Capitulo cuatro

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El diario perdido

A mi cuaderno forrado de cuero:

Mierda, mierda, mierda ¡no puedo creer lo increíblemente estúpido que soy! Y es que accidentalmente perdí mi diario durante mi detención, así que ahora estoy escribiendo en un trozo de pergamino solo por que no deseo tener problemas con la Profesora Klecel.

Honestamente, no tengo ni idea de cuándo lo perdí, considerando el hecho de que estaba en mi mochila antes y durante la detención, pero entonces, cuando volví a la Sala Común de Slytherin, ya no estaba. Lucius me dijo que tal vez lo dejé en la Biblioteca, así que fuimos a echar un vistazo pero nada. Entonces me sugirió que usara un encantamiento Accio, pero tampoco aparece. Luego Lucius se fue de regreso a la Sala Común y me dejo ahí, muerto de preocupación.

Maldito bastardo...

Bien, creo que sería mejor contarte acerca de cómo fue mi detención.

Comenzó a las siete de la tarde y no término si no hasta las once de la noche, Lucius y yo nos vimos forzados a limpiar el cuarto de los trofeos con Black, Potter, Lupin y Pettigrew. Lucius, siendo el hombre más perezoso del mundo, casi no hizo nada y yo tuve que limpiar lo que él no.

Para no variar, los cuatro Gryffindors pensaron que eso era muy hilarante, así que se estaban burlando de mí todo el tiempo. Bueno, Potter y Pettigrew eran los que mas lo hacían, Lupin permanecieron en silencio (él jamás participó en las bromas), y Black solo agregó algunas cosas de vez en cuando. De hecho, eso me sorprendió, pero no dije nada.

Cuando se acercaban las once de la noche algo salió mal, aparentemente "alguien" -entiéndase como James Potter- se sintió aburrido de tanto limpiar y pensó que sería divertido verme colgar de uno de los trofeos, mientras se reía de lo que acababa de hacer .

Gracias a Merlín que Lucius estaba ahí para ayudarme a bajar, o lo más  probable es que hubiera permanecido ahí toda la noche. Entonces Lucius se enfrentó a James y volvió su cabello de color, con algunos mechones rosas, mientras yo trataba de arreglar mi camisa violeta.
Obviamente, eso creó una pelea entre James y él, Peter y Sirius comenzaron a gritarle cosas a Lucius, yo por supuesto grité en apoyo a Lucius, solamente Remus permaneció en silencio y siguió limpiando.

No mucho después de que la pelea había comenzado, la Profesora Klecel llegó y dio por terminada la pelea rápidamente, así como la detención por esa noche. Además, ella quitó cinco puntos a ambas Casas y nos despidió.

Cuando ya nos marchábamos, Remus se me acercó discretamente, tratando de que sus amigos, que estaban hablando, no se dieran cuenta y deslizó una nota en mi mano, me preguntó que si se la podía entregar a Lucius y luego se alejó apurado hacia sus amigos, para que no sospecharan que él se había alejado.

Lo miré unos segundos, antes de volver a ver a Lucius, que miró durante la nota en mi mano. Levanté mi cabeza y él se ruborizó (cosa que no hace muy a menudo) y me dijo la nota. La abrí lentamente y comencé a leerla, después de dos minutos de estar leyendo yo estaba boquiabierto mirando la nota, mientras Lucius leía desde detrás de mi, ahora un rubor cubría toda su cara y entonces tomó la nota de mi mano y la guardó en su bolsillo.

Resumiendo, la nota básicamente decía que Remus aceptaba la invitación que Lucius le había hecho para salir, pero había contestado de una manera que ninguna persona que lo leyera entendiera.

Lucius me amenazó para que no dijera nada, yo me reí pero le aseguré que no diría nada, y después nos dirigimos de regreso hacia la Sala Común de Slytherin...y fue entonces cuando miré en mi mochila y me di cuenta de que no estaba mi diario. Fue ahí, como ya había dicho, que el caos comenzó y Lucius me dejó solo.

Mmh...tal vez debería decirle a Remus una o dos cositas acerca de Lucius, bien solo era una idea.

Bueno, tengo que irme, ya se me termino el espacio en el pergamino.

Sinceramente...

Severus P. Snape.

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