Ojo del Juicio - Blue Archive x Lost Judgment

#11: Un lugar en el mundo (Parte 1)

El órgano latiendo en su pecho le da una sensación que parecía llegar a sus propios oídos. Su cerebro siguió el mismo ritmo, creándole pesadez que lo inmovilizaba, logró abrir los ojos, pero su visión se volvió borrosa mientras luchaba por asimilar lo que le rodeaba.

Aclarándose poco a poco, su mirada vagó por la habitación de una oficina. Finalmente se detuvo en su teléfono celular roto que yacía en la mesa. Recordando su encuentro con el soldado, regresó a él una oleada de ideas estremeciéndolo.

Cuando extendió la mano para agarrar su celular, de repente sintió que otra mano tocaba la suya. Al levantar la vista, vio al estudiante que le a ayudado antes. En un tono suave y firme, ella dijo: "No me arrepiento de haberlo ayudado, sea o no mi deber de cualquier manera". Yagami miró con sorpresa, parpadeando ante la repentina aparición y desaparición de su conocida.

"Serina...?"

Se sentó en el sofá, todavía sacudiéndose de la confusión tras ver al estudiante repentinamente. Guardó su celular roto, volvió ha escuchar la nueva voz que estaba sentado a su lado, preguntándole en voz baja: "¿Cuál es tu motivación para estar aquí? Quiero decir, veo a un hombre increíblemente dedicado a nuestro oficio en Trinity. Pero, ¿Qué te hizo seguir este camino hacia la justicia?" Cuando se giró para mirar el lugar donde había estado la chica, lo encontró vacío.

"Maria...?"

Se levantó lentamente, cada movimiento produciéndole un dolor agudo que luchaba por ignorar. Abrió la puerta y salió, inhalando profundamente en un esfuerzo por recuperar el aliento. El aire frío le picaba los pulmones, pero le proporcionaba cierta sensación sofocante en el pecho que le aliviaba. "¿Alguna vez te han enseñado que los secretos deben ocultarse para siempre, sin lastimar a los demás?", preguntó en voz baja, la chica se volvió para mirar a Yagami que estaba a un lado de él con una expresión amable pero firme. "Tú que eres nuevo en Kivotos, te pregunto, ¿Qué harías?"

"Hinata".

Llegó a las escaleras y comenzó a bajar, obligándose a mantener el equilibrio, otra voz resonó en su mente. Viendo a la niña sentada en las escaleras, "Soy consciente de que tengo que salir de mi zona de confort para desarrollar una relación sana con otras personas", dijo con una sonrisa. "Cerrarme de los demás me haría perder muchas cosas maravillosas. Y estoy dispuesta a salir de mi propia caja". La niña asintió con la cabeza como para enfatizar sus palabras, luego de desvanecerse en el aire.

"...Ui".

Continuó caminando por el pasillo donde otra voz resonó a su lado. "La ciudad academia es conocida por jóvenes donde las lecciones son voluntarias para aprender con nuestras propias manos. El adulto es quien tiene el poder, el que sabe cuándo tomar la delantera. El 'otro lado de la moneda de esta ciudad', un lado del que pocos son conscientes". La voz se apagó, dejándolo solo una vez más en el pasillo vacío.

"Hina".

Yagami se detuvo frente a la entrada del club, con la mirada fija en el reflejo de Shiroko que estaba delante de él, habló en voz baja resonando en el aire quieto. "Esta ciudad necesita ayuda. Está mal en tantos sentidos y necesitamos la ayuda de muchos para solucionarlo. Ya sea que se trate de tu trabajo o no, toda ayuda es apreciada", dijo, mirándolo a los ojos. "Incluso si es impredecible, todavía hay un plan. Y ese plan debe detenerse". Dejando que sus palabras se asimilaran, el reflejo se desvanece.

"...Yo". Èl apretó fuerte sus puños, viendo el letrero del club luego de respirar e inhalar.

Cuando Yagami abrió la puerta con cautela, notó una sensación de inquietud entre las chicas.