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Daemon se levanto de la cama y tomo su espada, camino lentamente a la entrada de su aposento y abrió la puerta para asomarse por el pasillo notando a una joven que le daba la espalda y caminaba por el lugar, la chica al escuchar los pasos de Daemon lo miró sobre su hombro pero no se detuvo, continuo su camino con el príncipe detrás de ella.
---- ¡Oye! ---- Hablo Daemon tratando de llamar la atención de la joven la cuál continuaba con su camino haciendo que su bello vestido color azul se moviera con el viento y los pasos. ---- ¡Detente! ----
La chica dio la vuelta a la izquierda perdiéndose de la vista de Daemon haciéndolo correr en busca de ella pero el al doblar el pasillo se desespero al verlo vacío. De pronto Daemon sintió un filo el cuál se clavaba levemente en su espalda, el hombre se quedó quieto esperando a que la daga o lo que sea que amenazaba su vida terminara su trabajo pero no fue así, escuchó el metal caer al suelo.
---- ¿Por qué me sigue? ---- pregunto una voz femenina haciendo que Daemon volteara de inmediato.
---- ¿Quién eres? ---- pregunto alzando su espada.
---- Athea ---- se presentó la joven. ---- ¿Por qué me seguía? ----
---- Tu has estado deambulando afuera de mi aposento, ¿Que quieres? ---- pregunto Daemon.
Athea frunció el ceño.
---- Yo iba a dónde mi madre ---- dijo la joven. ---- Lamentablemente para eso tengo que pasar frente a su aposento, no sabía que nadie podía pasar por ahí, si no me hubiese lanzado desde la ventana de mi aposento a la ventana del salón de mi madre ---- Daemon rodó los ojos al escucharla, Athea al ver qué Daemon ya no diría más continuo su camino con el detrás de ella. ---- ¿Que quiere? ---- pregunto ella molesta pero sin detenerse.
---- Te acusaré con tu madre ---- se burló Daemon.
Athea rodó los ojos y finalmente llegaron a dónde su madre la cuál sonrió al verla llegar pero su sonrisa se borró al ver a Daemon detrás de ella.