EL RELATO DE UNA UZUMAKI

no te conozco

Cuando abrí los ojos, no lo podía creer aquella Uchiha  que tanto detestaba estaba frente de mi sosteniendo los kunais mientras que me mostraba una sonrisa de arrogancia, tenía tantas ganas de agarrarla de los pelos.
—te encuentras bien Uzumaki? ¿No te lastimaste algo? —ella me pregunto lo cual me hiso enfadar más.
—Narumi estas bien? —al oír esa vos me tranquilicé, y solo le di una sonrisa como forma de que todo está bien.
—hola Sasuki —le saludo Goku a la engreída.
—eras tú la que estaba detrás los arbustos, que hacías ahí? —dije en vos alta enojada, por poco y ni la cuento.
—no vine a escuchar tus berrinches pechos de vaca, solo paso por aquí y se antojó en darles un susto.
—maldita pechos planos juro que me las pagar todo algún día.
—si algún... día, deja de ser ridícula mira en qué nivel estas.
Con esas palabras me había enojado tanto que me lancé a romperle esa cara bonita que tenía, pero en eso sentí que unas manos me sujetaban de la cintura.
—Narumi no es necesario, mejor será irnos —él me dijo tratando de calmarme, pero no iba a funcionar, estaba muy molesta con aquella Uchiha.
—déjame le enseñare una lección para toda su vida.
—te enseñaré una nueva técnica de pelea si te calmas.
—enserió?
—si.
—deberás me lo prometes?
—si te lo prometo, pero a cambio nos iremos a casa.
—bien ya terminaron con su charla aburrida? Iré al punto —en eso la Uchiha saco una carta de su bolsillo ofreciéndole a Goku el cual solo miro de una forma confusa—. Es una carta de invitación a nuestra residencia, es para que nos conozcamos mejor, ya sabes lo del matrimonio propuesto por los acianos. La verdad una pérdida de tiempo, solo espero que seas fuerte, así como dicen, no quiero tener un esposo débil y patético.
Nosotros nos estábamos yendo a nuestra casa. Tenía esa sensación de incomodidad y angustia, algo que no podía explicar con simples palabras.
Mire a Goku de reojo, él estaba delante de mí.
—ocurre algo? —me pregunto.
—no nada, este digo si, me siento cansada.
Él se inclinado, dio una leve sonrisa.
—ven súbete, así no te vas a cansar más —me dijo.
Mitras me cargaba no puede evitar aferrarme a Goku.
Recuerdo la primera vez que lo conocí era un niño que apenas podía pronunciar algunas palabras. Mamá dijo que lo había encontrado en un pueblo donde el fuego había atrasado con todo, al principio lo iban a dejar ahí a su suerte, pero mamá lo salvó trayéndolo a vivir con nosotras desde entonces no fue más que una compañía en mi vida.
Por un momento pensé que aquel chico peli punta, cuando empecé a notar que todo lo que hacía era perfecto, se sacaba notas excelentes e incluso cuando describió que tenía poderes oculares, con las cuales dio incluso batalla a mi madre ya no estaría conmigo, pero a apresar de todo eso sigue conmigo siempre que me meto en problemas el está hay con su sonrisa tonta y ingenua tan descuidado como siempre.
Definitivamente yo no quería que se apartará de mí.
—goku estas de acuerdo en casarte con Suzuki? —pregunte.
—eh casarse, bueno yo no sé que significa, pero si lo tengo que hacer para que todos estén bien lo haré.
—es bueno oír eso.
A pesar de que Goku no sabe que significa casarse aún así me pongo feliz aún tengo oportunidad de interrumpir su matrimonio con la Uchiha, no permitiré que nadie me quité a Goku él es único que está siempre a mi lado sin importar que lo que pase y quiero que sea así para siempre, se que es egoísta de mi parte, pero yo no quiero estar sola.
Llegamos a casa por la noche, tuvimos que esquivar a algunos aldeanos que nos topamos por el camino, Goku es que estaba más cansado debido a que me estaba cargando mientras corría.
Ahora estamos en la bañera, por alguna razón se me está haciendo incómodo bañarme junto a él, ya no somos niños la verdad, verlo desnudo me está provocando algo que no puedo explicar, no puedo parar de ver los nuevos músculos que tiene incluso. Es poco vergonzoso decirlo, pero su pene a crecido.
