Jena paso el rato con su alumno escuchando sus historias que eran claramente falsas, pero le daba ternura ver lo mucho que se esforzaba para que ella se concentrará solo en él y no en cada hombre que pasaba invitándola a bailar.
La dejaba pensando un poco el hecho de que no hubiera ningún amigo de Bastián en la fiesta. Recordando lo que le decía sobre su familia y lo difícil que era lidiar con ellos siendo de tal rango, algo que aún no entendía tan bien porque jamás decía a que se refería en realidad.
Bastián se dio cuenta que la mente de Jena estaba en otro lado que suspirando se sentó tomando la copa de vino que se encontraba en la mesa. Conan iba hacia él y antes de que bebiera se la quito de las manos negando con su dedo. Se sentó en la mesa viendo a Jena por un segundo antes de dirigirse a su sobrino.
—¿Quién es ella?—señala con la mirada.
—Mi maestra, tío. Aunque parece distraída ahora mismo—mueve su mano frente a la cara de Jena para reaccione.
—¿Ah? Perdón, Bastián. Pensaba en alguien.
—¿En serio? ¿Y es apuesto?—se recarga en su mano interesado.
—Claro. Mi hermano es...—se da cuenta y voltea a ver a Conan—¿Quién es usted?
—Es mi tío, Conan Wang. ¿Tiene un hermano, maestra?
—Sí. Su nombre es Aidan, hoy se iba porque tiene una pasantia en otro lado. Incluso hice un espectáculo...—suspira tomando la copa de vino.
—"Así que su hermano es ese chico al que le grito en la compañía"—dicen ambos en su cabeza mirando a Jena beber de su copa.
—¿Le gustaría bailar, maestra?—se pone de pie extendiendo su mano.
—Creo que será mejor que baile con alguien que sea mayor de edad, sobrino—se pone de pie enfrente de Bastián.
—En realidad, prefiero bailar con el cumpleañero—mueve a Conan tomando de la mano a Bastián, mientras se van voltea a ver a Conan sonriendo.
—Vaya mujer más extraña...—dice en voz baja marchándose.
Jena se divirtió un rato con Bastián bailando hasta que lo llamaron para que abriera los regalos, él la tomó del brazo haciendo que lo acompañará. Cada regalo que abría le dibujaba una sonrisa que borraba en unos segundos; Jena veía sorprendida cada regalo y lo costoso que se veían, le daba miedo de que no le gustará lo que tenía para él.
Aprovecho cuando su madre se acerco para salir de ahí y correr a su auto para sacar el regalo, Conan la vio y decidió seguirla. En su auto, Jena abrió el maletero buscando entre tantas cosas que tenía hasta que encontró el regalo y cuando grito feliz dándose la vuelta se encontró con Conan. Del susto se hizo hacia atrás cayendo dentro del maletero.
Conan se sorprendió al verla girar hacia atrás y comenzó a reírse cuando la vio levantarse soltando un quejido con muchos papeles en la cabeza. Jena busco el regalo y lo vio en manos de Conan, al intentar tomarlo él lo alejo haciendo que cayera sobre él y sus miradas se encontraran.
—Hola, maestra...—sonríe coquetamente.
—Es señorita Chen para ti—le arrebata el regalo alejándose—¡Ajá! Espero no se haya dañado.
—¿Y qué es?—dice soltando una pequeña risa sentándose en el auto—Se ve que mi sobrino te quiere mucho.
—Bueno, soy difícil de no querer—ríe acomodándose para sentarse a su lado—Es un álbum que hice con todos los recuerdos de Bastián siendo mi alumno.
—Eso es...—Conan cruza miradas con Jena y antes de que se acerquen aparece Bastián.
—Grandioso, maestra—corre hacia ella abrazándola—Te extrañaré.
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El Anhelo Fallido Del CEO
RomanceUn CEO y una chica de clase media, una clásica historia, ¿o tal vez no? Un consejo, no confíes en la autora...