MISION 1

375 32 0
                                    

Un día bello y soleado, es perfecto, para quedarme acostada sin hacer nada... O eso creía.

-Beth, Beth, juegas con migo!!!.-Me pregunto Anya mientras se acercaba a mi corriendo.

Rayos, yo que tenia la esperanza de no tener que hacer nada, bueno aveces cuando planeas algo te salen las cosas totalmente distintas.

-Por supuesto Anya.- Le respondí mientras sonreía, no soy capaz de decirle no a Anya, en especial teniendo en cuenta que casi no convive con los demás niños

Me levante de la cama para seguí a Anya, le gustaba jugar con el señor Quimera en un cuartito con una mesita, aveces jugamos a la hora del té, o a los espías, el juego favorito de Anya.

Al llegar al cuartito Anya me pidió que me sentara ya que era la hora de tener una junta con ella y el señor Quimera para hablar sobre una "misión muy importante la cual debíamos de cumplir", aunque solo se tratara de ayudarla con unos dibujitos.

No les ha pasado que sienten que algo raro va ocurrir, no lo se un presentimiento extraño, porque a mi si y justo en este instante lo estaba sintiendo, como si algo fuera a cambiar el día de hoy.

-Olle Beth, ¿te encuentras bien?.- Me pregunto Anya.- Llevas mucho tiempo biendo al señor Quimera de una forma muy fea.

-Ah, oh no te preocupes Anya estoy bien.

-Esta bien, pero discúlpame con el señor Quimera lo asustaste.- Me dijo mientras apuntaba al señor Quimera y habría mucho los ojos.

-Esto debe ser una broma.- Susurre mientras entrecerrados los ojos y una gótica de sudor bajaba por mi sien para después suspirar y voltear con el señor Quiemera.- Una disculpa señor Quimera, no quería verlo de una forma muy "fea".

Cuando dije eso Any soltó una pequeña risita, de cual me vi contagiada.

○o。..。o○

Después de un rato en el cuarto escuché pasos venir de afuera para que después la puerta fuera abierta, dejando entrar al encargado del orfanato y a un hombre rubio y con un traje de una tonalidad verde.

-Ellas son Elizabeth y Anya, son las más listas y también son muy buenas.- Dijo el encargado del orfanato mientras nos señalaba a mi y a Anya, supongo que después de eso pendo algo feo de nosotras, lo pude ver en la expresión de Anya.

Anya podía leer la mente, ella era una telepata aveces le gustaba jugar con eso, pero se molestaba cuando a mi no podía leerme la mente, según tengo entendido en por mi telequinesis, crea una pequeña barrera que no permite que Anya lea mis pensamientos. Lo sé una hermana telepata y otra con telequinesis, no más nos falta volar y listas para entrar a la liga de la justicia.

-Que esperan presenten se.- Anya rápidamente se paro, yo no me moleste ni siquiera en pararme, el suelo es más cómodo de lo que parece.

Vi que el señor se le quedaba mirando a Anya supongo que estaba pensando en algo.

-6 tengo 6 años.- Me le quedé mirando a Anya cuando dijo eso, en primer lugar porque lo hizo es obvio que tiene 4 años, digamos que su altura no la ayuda en mucho.

-Cierto, creo que tiene 6.- dijo el encargado.

Dios este hombre no puede ser más estúpido, pero bueno bien dicen, la estupidez humana no tiene límites, pero bueno, quien soy yo para juzgar.

Supongo que Anya esta leyendo la mente del rubiesito, ya que empezó a ponerse de puntitas e incluso a responder un crucigrama, dejándolo impactado, yo solo me quedaba sentada en el piso observando.

-Disculpa.- Me llamo.- ¿Que edad tienes?

-Mmm, tengo 16 años.- Le dije, eh de admitir que estoy algo nerviosa, no acostumbro a hablar con gente.

-Bien según entendí tu nombre es Elizabeth, ¿cierto?.- Me pregunto mientras ponía una sonrisa supongo que era para darme algo de confianza o aligerar mis nervios lo cual funcionó un poco.

-Esta usted en lo correcto, me disculpo por no haberme presentado antes.- Dije mientras me levantaba y le tendía la mano la cual acepto, sere antisocial pero se ser educada.

○o。..。o○

Tal parece que le caímos bien al hombre, que por cierto se llama Loid Forger. Acepto adoptarnos.

-Escuchen pequeñas.- Nos dijo estábamos afuera de unos departamentos.

-Anya y Elizabeth.

-Muy bien, Anya y Elizabeth. A partir de hoy serán mis hijas, pero si alguien les pregunta dirán que siempre han sido mis hijas, entendido.

Se mi hizo un poco entraña su petición pero preferí no preguntar.

Apenas entramos al departamento Anya se puso a ver su anime favorito, no la juzgo es muy entretenido, después de un rato salimos todos, me impacta un poco el echo que Anya pueda decirle "papi" a Loid tan rápido, aunque sea una niña, supongo que es raro.

Pasamos todo el día "conociendonos" aunque Lois solo logro que Anya llorara frente a muchas personas. Íbamos de regreso al departamento cuando Anya cayó dormida y Loid tuvo que llevarla cargando junto con las compras.

-Si gusta, puedo llevar yo a Anya.- Le dije, si voy a vivir con podría intentar conversar, supongo.

Loid voltio a verme para despues extenderme a Anya, la cual tome en brazos.

-Gracias, supongo que ocupaba un poco de ayuda.

-No se preocupe, cuidar de un niño no es sencillo, y menos cuando se trata de Anya, pero solo es cuestión de acostumbrarse, ya verá que en unos días podrá lidiar con ella.- Le dije mientras ponía una sonrisa, me caía bien, en especial porque se esforzaba, se ve que esto es algo nuevo para el.

-puso una pequeña sonrisa.- Muchas gracias, de verdad te lo agradezco, eh intentare esforzarme para llevarme bien con ambas.

My Little Lady (spy x family)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora