Capítulo dos.

1.9K 292 27
                                    

—Su majestad...—jungkook hizo una reverencia

—¿Que haces aquí?—preguntó el rey con enojo

—Jiminnie y yo... perdón, el príncipe cumple años hoy y quería darle un regalo alteza

—¿Cuantas veces debo decirles que no pueden ser amigos? ¿Cuantas veces debo repetirlo? ¿Debo enojarme?

—No...

—Papá—interrumpio Jimin—no te enojes con el, solo quería felicitarme ¿Que tan malo es eso?

—Tus hermanos me dijeron que Jungkook entro a tu habitación hace una hora y media. ¿Eso es una felicitación? ¿A estas horas de la noche? ¿Que hacían?

Jimin y Jungkook se miraron.

No podían decirle que se estaban besando.

—Solo leíamos papá—mintió

—Estoy cansado de esta rebeldía por parte de ambos. Jimin, entiende que Jungkook no es bueno para tu vida, aunque sea respetuoso, aunque tu creas que te hace bien, solo mancha tu imagen como futuro rey

—Ya te dije que no seré rey

—¿Lo ves? El esta metiendo esas ideas a tu cabeza, el te está ensuciando

—Eso no es cierto—Intervino Jungkook—su majestad yo jamas haría algo que afecte al príncipe

—Pues es exactamente lo que haces al meterte a su cuarto cada vez que puedes, lo afectas, lo ensucias, lo desvias del camino, lo pones en riesgo

—Deja de decir eso—dijo Jimin molesto—Jungkook jamás ha hecho algo que yo no quisiera, el me escucha, me consuela y me cuida

—¿Te cuida?—preguntó el rey sarcastico—Es un mocoso de dieciséis años ¿Cómo podría cuidarte? Nosotros somos quien cuida de el y así nos paga

—No soy un mocoso su alteza, soy un hombre y le aseguro que soy capaz de cuidar al príncipe si usted me lo permite, déjeme pasar tiempo con el y se lo demostraré

—No digas estupideces, para cuidarlo debes entrenar muy duro y convertirte en un guardia real ¿Crees que eres capaz de eso? Tu cuerpo no tiene músculos, eres débil, deja la rebeldía hacia tu rey y acepta que esta amistad no es posible ni ahora ni nunca

—Esa no es una opción su majestad

—Ya basta Jungkook, vete de aquí, ve a ayudar a tu madre y a los sirvientes, allí es donde perteneces

—Con todo el respeto que merece su alteza déjeme decirle que yo pertenezco a donde quiera pertenecer, yo mismo soy dueño de mi destino

—Jungkook no...—musito Jimin

El rey suspiro frustrado.
—Mereces un castigo por tu rebeldía Jungkook

El pelinegro trago grueso

—Mereces ser expulsado de mi castillo, de esa manera aprenderás a respetarme y a valorar todo lo que hice por ti desde el día que te adoptaron, cuando estés pasando hambre valoraras mi comida, cuando estés pasando frío valoraras la leña que calienta tu cabaña, cuando mueras de soledad valoraras a las personas a las que dejas de lado por estar obsesionado con Jimin

—Su majestad...

—Papá, perdona a Jungkook—rogó Jimin—perdónalo y te prometo que no volveré a hablar con el, seré el príncipe que deseas que sea pero no lo castigues

—¿No crees que ya lo he perdonado muchas veces desde que se conocen?

—Pero...

—Jiminnie... esta bien—sonrió el pelinegro—aceptare lo que el rey decida, no me importa el castigo si este es el precio por haber pasado tantos lindos momentos contigo

BELAMOUR -kookmin- Donde viven las historias. Descúbrelo ahora