Los Honorables Hatake

Capítulo 9

La mayoría de las personas se consideran 'maduras' por el hecho de tener una edad en específico, algunas se sienten superior a otras debido a que tienen más experiencia en algo pero siempre existen ese tipo de personas, las que sienten la necesidad de humillar a alguien para elevar su propio ego.

(...)

Sakura estaba en el hospital encerrada en su oficina, el día anterior había dejado todo preparado en su casa para la cena con los Kages así que hoy su día sería relativamente normal. Obito se encontraba jugando en el pequeño corral que tenía instalado en su oficina y ella estaba terminando su papeleo para presentarle a Kakashi como cada fin de mes.

La puerta de su oficina se abrió y por ella entro Yamanaka Ino luciendo una enorme barriga de embarazada y comiendo un muffin.

-"Si sigues comiendo de esa manera te costará regresar a tu peso normal cerda"- dijo con burla la pelirosa.
Ino se encogió de hombros.

-"No me importa, Sai dice que me veo hermosa y que es felíz porque mi trasero ahora es enorme!"-
Ambas soltaron una carcajada.

-"Me alegra saber que eres amada"- dijo con sinceridad la Hatake.

-"Tu también lo eres Frentona"-

-"Por cierto, que te parece ir de compras el fin de semana?"-
Ino enarco una ceja.

-"Que hizo Hokage- Sama ahora?"-

-"Se le olvido avisarme de la visita de los Kages"- dijo Sakura son una ligera risa.

-"Entonces hay que ir al Spa y saliendo de ahí podemos ir a esa casa de té que tanto te gusta, me encanta el pastel de chocolate que venden ahí"-

-"Suena como un buen plan, nos vemos el sábado entonces?"-

-"Claro. Por cierto, vine para avisarte que ya llegaron los cuneros nuevos que encargaste. Le dejé los papeles a tu secretaria"-

-"Que bien! Gracias Ino"-

-"Nos vemos luego y suerte con los Kages"-

-"Gracias"-

Ino salió de la oficina y Sakura siguió con lo suyo.

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Shizune estaba harta!
Había estado toda la mañana corriendo de un lado a otro para tener todo listo en la sala de juntas de la torre Hokage.
Maldecía internamente su mala suerte pues no pudo librarse de sus responsabilidades cuándo su rubia maestra dejo el puesto de líder de la aldea y aunque Kakashi no era un borracho sí era un vago despistado.

Acomodó las galletas en los platos, verificó que las tazas estuvieran limpias y se aseguró de que la sala estuviera en la temperatura correcta. Suspiro y sonrió satisfecha al notar su buen trabajo.

Salió de la sala y se encamino a la oficina del peliplata.

-"La sala esta lista Kakashi, necesitas algo más?"- dijo en cuánto abrió la puerta del despacho.
Kakashi se encontraba viendo por la gran ventana.

-"Eso es todo Shizune, gracias por tu ayuda. Por favor encárgate de las tareas de Shikamaru, él estara fuera unos días por el nacimiento de su hijo"-

-"Claro, con permiso"- soltó otro suspiro después de cerrar la puerta tras ella, sería un día largo.

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En la residencia Hatake los miembros de la rama secundaria se encontraban decorando la casa tal y cómo se los pidió su patriarca.

Yamato y Sasuke habían salido a recoger las Yukatas que Kakashi mando hacer un día anterior para todos.
La pobre señora del local palideció cuándo el Hokage entró a su tienda con dicho pedido pero no se pudo negar, básicamente no durmió en toda la noche para tener listo todo.
Eran cinco Yukatas azul marino con detalles azul cielo y el emblema de la casa secundaria en hilo gris; dos Yukatas blancas con detalles negros, haori rojo y el emblema del Clan Hatake en hilo de plata en la parte de atrás; Cuatro Yukatas negras con detalles rojos y el emblema del Clan Uchiha en hilo de seda; todos eran hermosos.