Capitulo cinco

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Barcode se quedó estático en medio del salón mientras pensaba en lo que había sucedido pero entonces vio asomarse a su padre y reaccionó.

...-¿Ya se ha ido la linda chica?-preguntó este ignorante de lo que se le venía encima.

-Papá... puedes venir y sentarte un momento, por favor. Quisiera hablarte de algo-dijo este algo molesto.

-Podemos hablar durante la cena, hijo.

-No ahora, necesito hablarlo en este momento-dijo el más joven tajante.

-Está bien hijo como desees-dijo Kong algo extrañado por la actitud de su hijo.

Tras sentarse en el sillón, Barcode soltó un soplido y luego miró a su padre.

-Esa chica era la mujer de Jeff Satur, papá.

Su padre se estremeció en su sitio.

-¿De quién?

-Lo sabes perfectamente...de Jeff, el hijo de tu amigo. Vivimos en su casa por meses

-Oh si...emm, ¿Él tiene una esposa?, Vaya, es linda

-No te hagas el que no sabe-le regañó su hijo aún más molesto- Sé que estás enterado de todo por tu cara-¿Por qué demonios no me lo dijiste?

-¿De todo?, No sé de qué hablas hijo, ¿cómo voy a saber quién es esa chica y que quería hablarte?

-Bueno puede que no supieras quién es ella pero si sabes de lo que sucedió con Jeff, ¿Verdad?, Tú y la señora Anne os seguisteis hablando por teléfono por un tiempo.

Kong suspiró resignado.

-Si ok, lo sabía pero quería evitar que sufrieses más de lo que ya estabas sufriendo por él.

-¡Supiste todo desde el principio!, ¡Oh joder no puedo creerlo!, ¿Sabías lo del psiquiátrico y del viaje a Italia?, ¿Incluso de la muerte de sus padres?

Su padre asintió con tristeza.

-Si hijo, yo lo sabía, Anne venía a menudo al restaurante y desahogaba su tristeza contándomelo todo. Cuando supe de su muerte tuve que llorar a escondidas para que tú no me vieras.

-Oh joder, esto es increíble.

-No quería que lo vieses y sufrieses más aún, Code. Entiéndeme, estabas tan triste y decepcionado.

-No entiendo que me lo ocultas papá, es muy fuerte

-Lo sé pero no quería perderte. Lo siento...quise decírtelo muchas veces pero fui débil y cobarde, lo siento.

-¿Fuiste a su entierro?

-Si pero

-Me hubiera gustado ir también y tú me lo ocultas te

-Creo que el vendría y entonces todo volvería al principio.

-Pero él no vino

-No, no vino pero entonces no creí necesario que lo supieses. Entiende, por favor, hijo- rogó muy abatido el hombre.

-¿Y lo del psiquiátrico, papá?, ¿no creíste que debía saberlo?-le recriminó nuevamente este.

-Anne me rogó que me callase. Al parecer él se lo pidió encarecidamente que no te dijese nada. Jeff quería que reicieses tu vida y fueses feliz.

-¡Pero no lo fui, papá!-gritó el moreno muy dolido-... ¡ni tampoco lo soy ahora!, ¡Debiste contármelo todo!, ¡era mi vida y la de él!, ¡Nosotros nos hubiésemos manejado!

El anciano asintió resignado.

-Lo siento hijo, lo hice lo mejor que supe. Perdóname por favor.

Barcode subió muy molesto a su habitación, notando su teléfono vibrar en el bolsillo, entonces lo cogió y vio que era Ta.

-Hola, ¿estás bien?

-Hola, si lo estoy, ¿por qué no iba a estarlo?

-Oh na-nada, emm...era simple c-curiosidad-dijo su amigo

El moreno frunció el ceño pues la voz de su amigo sonaba distinta.

-¿Qué pasa?, ¿A qué se debe tu llamada?, Sueltalo o no volveré a dirigirte la palabra-exigió

-Bueno, está bien...emm, es que la mujer de Jeff estuvo aquí en la mañana, haciendo preguntas y me pidió tu dirección.

-Ok, así que fuiste tú quien se lo dijo

-No me digas que...

-Si tranquilo, ha estado aquí

-¿Y de qué hablaste?, ¿Puedes contarlo?

-Oye amigo, estoy muerto de cansancio, te lo contaré mañana, ¿Ok?

-Ok Code, hasta mañana.

-Si, hasta mañana.

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14. JeffBarcode: Un amor de ensueño-  Tercera parte  - TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora