Un chiste, un juego (Sans vs. Jevil)

Capítulo 4: Sentencia

Sans no se sentía listo para ir de inmediato a enfrentarse cara a cara con la caótica amenaza, pero si dejaba pasar algo más de tiempo, podría terminar muy, muy mal. No le quedaba más opción que usar un atajo. Lo cual era complicado, puesto que no sabía dónde estaba, ni cuáles eran los caminos. Sería casi cuestión de suerte esta vez.

Dio un largo suspiro, miró a su alrededor, y luego hacia el punto donde veía a ese ser de tan peligroso poder. Cerró los ojos y caminó en línea recta, en dirección a dicha amenaza. Después de unos segundos de paso firme, abrió los ojos de nuevo y...

Jevil: OH HO HO HO, UN VISITANTE, UN VISITANTE

A sólo tres metros de Sans, estaba su adversario, Jevil, quien flotaba unos cuantos centímetros sobre el aire, rodeado de árboles caídos y un aire que olía a... ¿Qué era ese olor?

Este despiadado enemigo era... UN MALDITO BUFÓN. Además de su ridícula vestimenta, llevaba una cara espantosa encima, una mirada desgarradora (¿O desgarrada?) y una sonrisa de oreja a oreja que representaba LA AUTÉNTICA LOCURA. Sans ya no sabía qué pensar.

Aunque no podemos decir que Jevil no se llevó una sorpresa también con la apariencia de este visitante. Para ser un Iluminado se veía bastante... ¿Apagado? Imposible de explicar por qué, mucho más recordando la imborrable sonrisa amigable del esqueleto y su estilo tan casual de ser. Sólo que había algo en su mirada un poco perturbador (¿O perturbado?).

Jevil: ESTO ES EXTRAÑO, EXTRAÑO, ¡PERO QUÉ IMPORTANCIA TIENE! PRONTO O TARDE, HÉROE O NO, UN TRÍO O EN SOLITARIO, ESTO ES UN JUEGO QUE CON TODOS QUIERO YO JUGAR, ¿NO QUIERES JUGAR TÚ TAMBIÉN, TAMBIÉN?

Sans: no realmente, sólo quiero saber... - Sans extendió ligeramente su mano izquierda, medio poniéndose en guardia. - ¿qué clase de juego has estado jugando?

Jevil: OH, NO ES MÁS QUE UN SIMPLE JUEGO DE NÚMEROS~

Lo que Sans no veía venir es que la simple explicación del juego era ya su comienzo. Una oz que apenas alcanzó a ver estuvo a punto de partirlo a la mitad cayendo desde quién sabe dónde. Con las justas consiguió esquivarlo.

Jevil: CUANDO TUS PUNTOS DE VIDA BAJAN A CERO, ¡PIERDES! Y ENTONCES ESOS NÚMEROS ¡PASAN A SER MÍOS! ¿NO TE PARECE ESO FANTÁSTICO, FANTÁSTICO?

Sans: si quieres mi opinión honesta, no - Sans dio un paso atrás, y mostró algo más de seriedad en su mirada, sin moverse su boca. - ahora, si intentas subir un sólo número más, las consecuencias no serán nada buenas - Fue interrumpido.

Jevil: ¿CONSECUENCIAS? ¡NU-HAH! ¿ACASO NO TE HAS ENTERADO, HUESUDITO? ¡LO QUE HAGAMOS NO TIENE IMPORTANCIA EN REALIDAD! ¡AQUÍ SOMOS LIBRES, LIBRES! ¿NO PODEMOS TENER MIENTRAS TANTO, UNA SIMPLE DIVERSIÓN? ¡AJAJAJA!

Sans: ... está bien, tú lo has decidido, así que, ¿estás listo para pasar un muy mal rato?

Eso último no sabía si se lo decía a Jevil o a sí mismo. Jevil comenzó a reír alocadamente.

Jevil: ¿UN MAL RATO? ¡UN JUEGO DESAFIANTE HA DE SER! ¿QUE SI ESTOY LISTO? ¡POR SUPUESTO QUE LO ESTOY, LO ESTOY! ¡NO PODRÍA PERDERME DE ESTE ESPECTÁCULO TAN ESPECIAL, ESPECIAL! UNA BATALLA ENTRE LA LUZ Y LA OSCURIDAD, CUANDO ESTAS NO DEBERÍAN HABERSE ENCONTRADO AÚN ¡UE HEE HEE! ¡AHORA, QUE LOS JUEGOS COMIENCEN!

Cada uno vio en su adversario a un pecador, y la GRAN BATALLA comenzó.