Arruinados; C.R.O

10. La calle lo sabe

Narra Tomás:

Mi vida definitivamente es una mierda, me siento tan solo a pesar de que tengo compañía todas las noches.

No he vuelto a saber de Julieta.

Ni tampoco de Dara.

Aunque por lo que se Julieta está preocupada y Dará esta en la misma mierda que yo.

Otra noche más en un bar.

Otra noche más donde llevo a una chica a mi cama.

Otra noche más donde me encuentro perdido.

Otra noche más donde busco paz en drogas y putas.

Putas drogadas en mi departamento, al igual que yo.

Líneas blancas en cada lugar, humo por todo el departamento, putas en ropa interior, y yo perdido en drogas.

Últimamente me he preguntando por qué mi única solución fue drogarme.

Aunque no sabía la respuesta meses atrás.

Ahora lo se.

Por que en un mundo drogado la veo a ella amándome y quedándose conmigo para siempre.

Dará, Dará, Dará...

¿Que carajos me hiciste?

Consumo la pastilla que me dio una de las mujeres qué hay ahí.

Esas pastillas me hacen ver todo más claro y con más color.

Me hacen verla..

Si veo a Dará quedo rendido ante su belleza.

Puede que ella no sea la única mujer en el mundo.

Pero su belleza es única.

Es ojos azules, ese pelo azabache, sus labios redondos y que siempre se mantenían un rosado claro.

Su diminuta altura, lo pálida que es su piel y esa cintura.

Ella es hermosa físicamente pero también los es emocionalmente.

La capacidad que tiene para perdonar, su carácter fuerte cuando le molesta algo, lo valiente y fuerte que es, lo extrovertida y graciosa que puede llegar a ser. Y el amor tan grande que tiene para entregar.

Definitivamente, yo sería capaz de matar por Dará.

Pero la cague.

Y ya no hay solución, o capaz la haya pero yo no la encuentro.

No queda otra opción que solo anhelar su presencia.

Tanto para ver y yo simplemente pienso en su belleza.

Ella sacó una canción, se llama plegarias.

Tal vez y esa canción es para mi.

Tal vez que por esa persona que ella reza para que no se pierda soy yo.

Pero también tal vez no hay salvación para la gente como yo. Sin importar cuánto rezas.

Las sustancias me ayudan a darle paz a mi vida.

Así que inhalo una línea blanca que estaba en la mesita de centro adelante mío.

Tambaleándome me voy hacia el balcón.

Saco un porro cuando ya estoy en el balcón.

Miro hacia la cuidad, viendo el horizonte.

Tantas drogas ya hace que me olvide de todo. Pero menos de su nombre.

Miro hacia el cielo, la noche se ve perfecta bajo mis ojos.

El cielo es el único que lo ve todo, ve hacia abajo y hacia arriba.

Ahora en mi mente se me vino a la cabeza otra morocha.

Julieta.

Ella intenta ayudarme y yo acá arruinándome.

Ella no sabe lo importa que se volvió para mi aunque yo no sea capaz de amarla.

Mis penas me las trato solamente yo.

Ella no merece hundirse conmigo.

Aunque a ella eso no le importe.

Solamente pido paz, tranquilidad. Pero en un mundo así eso es lo último que se da.

Mataría por ella
Si la veo quedo rendida ante su simpleza
Los síntomas empiezan, por mi nadie reza
No queda otra opción, que morir dentro 'e la pereza
Me hundo en la maleza, sangre por mi pieza
Tanto para ver y yo perdido en su belleza
Droga arriba de la mesa, nuestra naturaleza
Tal vez no hay salvación para las gente a la que rezas, yo
Sigo cayendo en lo prohibido de tu mente.

Tomi solo pido que te dejes ayudar pero no hundas contigo a Juli😓

Espero que les haya gustado, no se olviden de votar🩷

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