Por la noche yo estaba recostada junto a él, esto ya era muy normal en nosotros hacer todo juntos incluso dormir juntos, pero no entiendo porque mí cuerpo está tan caliente por así decirlo, desde aquella vez que vi a esa pareja tener relaciones sexuales yo me siento así. No tome importancia a eso quiero dormir y lo voy a hacer cuesta lo que cueste.
Mi sueño empezó yo estaba vestida de blanco, mi rostro estaba cubierto por un velo, delante de mí estaba aquél tonto, vestía de traje como para un evento importante miré un poco más y entonces supe que estaba en una boda, era mi boda, yo me estaba por casar con Goku.
Cuando el señor delante mío me preguntó si aceptaba a Goku como espeso yo dije acepto, quizás en el fondo de mi quería esto.
Después de la ceremonia fuimos a nuestra habitación, él me empezó a besar después me tiró a cama lentamente se empezó a quitar el traje, una vez que estaba completamente desnudo, me empezó a quitar el vestido.
—Narumi la comida está lista, hey Narumi levántate ya es de día —el me dijo mientras me daba pequeños empujones con su mano.
Me levanté agitada mire para todos lados solo viendo a Goku a mi costado el cual solo parpadea sus párpados.
Tiempo después fuimos a desayunar, note está mañana que mis pezones estaban rígidos y algo me picaba en mi parte íntima.
Sobre todo de eso lo que más me preocupa ahora mismo no era eso, sino que ayer en el lago parecía que había cogido un resfriado.
Goku se fue de casa, mi hermano él cuál juro estar conmigo para siempre, se fue a visitar a esa chica peli negra tan detestable, pobre de mi hermano lo condenaron a vivir una catástrofe a su lado.
Me levanté para hacerme un ramen instantáneo, pero la intriga de que es lo que pasaba en la residencia de los  Uchiha me estaba matando.
Así enferma mismo fui a ver a Goku, era raro nunca antes me había enfermado, pero como dicen siempre hay una primera vez y en mi caso lo era, sentía calor y escalofríos que recorrían en todo mi cuerpo, no podía respirar bien, y con cada paso más, se ponía peor a pesar de todo no como lo hice, lo logré, había llegado a la residencia de los Uchiha.
Pero lo que veía, era impresionante. Una pelea entre esa apática y Goku se estaba líbranos en las afueras de la residencia, los golpes venían e iban, cómo bloqueaba y como se contra atacaban era impresionante, no podía seguir el ritmo con mi vista.
Ambos se alejaron del uno contra el otro, quizás iban a hacer un jutsu, pero la realidad era otra la tabla con depresión activo su Sharingan y Goku activo su poder ocular, una aura plateada lo recubría y ambos se lanzaron con todo, pero lo que pasaría nunca me lo podré olvidar.
La engreída estaba en el suelo, con varias heridas incluso se podía ver cómo apenas estaba respirando.
Voltee para mirar a Goku, y el hizo lo mismo mis instintos me decían que corra lo más pronto posible por un momento deje de sentir toda la gripe parecía que todo mi cuerpo estaba recuperado, pero a la vez no, trate de moverme, correr los más pronto posible. No funcionaba en lo absoluto. Solo vi a Goku acercarse a gran velocidad solo observe esos ojos plateados.
En mi frente una sombra me impidió ver sigue esos ojos plateados. Tomo a Goku del cuello y lo estampó contra el suelo tan fuerte que levantó una polvareda.
—te encuentras bien niña? —dijo se voltea a verme.
No respondí nada, solo observe esos ojos negros que empezaron a formar una estrella de color rojo.
Era la hermana prodigio de la que siempre presumía aquella Uchiha engreída.
 

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Primero que nada sino comentas eres gay y segundo Francia

otra cosa quieren que lo suba a Youtube este fic?

Después si ya se estoy inactivo pero solo escribo las historias cuando me inspiro después de todo no me pagan