Teen Wolf (Eli Hale y tú)

8- Batalla final

Narra Luci

Se escucho un fuerte golpe en el lugar antes de que empiecen los golpes de espada de una pelea, mire hacia la "entrada" para encontrarme con la inesperada visión de Scott y Alison peleando contra los oni.

Elí se cruzo en mi vista en ese momento, el estaba parado frente a mi.

- Hola, bebé - se acercó a mi y me dio un besó -¿me extrañaste?- le dedique una tierna sonrisa mientras el se dirigía a su papá, volviendo a demostrar la preocupación que tenia cuando llego - no podemos vencerlos, no sin plata papá, necesitamos a Parrish, necesitamos más tiempo.

La pelea era fuerte, Scott peleaba con uno mientras Alison peleaba con varios a la vez, uno de ellos tiró su ballesta, acorralándola.

Una conocida vos llamo la atencion de todos en el lugar, era un grito, un grito de mamá -¡Alison!- vi como las ondas de sonido de su grito mandaron a volar a los Onís, dejándolos en el piso, inmóviles.

- lo recuerdo todo - susurró la ex cazadora, vi su cara, tenía lágrimas en los ojos.

- no hemos terminado el juego - miramos atrás de Scott, el Nogitzune tenía sus garras en el cuello de Eli ¿en qué momento se fue?

- tómame y deja ir a los demás - pidió Scott, intentando acercarse sin amenazar.

- cada vida aquí me pertenece - respondió.

- solo me necesitas a mí - insistió.

- Scott, no hagas esto - pidió Derek, aun atado y haciendo lo posible para soltarse.

- Alison me mata, Yo muero en sus brazos, como ella murió en los míos, es el movimiento que gana el juego ¿no?

- yo ya gané - dijo el Nogitzune, con aires de superioridad.

- tú pierdes, hasta que yo esté fuera - contra dijo Scott - aún Estoy de pie y sigo siendo el alfa.

- una flecha en el corazón para salvar a todos los demás - propuso el espíritu - todos los jugadores se van.

La ballesta voló como un imán a la mano de Alison, la cual negaba, asustada

- no, no puedo, no, no - se negó.

- mátalo, Alison, y yo gano el juego - insistió el espíritu.

- Alison, por favor, no me haga ver morir a mis amigos y familia - pidió mi tío, rendido.

Alison, aún en shock, agarró una flecha, suspiró y cargó la ballesta.

- el juego es mío, ¡mátalo! - Alison serró los ojos al disparar, la flecha se clavo justo en el pecho de mi tío, pero el no cayo.

Dos flechas más le llegaron, hasta que por fin el cayó, Alison corrió a agarrarlo.

- un lobo aúlla para señalar su ubicación al resto de la manada - informó el espíritu oscuro - dime, Scott McCall, ¿Qué sonido hace un lobo cuando está listo para morir?

- te lo diría, pero aún no estoy preparado para morir - las fechas se prendieron fuego hasta desaparecer por completo, Scott se levantó.