Alguna vez escuche una canción que define el inicio de nuestra historia.
Te conocí un día de enero.
Tu presencia en aquel lugar no era la más imponente,
pero era suficiente para captar mi atención.
Al tenerte a unos centrimetros de mi pude darme cuenta que quería tenerte en mi vida,
pero no sabía como hacerlo.
¿Qué tratabas de decirme?
No tenía idea que querías decir con cada palabra que salía de tu boca,
y fue tan evidente que sonreiste antes de mencionar tu nombre mientras te señalabas a ti mismo,
me hizo sonreir,
repetí la acción para presentarme,
nos quedamos viendo unos minutos con una expresión de felicidad,
no hablaba el mismo idioma que tu,
pero no sería un impedimento para lo que sería el resto de nuestra historia.
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Serendipia
PoesiaLa vida está llena de coincidencias o de capítulos que ya han sido escritos a la espera de poder vivir cada uno y aprender de ellos. A mi me gusta creer que todo pasa por algo, pero a ti nunca creí encontrarte en mi vida, ni lo que traerías a ella.
