El accidente

Capitulo 19: Olivia

Tras acabarnos el granizado, Sam y yo nos actualizamos de lo que pasó esta semana y pareció no molestarle mucho lo de Ian. Se nos hizo algo tarde y él se acabó yendo a su casa a las 1:00 AM.
Subí a mi habitación y cuando me tumbé en la cama escribí un mensaje a Ian dándole ánimos.
Él me respondió que durmiera y que nos veríamos al día siguiente.

———————————————————————————————-----------------------------------

Al día siguiente me levanté extrañamente pronto. Eran las seis y media de la mañana, lo que significaba que Ian salía en media hora e igual le animaría que fuera a buscarle con algo de café y desayuno. Llegué a fuera de su consulta y le esperé para darle la sorpresa.
Al abrir la puerta se estaba frotando los ojos del sueño pero se dio cuenta de mi presencia y sonrió diciendo:

-Sí pudiera besarte ahora mismo lo haría.— y cogió un café para darle un gran trago. Yo me sonrojé un poco y le miré atrevida.

-¿Y que te lo impide?— dije desafiante. Ian me giró por el hombro y señaló una cámara del pasillo.

-Mi padre. Bueno a ver, no exactamente, porque él está en Los Ángeles. Pero debería abstenerme a "distracciones" en el trabajo.

-¿Soy una distracción?— dije frunciendo el ceño.

-Olivia no— suspiró— Estoy muy cansado, ¿podemos ir a mi casa?

Me sentí mal al pensar que podría ser una distracción para él, pero le hice caso y cada uno fue hacia el apartamento de Ian en su respectivo coche.
Entramos juntos y yo dejé el desayuno en la isla de la cocina.

-Voy a ducharme.- dijo dirigiéndose al baño.- Estás en tu casa, haz lo que quieras.

Seguía algo decepcionada por lo de antes y decidí sentarme en el sofá mirando el móvil esperando a que algo mágico pasara. Y bueno quizás mágico no era, pero el universo pareció escucharme y entró una videollamada de Brooke.

-AMOOOOR, ¿que tal? ¿dónde estás?— dijo sonriendo.

-Shhhh no hables tan alto que estoy en el piso de Ian.-dije mirando en dirección del baño.

-Uuuuh ya no es el doctor buenorro, es "Ian".—Suena sexy y todo eh.—dijo guiñando un ojo.— Bueno señorita Hastings, te llamaba para enseñarte algo.—dijo mientras cogía algo que no pude alcanzar a ver detrás de la cámara. Desenrolló un papel y lo puso delante de la cámara para que lo leyera bien.

-¡BROOKE!—dije tapándome la boca.—¡Enhorabuena! Os lo-. No pude seguir hablando porque Ian salió del baño con un pantalón de tela fina largo secándose el pelo húmedo con una toalla y yo comencé a sentir como un calor bajaba de mi pecho hacia abajo.

-¿Livvie? — me llamó Brooke a través de la pantalla.—LIIIIIVIEEEE.—chasqueó los dedos para sacarme del trance del cuál no salía.

-¿Qué pasa?— dijo Ian acercándose por detrás del sofá a ver la pantalla.—¿Esa es Brooke? ¡Hola!-dijo saludando con la mano.

-Así que eso pasa...- dijo ella ayudándome a salir del trance.- Hola Ian, justo le enseñaba a tu novia que James y yo hemos conseguido un piso cerca de donde haremos las clases este curso.

-No somos novios.-dijimos Ian y yo a la vez.

-Lo que sea, bueno el sábado, es decir, en dos días estáis invitados a una cena para estrenar el piso. Poneros guapos.—lanzó dos besos a la cámara y colgó.