salir del pecho, ella se intentó soltar de mi agarre pero solo lo reafirmé, no quería hacerle daño pero no podía arriesgarme a que se fuera nuevamente.

-Soltame Luciano, no quiero verte más

Su voz se cortaba mientras se retorcía tratando de que la soltara, me miró a los ojos y me partió el corazón al ver su mirada encharcada por las lagrimas.

-Julia escucha, deja que te lo explique todo

le insistí

-¡NO! no quiero saber nada,
lo que vi fue suficiente

Me dijo cortante.

Me di cuenta que estábamos subiendo la voz y que además estábamos afuera del hotel y que había más gente allí, por más de que necesitaba arreglar las cosas no me podía arriesgar a un escándalo, no solo por mi imagen sino por las consecuencias que le podía traer a Soledad, tomé aire y mire a mi alrededor contemplando mis opciones, volví a mirar a Julia sin soltarla tratando de apelar a su cordura.

-Deja que te lleve al hotel y hablamos ¿Sí?

Le supliqué

Ella también observó a su alrededor brevemente y vio que algunas personas de seguridad no nos quitaban la mirada de encima y como si me estuviera haciendo un favor solo asintió y se soltó de mi, caminando hacía donde había dejado el auto, se subió en el puesto de adelante y yo hice lo mismo y conducí.

Ella solo se quedó en silencio mirando hacía al frente, yo no sabía cómo abordar la situación, iba a una velocidad minima tratando de dilatar la llegada al hotel.

-No puedo creer que me hayas invitado para esto...

finalmente ella rompió el silencio

-Julia lo que viste... Te juro que no es nada de lo que estás imaginando

-¿Y que estoy imaginando?

Tenía que pensar cuidadosamente mis siguientes palabras para no alterarla más de lo que ya estaba.

-Fue un beso sí, pero es la primera vez y no significó nada, creo que para ninguno de los dos...

Julia soltó un risa entre dientes cargada de incredulidad.

-Sabes que la gente siempre decía cosas de ustedes dos... rumores... incluso cuando empezó lo nuestro. Yo no me creí ninguno por supuesto...

-Es que no son verdad

La interrumpí de inmediato

-Eso creía yo, hasta que vine esta noche contigo y me di cuenta como la perseguías con la mirada, hasta me pareció que me trajiste solo para incomodarla...

-No digas eso Julia, no es verdad...

Me sentí como la peor basura del mundo porque algo de razón tenía.