Lo Que No Has Visto

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Aclaración:
Este capítulo será narrado por Perú y será pasado
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Había escuchado muchas veces lo mismo, siempre que me miraban de más pequeño siempre decían lo mismo "Despues del túnel hay siempre una luz" en aquellos momentos, cuando estaba aún en el túnel, no lo creía.

¿Cómo hacerlo si estaba en el fondo completamente solo? No tenía a nadie para mí.

Papá se había ido, y mis pocos recuerdos de la infancia estaban consternados por mamá. Ella siempre me recordaba cuánto me odiaba y como aborrecía el como yo había destruido su vida. Pienso que lo mejor que pude haber hecho es irme de ese lugar.

Coger a mi llamita, un abrigo de cebra que tenía, mi mochila empacada con algunos panecillos y una botella de agua, mis ahorros que ascendían cómo máximo a los cinco soles e irme. Irme una noche lluviosa y no mirar atrás.

Pronto descubrí que si mamá era cruel, el mundo allá fuera era aún peor. Era un niño de cinco años merodeando por las frías calles. Solo.

Y así estube un muy buen tiempo, tirado en un callejón, tratando de cuidarme como podía, ya sin alimentos y con solo unos soles en mi bolsillo. Con hambre, sed y frío. Al menos hasta que, cuando estaba ya por colapsar llegó un ángel a por mi...

Su nombre era España, era un niño mayor que yo, tenía 7 años según recuerdo. Él chocó conmigo por error. El mejor error que halla podido tener.

España: A-Ah perdón --Dijo-- ¿hola?

Recuerdo que verlo me hizo reincorporarme, estaba frente suyo y no parecía verme. Me fijé en sus bellos ojos chocolate. Estos estaban fijos en un punto sin parpadear.

Perú:...Hola...--Susurra-- ¿Te perdiste?

España: Eres un niño --Sonrie-- y si... Mi papá debe estar buscándome. --Dijo-- ¿podrías ayudarme a encontrarlo? Debe estar por este lugar...

Perú: A-Ah bueno...tu crees que tu papá me pueda dar algo que comer? --Pidio avergüenzado--

España: Supongo que sí, tenemos mucho.  ¿Si me ayudas? --Sonrie--

En ese entonces era un niño, no sabía muchas cosas, y el que ese niño no me mirara no lo entendía, aunque por las circunstancias tampoco me importaba mucho. Camine fuera, no me seguia. Voltie la mirada y lo ví tantear con sus dedos

España: ¿sigues allí? Di algo por favor.

Perú: Aquí --Llama-- Vamos.

España: Ven...por favor, no puedo saber dónde estás --Pidio--

Recuerdo que lo vi en ese instante como un niño algo tonto, así que me acerque a él y tome su mano. Sentí como se alteró un poco, España era tímido, era algo que descubriría con el tiempo.

Perú: Ven, vamos.

Lo guíe, el caminaba muy lento, ahora que lo pienso era tonto, porque buscábamos a alguien a quien yo no conocía. Y el parecía que no podría identificar a larga distancia. Pero bueno...eramos niños.

Caminamos por largos minutos, quizá 40 minutos, el estaba cada vez más asustado, lo supe porque estaba llorando.

Perú: No llores --Pide-- Ya lo encontraremos.

España: --Solloza-- Papa --Solloza--

Perú: --Suspira--...quédate aquí un segundo, no te muevas.

Tenía poco dinero, muy poco, incluso mi yo de ese entonces sabía que eso no alcanzaba para nada, lo había descubierto por las malas pero...pero si podría darle un uso.

España: ¿q...que? --Dijo al sentir un suave tacto en su mejilla--

Perú: Es algodón de azúcar, anda, come.

Tenía hambre, poco dinero...pero estaba dandosela a él, estúpido quizá. Solo se que él había dejado de llorar, sus mejillas tenían un lindo rosa. Sus labios estaban manchados de algodón...me alegra ayudarlo...se que no es mucho pero para mí si lo era. Era darlo todo.

"¡ESPAÑA!"  Una voz adulta, ví como un señor tomaba en brazos a mi nuevo amigo, y le besaba las mejillas. Asi que el es su papá...parece que lo quiere...cosa que en ese entonces yo no tenía.

España: Pa-papá --Llama-- Me asusté, pensé que ya no te encontraría --Dijo-- papá, mi amigo me ayudó a buscarte.

Ese adulto me miró analizando los abrazos que tenía como ropas. Dejó a España en el suelo y me sonrió, una sonrisa...había visto hoy dos...hace tanto que no me sonreían...

Ese hombre era Imperio, era un muy buen hombre, y eso lo sabía por como me miró y como me sonrió mientras revolvía mis cabellos.

Imperio: ¿Tu mamá, pequeño? --Dijo--

Aunque esa sonrisa había destrozado mi estado anímico, en esos tiempos hablar o pensar en ella me ponía mal. Mi cuerpo temblaba de miedo, le tenía más a ella que al mundo ...o quizá les temia por igual.

Imperio: Tranquilo --Susurra-- Entiendo ¿estás a tu suerte?

España: Papa hay que llevarlo --Dijo-- es un buen niño, me compro algodón.

Imperio: Se ve que eres un buen niño --Suspira-- a España le falta un amigo...quieres...

Perú: S-Si.

Recuerdo que mis ojos se inundaron en lágrimas, imperio sonrió otra vez y me tomo en brazos junto a España cargandonos gentilmente. Yo ya estaba llorando, mamá nunca me había cargado así.

España: ¿Lloras? --Susurra al oír los sollozs-- ten... --extiende el algodón-- no llores...

Perú: N-no es para ti --Rechaza--

España: Come...

Perú: ...solo un poco...

(...)

Imperio me trataba como un hijo. Había pagado mi educación, había costeado mis chequeos médicos, me había vestido con ropas muy bonitas. Me había hecho parte de su familia.

Con el tiempo entendí a España, imperio ya me lo había dicho pero ahora lo entendía bien. Él era ciego.

España: Perú --Llama--

Perú: Dime --Dijo acercándose tocando su mano--

España: ¿jugamos juntos? --Dijo--

Así como había entendido su situación física, entendía su situación social. El no tenía muchos amigos, el no poder ver no le permitía jugar muchas cosas, algo que a nuestra edad era crucial para hacer amistades. Pero no me quejaba. Yo siempre iba a estar para el.

Perú: ¿A qué jugamos?

España: No lo sé...uhm...

Perú: dame tu mano. Juguemos peleitas de pulgares.

España era mi mejor amigo, mi hermano.  Le debía la vida, sin el hubiera muerto en la calle, lo adoro.

España: Perú --Llama-- ¿Crees que algún día pueda ver? --Susurra--

Perú: A-Ah...yo creo que sí --Sonrie-- solo debes desearlo mucho mucho mucho.

España: Ya lo hago...

No voy a mentir, mi carrera se la dedico a él, cuando sea grande no se cómo, pero te ayudaré, y te prometo que podrás ver. Veremos un arcoiris. Ye mostraré todo lo que no has visto estos años.

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