¡Buen Bufet, Buen Comer! | Missabowl

- ̗̀↳ Padres.

Obs: Omegaverse, modificación leve de las personalidades.

• Missa es un omega, pero debido a la cantidad insana de supresores que tomaba quedó infertil.

• Philza es un alfa de un aroma casi indetectable por lo que solo cree que podrá oler su aroma, su pareja destinada.

MISSA × PHILZA

La idea de ser padres podía asustar a muchos, hacer sentir felices como angustiados, pero Missa estaba confundido, ¿sería un buen padre?, él se había provocado un daño irrefutable volviéndose infertil, temía dañar de alguna forma al huevo que debían elegir como su nuevo bebé, miraba cada huevo y las personas se habían juntado con sus respectivas parejas, él seguía sin saber quién era su compañero, miró a un pequeño huevo que poseía un flotador, se veía gracioso o graciosa, desconocía aquello, pero le dio ternura como se puso feliz por simplemente verlo.

── ¡No mames, me tocó con el loco que da vueltas hacia atrás!. Escuchó gritar a Mariana como si fuera un pecado, aquel Beta sin dudas era un amargado con la idea de juntarse con los angloparlantes por culpa de Foolish.

Missa quedó embobado mirando el huevo que tanta ternura le provocaba, sintió un aroma fuerte de roble y canela detrás suyo por lo que se giro ante esas feromonas, a unos metros suyo estaba el rubio, Philza, no tuvo el honor de conocer a fondo pero verlo hablar con Quackity le hizo entender que capaz él era su compañero.

── ¿Tú eres Missa?. De repente apareció, incluso el huevo se asustó.

── Eh, sí sí, mucho gusto, ¿tú tienes el D?. Preguntó confundido.

── Sí, me alegra tener a un beta de compañero, será fácil, ¿te gusta este huevo?. Missa iba a corregirle pero Quackity hablo explicando sobre escoger al bebé nuevo y darle un nombre, de allí podían irse a comenzar la crianza.

── Podemos ir a mi casa, allí creo que podremos cuidarlo bien.

Solo afirmó para ir a donde vivía este, cargando el huevo aferrándose a este con cuidado de no romperlo, hacer las actividades como alimentarlo y cuidarlo era fácil, se habían unido bastante para proteger a Chayanne, quien era de los pocos de tener una familia funcional, cantos, cuentos y bastantes besos recibía del omega, Philza era igual, tranquilo y reservado.

Pero un día, Missa no llegó como de costumbre, cosa que lo alarmó, aunque no parezca, sus instintos de alfa nacían con aquel muchacho, era extraño, era un beta, ¿no?, pero algo si era claro, lo necesitaba. . . ¡para cuidar a Chayanne, claro!.

── ¿Missa?, es cierto, esta teniendo su ciclo de celo, por lo que se encierra en ese tiempo, no te preocupes, pronto vendrá. Explicó Roier, el mejor amigo de Missa.

── ¿celo?.

── Pues sí tonto, es un omega muy sensible por los aromas, desde que esta contigo. Rápidamente se quedó callado, miró fijamente al rubio que se mostraba sorprendido por la jerarquía de su compañero. ── ¡No mames, es tu destinado!, Uhhhhh~, Escuchaste Bobby, ¡Se besan, se comen, comparten el chicle!.

Cantó de manera infantil haciendo que Bobby y Chayanne saltarán por la canción, ¿Por eso estaba tan preocupado?, ¿por eso su humor estaba tan desordenado?, quería negarlo pero era difícil con el amor incondicional que Missa le ofrecía apesar de solo ser una misión.

── ¿puedes cuidar a Chayanne mientras veo a Missa?. El castaño se quedó callado.

── A ver, a ver, a ver, entiendes ¿qué esta en su celo no?, ¿entiendes muy claramente que si vas, probablemente sufrirás tu celo?.

Era arriesgado, Roier no tenía problema en cuidar al hijo de su mejor amigo, le preocupaba que un tipo tan grande como Philza destrozara el trasero de Missa.

── Sí, por eso quiero ir a verlo, necesito saber si es mi destinado.

── Nomas no le rompas el culo a mi amigo, cuidadito con rompermelo porqué también es mio ese culo. Al ver a Philza sacar su hacha se ofendió. ── ¡Culo sin dueño es del pueblo!, viste mijo, me querían Nerfear por el bien de la trama.

── No te mato porque vas a cuidar a Chayanne pero lo haré si le pasa algo.

Se arrodillo abrazando al huevo con cuidado antes de dejarlo con el mejor amigo del omega, quien cuidaba con mucho amor y cariño a su hijo, viendo que venía Jaiden, le dejo a cargo su hijo en lo que volvía, asegurando que hoy o mañana ya volvería.
Suspiró para controlar sus nervios mientras iba a donde estaría el dichoso greñudo, nunca se sintió así con alguien realmente, jamás estuvo ansioso, ni siquiera en su pasado, el deseo de tener una pareja jamás estuvo en su panorama y aveces dudaba de su sexualidad, solo se concentró en encontrar a Missa.

Al llegar a la casa, bien escondida por cierto en aquella muralla, el aroma que desprendía era demasiado fuerte que le hizo jadear, cada instinto suyo parecía activarse incomodando a su lobo interno, controlando aquello lo mejor que podía camino con cuidado de asustar, sus feromonas jamás se había mezclado con las de alguien antes y se notaba por el aroma que estaba demasiado empalagoso, el aroma de roble con toques de canela se mezcla con el contrario, escuchando quejidos suaves provenientes de una habitación escondida, tocó la puerta lo mejor que pudo, realmente era difícil controlarse.

── Missa, it's me, Philza, Are you okey?. Su voz se volvía ronca, se apoyo por el marco de la puerta, quería demasiado entrar y ayudar al necesito omega pero no podía asustarlo, definitivamente no deseaba asustar a su compañero.

── ¿Philza?. Su voz parecía rota, seguro del llanto, ¿por qué lloraba?.

── Sí, Vengo a. . . Saber como estas.

Realmente era el peor momento para entablar una conversación, la puerta se abrió lentamente dejando ver al amante de las calacas rojo de vergüenza, sudoroso.

── Ay por Dios. Dijo Missa repentinamente ante las feromonas del otro, Philza notó aquello, se acercó con cuidado para ayudarlo a estar de pie, guiandolo a la cama donde se escondía debajo de cobijas, soltando suaves gemidos y quejidos.

── Sé que suena atrevido, pero déjame ayudarte, no quiero verte sufriendo. Su voz sonaba preocupada, sabía que algunos omegas podían llegar a sufrir mucho en sus celos por la incomodidad o el dolor incluso del calor, con mayor de los cuidados esparció sus feromonas para calmarlo.

── Confío e-en ti.

Gracias a los supresores y la cantidad insana que consumía generalmente, sus ciclos de celos duraban poco, aparte de la casi nula capacidad con concebir, Missa estaba bastante bien.

Solo podía concentrarse en ayudar a su ahora omega, luego de aquel acto que duró bastante con ayuda del celo, ambos acabaron derrotados, Philza usaba su cuerpo para proteger al cansado omega quien estaba bastante agitado pero mas tranquilo, recibiendo varias lamidas en donde fue marcado, había llorado bastante cuando los dientes del inglés perforaron su piel, pero estaba contento por ello, para no decir feliz.

── ¿Dónde esta Chayanne?. Preguntó entre bostezos.

── Tranquilo, Jaiden lo cuida. . . Estará bien, descansa. Dio un suave beso en los labios ajenos para acobijarlo y dormir.

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