Transmigrando En La Peor Concubina (BL)

Capítulo 4

Capítulo único y exclusivo de 

Habían pasado cinco días desde que Le Huan transmigró en Na Juan, y después de dos días, Le Huan finalmente había hecho el colorete, lo puso en la cicatriz de Meilin y también puso un poco en la cara. Meilin se miró en el espejo y se sorprendió.

~ "Wow, Señora, este sirviente se ve bonito, sus habilidades son excelentes, este sirviente se ve espléndido", dijo Meilin de una manera alegre.

El colorete no fue tan impresionante; de hecho, estaba incompleto ya que no se cuenta con la tecnología moderna, por lo que probablemente tendría que esperar una semana más o menos para deshacerse de esa gran cicatriz.

~ "Meilin, voy a necesitar que vendas esto, ¿Puedes?" preguntó mirándolo.

~ "¿Este sirviente?" preguntó Meilin con un destello de curiosidad.

~ "Te enseñaré lo que debes hacer para captar la atención de la multitud", dijo Le Huan, de una manera sabia pero tranquila y relajada.

Una semana después......

Meilin estaba en el Mercado, tomó una pequeña caja y luego se paró sobre ella. La caja estaba ubicada en el centro del Mercado, y él, que era un poco más bajo que el resto de personas, ahora estaba a la par. Suavemente puso su mano a un lado de su boca y comenzó a gritar a todo pulmón.

~ "¡Damas y Caballeros! ¡Señoras y Señores, vengan por aquí! ¡Vengan aquí ahora! ¡Rápidamente, vengan y prueben el colorete de esta Dama si se atreven! Esposas, consortes y concubinas, ¿No quieren llamar la atención de su esposo? ¿Ha sido frío con ustedes? prueba con el colorete de esta Dama y verás. ¡Jóvenes amantes, no sean tímidas!"

Un grupo de dichas personas comenzaron a rodearlo mientras hablaba con audacia y vigor, los vítores y gritos de Meilin estaban llenos de pasión y confianza, sin mencionar que no había ni una sola pisca de vergüenza o timidez en su forma de actuar.

~ "¡¿Quieres pruebas de que esta Dama no está mintiendo?! ¡Observa y comprueba! ¡Es sorprendente! ¡Si esta dama miente, te regresará tu dinero y hasta más!"

Meilin lo aplicó suavemente en su rostro mientras las damas y los caballeros observaban con entusiasmo, cuando vieron el rostro de Meilin, lo suave, bonito y brillante que se veía, una dama levantó la mano.

~ "¡Lo compro!" ella gritó con entusiasmo

~ "¡Sí! ¡Sí! ¡Son 5 yuanes! ¡Por favor, ven! ¡No te arrepentirás!" gritó sonriendo

Otra persona también levantó la mano para comprar, y luego muchas personas comenzaron a levantar sus manos mientras se empujaban para comprar y conseguir este nuevo producto.

~ "Lo siento, pero se ha acabado, todo está agotado. Pero no se preocupen, estaré aquí la próxima semana" Meilin sonrió ~ "Les prometo que después de esta semana muchos de ustedes estarán rogando por mis coloretes, esta señora lo promete"

Las mujeres no esperaron a llegar a casa para ponérselo, así lo hicieron y caminaron por las calles, muchos hombres se detenían sólo para contemplarlas. Las mujeres que no tenían este nuevo producto las miraban con envidia; como una mujer casada de mediana edad que apenas si recibía alguna atención de su esposo se sorprendió cuando su esposo comenzó a adorarla mucho. Ella quería más pero no había mucho; todo sería perfecto en un abrir y cerrar de ojos si ella hubiera comprado más, muchas otras mujeres habían compartido los mismos pensamientos que la mujer.

Meilin acababa de regresar con una bolsa llena de dinero, entró en la habitación de la Señorita hasta encontrarlo en la cama y lo notó presionando su muñeca, se había dado cuenta hasta hace poco que la Señorita hacía eso todos los días, aunque no lo molestaba, tal vez esa era su forma de duelo por la pérdida de su hijo. Le Huan bajó sus manos aliviado de que el pequeño Feto estuviera mejorando tal como se esperaba, miró a un lado para ver a su sirviente con un saco de hierbas y otro de dinero.

~ "¿Cómo te fue?" Le Huan preguntó curioso

~ "¡Genial! Este sirviente tuvo muchos clientes y espero que hayan más la próxima vez", informó alegremente.

~ "Si se acumulan más clientes, tendremos que trabajar mucho más", le informa estoicamente Le Huan.

~ "A este sirviente no le importa, siempre y cuando se trate de su Señorita", dijo Meilin sin perder el ritmo.

Meilin lo miró, su Señora, que ahora estaba callado, por lo general asentiría o decía solo lo mínimo, pero estaba tranquilo, silencioso y emitía una sensación ominosa y espeluznante. Lentamente Le Huan abrió sus largas pestañas y miró a Meilin con una expresión vacía pero fría. Lo miró fijamente.

~ "Meilin, ¿Cómo es que puedes entrar y salir del Palacio con frecuencia y con tanta libertad?" Le Huan preguntó en un tono apagado.

Le Huan no era tonto, en los tiempos antiguos, un sirviente tiene un tiempo limitado para salir de la residencia y no existe el llamado "día libre", por lo que Meilin no debería poder salir con tanta frecuencia. Hace un rato los pasos de Meilin no hacían ningún tipo de ruido; incluso con el enorme saco en la mano. Se sobresaltó un poco por su repentina aparición, pero debido a su asombrosa habilidad para controlar su expresión facial; no mostró su asombro, Meilin sin dudarlo y casi de inmediato cayó de rodillas, inclinándose hasta el punto en que su frente golpeó contra el piso de madera.

~ "¡Lo siento, Señorita! ¡Pero Meilin se escapó!" el grito

~ "Es obvio que te escabulliste, te estoy preguntando cómo es que lograste escabullirte de los guardias imperiales, ¿No es así? Esta no es una hazaña fácil para un sirviente, Meilin, ¿Quién eres en realidad?" Le Huan preguntó con frialdad.

Meilin se sorprendió, nunca pensó que la Señorita lo estuviera observando, su Señora realmente había cambiado, trago mirando hacia la fría mirada de su Señora, ¿Él qué hará?