CAPITULO 15.
El mes había empezado bastante mal sobre todo porque había una chica que últimamente iba muy seguido a la tienda, rara vez compraba algo pero se quedaba por mucho tiempo, no pude evitar darme cuenta que se quedaba hablando con James siempre.
-James, me ayudas a cobrar- murmuré de malas ya que la tienda había varios clientes y James había estado con aquella chica durante más de una hora, mientras me dejaba todo lo demás.
-Voy.
-¿puedes pasarme un número? podemos seguir hablando, todavía tengo muchas dudas.- alcancé a escuchar a la chica, puse lo ojos en blanco bastante molesta.
-En relidad en mi departamento no tenemos teléfono.
-Bueno entonces vendré otro día, también necesitaré un maestro.
Sin poder seguir esperando más volví hablarle al rubio.
-¡James, la caja.!
-Sí, si, voy.
Ahora sí James se puso a cobrar, estuve el resto del día de mal humor, intentando mantenerme haciendo algo para mantener mi mente distraída-
-Perdón por dejarte todo el trabajo, es que no me di cuenta que pasé tanto tiempo hablando, esa chica si que tiene dudas- se acercó James a mi cuando de nuevo quedó sola la tienda.
-Sí, seguro tiene muchas dudas.
-¿Eso fue sarcasmo?
-No.- soltó de nuevo con tono sarcastico.
-Bueno eso sí que fue sarcasmo. ¿Qué pasa?
¿En serio era tan tonto James o solo se estaba haciendo el tonto?
-Es la cuarta vez en la semana que viene y no compra nada, solo te quita tiempo.
Mi tono de voz no salió tan neutro como esperaba ya que había sonado un poco de reclamo.
-No hablamos de otra cosa que no fuera sobre guitarras, es nueva quiere aprender a tocar, solo quería un consejo.
-Entonces tal vez estaría mejor que empezará por una acústica- murmuré con el ceño fruncido mientras terminan de engrapar algunas cosas.- listo ya di un consejo en menos de cinco minutos, y no en más de una hora ¿Tan difícil es para ti decirle eso?
Odiaba sentirme celosa pero no lo podía evitar esa chica era demasiado atractiva, y aunque intentaba siempre controlar mi temperamento esta vez no pude, y lo de James con esa chica me había fastidiado más de lo debido. Al parecer James por fin comprendió todo y le pareció repentinamente divertida mi reacción porque se rió de mi, yo negué con la cabeza molesta su risa solo hacía que me enojara aún más.
- los celos no son buenos Bon, pero esta vez te los dejaré pasar.
-cierra la boca, Hetfield.
...
Ese día estaba haciendo tanto calor que apenas quería moverme, había abierto toda las ventanas del departamento aún así el calor era insportable un pequeño ventilador estaba prendido pero solo aventaba aire caliente, los únicos que estaban era Cliff y James que habían llegado de madrugada, y apenas habían despertado para bucar algo de comer, mientras que de Lars y Dave no había ni un rastro.
Cliff se sentó en la silla mientras comía de un tazón de cereal.
-¿No crees que es demasiado tarde para el cereal?- pregunté con la ceja arqueada.
-Para mi el día de recién empieza- me respondió este luego llegó James al no haber otro lugar disponible en nuestra reducida sala, se sentó a lado de mi.
