Verena caminaba por el castillo con su típica sonrisa, esa que daba a entender que quería algo y que lo iba a conseguir, llego hasta el jardín en donde Daemon estaba observando a su alrededor estaba solo y eso era lo importante.
--- Tío --- hablo ella haciéndose la inocente. --- ¿Que haces? ---
Daemon la miro y sonrió, debía admitir que verdaderamente tenía ganas de estar con la chica.
--- Solo pensaba --- dijo hombre. --- Cosas sin importancia ---
--- No creo que sean sin importancia si tienen la mente de Daemon Targaryen ocupada --- dijo ella y finalmente se puso al lado de su tío. --- ¿Sucedió algo? ---
Daemon asintió y miro al frente.
--- Tuve una pequeña pelea con Rhaenyra --- dijo el, claro que eso Verena ya lo sabía, ella los había escuchado y la pelea fue porque la manera en que Verena y Daemon coquetearon en la cena. --- Nada con mucha importancia ---
Verena asintió.
--- Bueno, espero que se arregle, se nota que Rhaenyra y tu no pueden estar lejos el uno del otro --- expreso la chica. --- Se miran con tanto amor --- dijo sonando inocente.
Daemon sonrió ante eso.
--- Si, de verdad la amo pero aveces extraño ser el Daemon de antes --- dijo el.
--- ¿Mujeriego y sádico? --- pregunto la chica divertida. --- Con lo primero te puedo ayudar --- dijo ella y acarició levemente la mano del príncipe. --- Con lo segundo, ya veremos ---
Daemon la miro divertido, claro que parecía una niña inocente que no sabía lo que provocaba pero no era asi, esa mujer sabía perfectamente lo que hacía.