3. Después de las 12

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Narra Tomás:

Ahora mismo estoy en mi departamento ya que Lucas me dijo que viniera.

Si hubiera sido por mi me hubiera quedado ahí, con trueno.

Lucas me está viendo con una cara de pena y decepción, no necesito más esa cara, por favor.

-Mira cómo estás Tomas.

Pobre Lucas, pobres todos, no merecen ser mis amigos, no los merezco.

-También te extrañe h- Al decir eso el me miro con una peor cara y suspiro.

-¿Como estas?

Como la mierda porque acabo de perder a la única mujer que he amado tanto.

-Bien, dejándolo pasar.

-No me mientas.

-¿Como me ves Lucas?

-Horrible, extrañándola.

-Ahí tienes tu respuesta sincera.

-Hable con Mauro.

Al escuchar ese nombre no pude evitar poner una mueca.

Sabía muy bien de lo qué pasó no era culpa de Mauro, pero era inevitable poner esa mueca sabiendo que él es su mejor amigo.

-Aja, y que te dijo?- intentó responderle sin importancia alguna.

-Ella también está mal, no la reconocí, no es la Dará de siempre, esta rara.

Yo solo asiento.

-Se que no te gusta hablar de...

No lo dejé terminar, no quería hablar más del tema.

-Ella se quiso ir Lucas, yo no la aleje, ella se alejo.

Lucas solo asintió.

-Bien, a lo que venía, te quiero a las 11 arreglado, vamos a salir.

-No tengo ganas.

-No era pregunta, era un aviso.

El solo dijo eso y se fue, sin dejarme decir ninguna palabra más.

Supongo que tendré que ir.

Igual, no me haría mal salir un rato.

****
11:23 p.m

-Ehh Cenfe, y esa facha amigo?- Escucho como Tony me grita, a lo que ma hace reír.

-Vos no te quedas atrás Neo.

Con Lucas habíamos llegado un boliche en el cual nos esperaban todos los de modo diablo, bueno no todos, menos Dara.

Algo en mi interior tenía la esperanza de verla, pero ya veo que esa esperanza se fue al carajo.

Le avisé a mis amigos que me iba hacia la barra.

Al estar ahí me senté y pedí uno de los tragos más fuertes que tengan.

Estuve ahí sentando un rato, cuando ya iba por el tercero, veo una figura de una mujer demasiado bella para mi gusto.

Era una morocha hermosa, con demasiados tatuajes y un flequillo que le llega a las cejas.

Ella se da cuenta que la estoy mirando y me guiña un ojo, hace un movimiento para que me acerque a ella.

Estaba lo suficiente borracho como para saber que estaba haciendo, solo sabía que me estaba acercando a ella.

Me acerco ella mientras esta bailando, ella pose sus brazo sobre mi cuello.

Al mirarla a los ojos, veo que ella está igual que yo, casi inconsciente por drogas o alcohol.

Ella saca algo de su bolsillo, al ver que era veo dos pastillas.

-¿Quieres una lindo?- Yo solo asiento y ella pone una pastilla en mi boca y otra en la suya.

Y así se basó la noche, yo y esa morena, bailando, tomando, riendo y olvidándonos de cada ser de nuestro alrededor.

Esa noche por fin no pensé en Dara y por un lado era un alivio eso.

Y después de las 12
Salgo con mis chicos a ver en qué parte podrías estar
Lo siento en el mal, la veo en el bar
Después de las 12
Salgo con mis chicos a ver en qué parte podrías estar
Lo siento en el mal, la veo en el bar.

Arruinados; C.R.ODonde viven las historias. Descúbrelo ahora