Amor Maldito

Capítulo 4 "Vamos por el Trabajo"

La noche termino sin ningún inconveniente. Ángel me dejo en la puerta de mi casa esperando que entrara al departamento. En aquel momento me dieron ganas de poder besarlo, pero la inseguridad se apoderó de mí al recordarlo con aquella chica por lo que simplemente me retracté y me despedí ocultando ese deseo que me invadía en aquel instante. Aquella noche caminé sigilosamente hacia la cama que al entrar por la puerta se podía ver la punta de ella. Al llegar pude ver a mi madre que se encontraba completamente dormida al lado que daba hacia la ventana. 

Me desvestí sigilosamente y me recosté rápidamente. Me quede mirando hacia el techo con los ojos abiertos de par en par, me era imposible conciliar el sueño. Aquella noche había sido tan agitada que mi corazón saltaba de solo recordar todo lo que había ocurrido. Al despertar pude ver a mi madre en la pequeña cocina de espalda junto al lavabo mientras lavaba unos vegetales y escuchaba radio. Bostece exageradamente al verla mientras sobaba mis ojos, ella al escucharme se giró y sin perder tiempo me pidió que me levantará con su gran y evidente ceño fruncido. 

 - Hola, Mama – Dije al ponerme de pie al ver su gesto exagerado mientras se acercaba y me sacaba de la cama.

 - ¿Veo que llegaste tarde? - me miro al poner sus manos en la cintura. Me le quede mirando por unos minutos intentando pensar en que decir. Era verdad, había llegado más tarde de lo que había pensado y sobre todo había bebido, lo cual a mi madre no le gustaba para nada.

 - Si. es que estuve con Ángel y unos amigos - comenté mientras iba a caminando hacia el baño pasando junto a ella.

 Al entrar me encerré y pude ver mi reflejo en el espejo que colgaba de la pared. Estaba demacrada, él rime corrido y el poco maquillaje que me había atrevido a poner estaba todo cuarteado. Ahora entiendo por qué mi madre me miraba con esa cara. Me lavé rápidamente el rostro con jabón para poder aunque costo más de lo que había calculado. Entre a bañarme y mientras dejaba caer el agua sobre mi rostro recordaba Ángel y aquella agitada noche y aunque sabía que no debía, mi corazón se aceleraba el solo recordar y pensar que podía tener una oportunidad con él, pero eso se bajaba rápidamente al recordar a la chica que lo había besado junto al baño. Me negué a volver a pensar en aquello y sin perder más tiempo salí del baño. Mi ropa estaba tendida en la cama esperando por mí, así que rápidamente me vestí y dejé que mi cabello se secara al aire.

 Mi madre ya había dejado la comida en la mesa dándome una señal para que me sentara. Solo la miré y rápidamente me senté y comencé a comer. Se le podía ver en la cara su molestia con solo una mirada. Estaba molesta podía entender, jamás le había gustado que bebiera, pero creo que esta vez si me pase un poco y mi madre se dio cuenta, ya que me sirvió un caldo de pollo y un baso grande de leche. No sé que estaba esperando, el que se me quitara la resaca o que me fuera por el baño. 

 - Está muy rica la comida mama – sonreí al meterme una gran cucharada en la boca tratando de parecer agradecida y que de ese modo se le bajara el enfado, pero ni siquiera le dio importancia. Comencé a comer lentamente mientras paseaba la vista por aquella pequeña mesa que se encontraba en el centro de nuestro pequeño hogar.

 No tuve que ver tan lejos para darme cuenta de que solo estaba mi plato, un pequeño salero y frente a mí se encontraba un periódico enrollado. Rápidamente lo tomé para poder distraer mi mente y matar este silencio que solo era interrumpido por la música de la radio de mi madre. Comencé a leerlo y pude recordar que no me interesaban los diarios así que iba a dejarlo de lado nuevamente cuando se me vino a la mente  que debía comenzar a buscar trabajo. Busqué hoja por hoja la sección de empleos y aunque me costó encontrarlo por fin di con ella y comencé a leer. había de todo tipo, Paseadora de perro, secretaria, guardia, portero, etc.