𝗠𝗮𝘁𝗵𝘀 𝗕𝗼𝗼𝗸 ━ 𝗠𝗜𝗡𝗦𝗨𝗡𝗚

𝗽𝗮𝘀𝘁𝗲𝗹𝗶𝘁𝗼𝘀

𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝟓

—¿Que está pasando entre tu y Jisung? —Minho preguntó al castaño, este apartó la vista de su libreta.

—¿Yo? ¿Y Jisung? —Minho asintió.— Lo de siempre.

—¿Te refieres a cocinar juntos? ¿Ir a sus casas tomados del brazo? ¿Almorzar juntos? —Cuestionó una y otra vez.

—Uh, si. —A Chan se le escapó una sonrisa después de responder, haciendo que Minho se molestara más.

—¿Por qué? —Minho preguntó.

—Porque Jisung es lindo.

“Porque Jisung es lindo”

A Minho le salía humo de la cabeza. Y nunca supo descifrar el porqué.

Hyunjin miraba con el ceño fruncido a Minho, este estaba mordiendo su lápiz, mirando a la nada y moviendo su pie repetidamente.

Desde que Han Jisung apareció en la vida de los de ese grupo, no todo ha sido como antes. Las salidas ahora tienen a uno más con ellos, piden un helado más en la tienda, compran un ticket más para el parque de diversiones, guardan un puesto más para almorzar. Y eso era exactamente lo que Minho no quería que pasara.

¿Porqué? Simplemente porque siente que nada bueno puede salir de ahí. Y no solo lo siente, lo sabe.

(...)

—Chan Hyung me compró galletas hoy. —Jisung dijo, moviendo sus pies que colgaban de la silla donde estaban el y el rubio.

—¿Y? ¿No te quiso hacer galletas hoy y por eso las compró? —Escupió Minho, mientras seguía molesto por el inusual cambio en su grupo.

—Ah, Minho. —Jisung replicó.— Perdón, Hyung. —Se corrigió cuando recibió una fea mirada del rubio.— Chan Hyung tiene poco tiempo últimamente.

—¿No has ido a su cocina verdad? —Jisung apretó sus labios.— ¿Jisung?

—Lo siento es que el me invita y no puedo mentir.

—Bueno entonces no mientas. —Minho sonrió de lado.

—¿Oh? ¿Co...?

—Te invito a salir, salgamos. —Tomó su mochila y se la puso en el hombre.

—Hyung... yo...

—Vamos Sunggie. Podemos ir a comer pasteles.

—Bien... —Hizo lo mismo con su mochila y salió de la escuela con Minho.

(...)

Cuando Minho y Jisung llegaron a la pastelería, se sentaron en una mesa y se dispusieron a leer el menú. Estaba llena de distintos tipos de pasteles, bizcochos variados y cremas. Cada uno le pidió su favorito a la mesera.

—Jisung. —Dijo el rubio llamando la atención del pelinegro.

—¿Si?

—¿Porqué sigues diciendo que quieres encontrar a quién escribió la carta cuando dices que no quieres enamorarte?

—Oh, solo me da miedo hacerlo, yo creo que mis “excusas” son muy tontas, pero pensar que todo acabará y terminaré siendo débil por esa persona, me da escalofríos. —Jugó con sus dedos mientras hablaba.

—¿Y quienes crees que fue la de la carta?

—Chan. —Y ahí Minho frunció el ceño.— Aunque preferiría ser algo un poco más de amigos, es muy dulce.

—No creo que sea el. —Demandó, Jisung lo miró curioso.— Es obvio que se empezó a fijar en ti cuando te traje al grupo, antes ni nos hablaba de ti.

—Oh, ¿Entonces quien crees que sea? —Jisung cuestionó.

—No lo sé, por eso hay que seguir buscando. —Minho alzó los hombros y comió de su recién llegado pastel.

—Ah, ya no quiero... —Suspiró Han.

—¿Qué? ¿No quieres seguir buscando? —El pelinegro negó con la cabeza.— ¿Pero por qué? Nos falta.

—Es inútil Hyung, la persona debe ser muy cobarde, a estas alturas ya debe haberse confesado, no estamos llegando a nada. —Jugó con su pastel con su cabeza apoyada en su mano.

—¡Tu fuiste quién me arrastró a esto! —Minho replicó.

—Si.. uh, puedes dejar de hablarme, me quedaré así. —Bajó su mirada a la blanca mesa.

Minho se sentía ofendido, no solo por las palabras de Jisung, si no también por sus acciones últimamente. El se veía muy convencido en hacerlo. ¿Qué lo hizo cambiar de opinión?