Capítulo 54

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No había necesidad de describir la emoción de Ding Xiaowei cuando miró la serie de números completos y elegantes en su cuenta bancaria, no podía desmayarse de alegría. Después de vivir la mitad de su vida, finalmente encontró la sensación de la brisa primaveral, y por un tiempo vió a Zhou Jinxing muy, muy agradable a sus ojos.

Los dos corrieron felizmente al centro de la ciudad para ver la casa.

Ding Xiaowei llevó a Zhou Jinxing por todas las habitaciones como si le ofreciera un tesoro, explicándole lo bueno de la casa y por qué la eligió.

Zhou Jinxing sonrió pero no dijo nada. Después de que terminó el recorrido, Zhou Jinxing dijo:
—Hermano Ding, quiero un estudio, un gimnasio y una habitación de actividades para niños.

Ding Xiaowei se congeló por un momento.

—¿Eh?

—Sala de estudio, gimnasio, habitación de actividades, sería mejor si hubiera una piscina, ¿no crees?

Ding Xiaowei miró:
—Aquí hay una bañera de 1,5 metros, puedes ir a nadar.

Zhou Jinxing dijo con una sonrisa:
—Hermano Ding, tienes una buena visión. Ésta casa es muy buena, pero creo que está un poco abarrotada para cinco personas. ¿Por qué no gastas más dinero y compras una más grande? Ahora tienes dinero.

—Es fácil decirlo, dos millones parece mucho. Si compras una casa en ésta ciudad, podrías perderla toda de una vez. Si tienes una casa más grande o más pequeña, puedes vivir en ella... Oh, no, ¿Qué cinco personas? Si mi casa es grande o pequeña, ¿de qué te preocupas, quién está de acuerdo a que vengas a vivir aquí?

Zhou Jinxing lo miró parpadeando:
—Tú, yo, Lingling, Yiyi y mi hijo, ¿no somos cinco? ¿Por qué todavía estás avergonzado? ¿No quieres vivir conmigo?

Ding Xiaowei se quedó atónito y dijo:
—Todavía estás arrastrando a tu familia, ¿qué quieres decir?

Zhou Jinxing dijo suavemente:
—Hermano Ding, ¿por qué no vivimos juntos? Estoy muy cansado de correr a tu casa todos los días.

Ding Xiaowei piensa que está muy ocupado con el trabajo y aún así seguía corriendo, era un trabajo realmente duro, además ahora era la temporada de lluvias, el clima es muy malo y no es seguro conducir. Los dos básicamente están viviendo juntos ahora, en lugar de eso, ¿por qué no...?

Zhou Jinxing continuó con sus esfuerzos:
—¿No es bueno que estemos haciendo ésto ahora? Hermano Ding, solo quiero vivir una vida estable contigo y los niños.

Ding Xiaowei dijo incómodo:
—No dije que no los dejaría vivir con nosotros... y no hay escasez de comida para ustedes dos. Si quieren vivir con nosotros... pueden hacerlo si lo quieren.

Zhou Jinxing se rió.

—Entonces, si ese es el caso, ¿por qué sigues alquilando una casa? Tengo varias casas, todas las cuales son más adecuadas que ésta.

Ding Xiaowei agitó la mano:
—No viviré en tu casa. Tengo treinta y tantos años, y no es que no pueda pagar el alquiler de una casa. No viviré en la casa de otra persona.

No miren lo amable que es Zhou Jinxing con él ahora, si ésta persona quiere girar la cara, nadie puede detenerlo, todavía no entiende la verdad. Si Zhou Jinxing vivía en su casa, sería fácil decirlo, si algo sale mal, simplemente señalaría la puerta y le diría que salga. Pero si quisiera vivir en la casa de Zhou Jin, sería él quien sería expulsado con las pertenencias de los niños, por lo que no puede ser tan descuidado.

Preferiría estar apretado en una casa pequeña que dejar que él y su hija vivan debajo de la cerca.

Zhou Jinxing levantó las cejas, vió claramente sus pensamientos, extendió las manos y dijo:
—Está bien, no puedes vivir en mi casa, transferiré la propiedad de la casa a tu nombre, así viviré en tu casa.

Tio Grey y el Príncipe MestizoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora