Como conquistar a un "emo vengador" (NaruSasu)

Capítulo 1: Carta de N

Sabía con certeza que Sasuke no era la persona más romántica del mundo. Bueno, en realidad no era tan sentimental como podría ser él.
Teniendo en cuenta aquello, sabía que si le regalaba una carta romántica donde expresara todo lo que sentía, quizás no la aceptaba. Aun así, también consideraba que, al ser una declaración de amor, la carta debía tener la personalidad de la persona que la escribiera.

Naruto pensaba en no escribir algo con lo que atraer al azabache o por lo menos, no escribir algo que podría gustarle a Sasuke, sino plasmar los sentimientos que albergaba por él para mostrarse lo más sincero posible.

Decidido, tomó un papel en blanco, un bolígrafo y se sentó en la mesa para poder comenzar.

"Querido Sasuke:

¿Suena cursi si comienzo así, verdad? Bueno, supongo que no tiene mucha importancia ahora con lo que quiero plasmar en el resto de la carta.

Puede que odies el medio por el que me comunico contigo pero para ser honesto, no me animo a decírtelo personalmente.

Cada vez que estás frente a mi quiero decirte cada maldita cosa que siento por ti, sin embargo, mi mente se queda en blanco al observarte.

No estoy muy seguro sobre como plasmar aquí lo que siento. Lo que tú me haces sentir, porque es demasiado, siempre que te tengo cerca.
Estoy realmente enamorado de ti e incluso creo que decirte eso es poco.

Me gustaría poder verte como a un amigo, en realidad, me gustaría poder verte como a uno más, igual que como veo al resto de los chicos de nuestra generación pero me resulta imposible.

Los celos son parte de aquel sentir. Cada vez que te veo junto a alguien más, a pesar de no demostrar nada, ese desagradable sentimiento me consume y no te culpo, no tienes porque corresponder a lo que siento, de todas formas, parece que tengo un buen autocontrol con respecto a eso.

La felicidad siempre está presente cuando estás a solas conmigo, cuando se que tu atención va solo hacia a mí y a pesar de saber que has cambiado en todo este tiempo, sigo viéndote como cuando estábamos en la academia, porque si, desde ese entonces ya me tenías.

Las ganas de querer tenerte cerca también se suman. Tengo demasiado miedo de perderte, de algún día despertar, buscarte y que simplemente no estés.
Aunque espero y sé que no volverás a desaparecer, comprendo que pueda a llegar a perderte por esta confesión.

Me gustaría poder expresarte abiertamente cada sentimiento que surge en mí al estar contigo, al tenerte cerca o al pensar en ti. De todas formas, no estoy muy seguro de si aceptarás mi confesión o si solo la considerarás como una más de todas las que ya te han hecho pero aquí está y sea cuál sea tu decisión, anhelo poder tenerte a mi lado y si no es así, entonces me conformaré con continuar siendo tu amigo y reprimiré cada sentimiento lejano a la amistad que tenga hacia ti.

Atte: N"

Naruto tomó la carta, la dobló prolijamente y salió de su hogar.

El cielo oscuro era iluminado por estrellas y ellas junto a la gran luna, eran las únicas que acompañaban al rubio en su recorrido hacia la casa de Uchiha.

Subió los escalones y deslizó la carta por debajo de la puerta para acto seguido, salir del lugar con el mayor sigilo posible y volver a su casa.

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El sol apenas salía cuando Uzumaki se levantó. Lavó sus dientes, se vistió y luego de soltar un sonoro suspiro, salió de su hogar en dirección a la casa de Sasuke.

Subió al árbol que estaba cerca de su ventanal y esperó pacientemente a que el azabache se levantara, sin embargo, no vio rastros de él en su cama. 

Giró su cabeza para verlo en la puerta de entrada, agarrando el pomo de la puerta mientras leía su carta.

Los nervios del rubio se dispararon y se asomó un poco más a la espera de ver alguna reacción, ya sea una pequeña sonrisa, un ceño fruncido o un sonrojo. Sin embargo, se encontró abriendo sus ojos con sorpresa y conteniendo las lágrimas al verlo arrugar la hoja y desecharla en el bote de basura.

Se limpió los ojos con la manga de su chaqueta y de un salto, subió al techo de la casa para poder emprender su camino hacia el campo de entrenamiento donde ya estaba esperando Sakura.

Ninguno se saludó. Naruto sabía que toda aquella estupidez de haber cambiado con él y ahora ser amigos, no era real.
Siempre diciendo estupideces sobre que le gustaba y demás, solo para no seguir siendo rechazado ¿Pero de qué sirvió? Los aldeanos lo seguían tratando igual que siempre y haga lo que haga, sabía que aquello no iba a cambiar.

Caminó hacia el árbol donde solía sentarse, esta vez del otro lado para no ser visto por su equipo y cerró sus ojos mientras se repetía mentalmente la frase "no llores" como si fuera un mantra.

—Buenos días, Sasuke.—Naruto escuchó la fina voz de la fémina que siempre hacía para poder sonar más dulce ante él.

Sasuke asintió con la cabeza devolviendo el saludo y buscó a su compañero con la mirada.

—¿Naruto no vendrá?

—Está detrás del árbol —Contestó señalando el lugar con uno de sus dedos— Ven, vamos a sentarnos más allá.—La chica lo tomó del brazo y caminó con él unos metro más alejados de donde se ubicaba Uzumaki.—Oye, te he preparado chocolates.—Comentó extendiéndole una pequeña bolsa con los bombones.

El rubio escuchó a Uchiha agradecerle e intentó poder ver el lado positivo de aquello. Si a Sasuke le gustaban los chocolates, podría intentarlo regalándole algunos.

Pasó sus manos por su cara y volvió hacia donde había estado Sakura cuando él apenas llegó, quedándose de pie a la espera de su sensei.

Pese al rechazo, Naruto no se quería dar por vencido e iba a ir por aquel postre para la persona que amaba.
Consideraba que de esa manera, también, podría conocerlo un poco más y aprendió bastante de ello.

No hay que regalarle cartas de amor al emo vengador.

Escribiendo esto mientras escucho Better Man de Taylor Swift y entre la letra, el ritmo y lo que acá sucedió, ya estoy que lloro.
Espero que les guste.
¡MUCHAS GRACIAS POR LEER!