Capítulo 5. El primero y el único

144 9 2
                                    

El día que tanto habíamos temido durante muchos años finalmente había llegado. Mi cómplice de travesuras, mi mejor amigo, mi hermano; se casaba.

No es que no me alegrara, era todo lo contrario, Trunks merecía ser feliz y que mejor que junto a una mujer como Mai. Sin embargo, habíamos estado juntos durante tantos años que me era imposible no sentir un vacío; tener un sentimiento de pérdida. Ahora él tendría su propia familia.

Suspiré.

—En fin.

El código de vestimenta era formal por ser un evento relevante y de mucha importancia para la familia Briefs y la magnífica Corporación Cápsula. Aunque a Bulma le gustaba mantener las fiestas en familia, estaba seguro que ahora habría muchísimos invitados y es que ella era demasiado extravagante. No dejaría pasar como si nada el casamiento de su primogénito.

¡Diablos! Cuanto odiaba las corbatas.

—Gokú, recuerda lo que dijo Bulma la otra noche. No quiere enfrentamientos entre tu y ese vago de Vegeta.

—Si Milk, ya me lo has repetido toda la mañana —la voz fuerte de mi madre se escuchaba desde la otra habitación mientras advertia a mi padre —¡AAHHH! — entonces un grito y el sonido de algo contra el suelo me hizo correr desde mi antigua habitación en su casa hasta la de ellos. Casi me daba contra el suelo cuando tropecé con mis propios pies.

¿Y si papá había enfermado de nuevo?

—¡¿Qué sucede?! —me quedé de piedra en la puerta del cuarto viendo incrédulo la escena ante mis ojos. Mamá le daba un estirón de oreja a papá y este se quejaba de dolor en el piso.

—¡Ya déjame, Milk!

—¡Tampoco puedes llevar tu Dogi, Gokú! —ella finalmente lo soltó —¿Cómo se te ocurre?

—¡Es que odio las corbatas! —claro había cosas que se heredan a los hijos más que el parecido físico.

Después de una mini guerra entre mis padres, donde tuve que intervenir y salí regañado, mi mamá se alzó triunfante cuando su terco marido finalmente se puso el traje color azul marino y la corbata roja. Ella también había intentado peinarlo, sabiendo que nuestro cabello siempre había sido el más rebelde y ni un bote completo de gel lo arreglaría.

A veces no comprendía porque mi mamá  siendo una mujer tan independiente y sensible a la vez se había casado con alguien tan despreocupado e infantil como mi padre.

Papá mostraba como casi nunca una cara seria mientras le tendía la mano a su esposa, quien traía un vestido chino rojo a juego con la corbata, para bajarse del coche. Caminaron juntos aún agarrados de la mano y fue cuando recordé el amor y cariño con el que se recibieron en la montaña Paoz después de un simple paseo. Me sentí mareado por un momento.

—Mamá, iré a la casa para buscar a Trunks —era la excusa perfecta para el padrino.

—De acuerdo, nosotros iremos a buscar nuestros lugares y a esperar a tu hermano.

—No te vayas a caer hijo —él palmeó mi hombro, me sonrió y luego fue corriendo tras de su esposa.

¿A qué se refería con eso? Estaba loco.

Eché un vistazo hacia ellos y efectivamente ahí estaba Gohan siendo regañado, como nuestro padre, por su esposa Videl. Vaya, quizás los hombres de la familia Son teníamos un problema con las corbatas y con las mujeres de carácter fuerte.

Mientras buscaba a Trunks en la casa, pensé en Pares, en su amable y simpática forma de ser. Hasta el momento, nunca la había escuchado gritando o si quiera un poco alterada. Era muy buena y de pronto la vi a ella arreglando mi corbata, sin regaños y sin tirarme de la oreja. No me desagrado la imagen.

Quiéreme Como Te Quiero 》Bra y Goten《Donde viven las historias. Descúbrelo ahora