One Piece en Hogwarts (Ace Y Tú) - (Ichiji Y Tú) [FINALIZADA]

66 - El adiós

El hechizo de una llamarada poco parecía afectar al guardapelo, el cual se veía intacto ante cualquier hechizo de ataque que los jóvenes quisieran enviarle.

Una situación que provocó que los nervios y la desesperación en (Tn) crecieran y comenzará a sacudir la varita provocando que el colgante saliera volando unos metros más allá mientras ella continuaba enviándole ataques.

Luffy - Esa mierda no se rompe.

Robin - Barbablanca te dijo que había que buscar pero nunca te aclaró como destruirlos. -susurró pensativa.

La joven se agachó tomando el guardapelo y se mordió el interior de la mejilla tratando de contener su enfado.

(Tn) - Lo llevaré puesto hasta que sepamos que hacer con el.

Ace la observó en silencio mientras Luffy se acercaba a ella para calmarla, una acción que provocó que el corazón del pecoso le diera una punzada en su pecho.

Mientras tanto...

El tren directo a Hogwarts partió, y en su interior, una atmósfera tensa se propagaba entre los estudiantes. No era de buen agrado que dementores y seguidores de B.K. vigilaran el tren.

Todos los alumnos sabían el motivo, pero a pesar de muchos estar del lado de la joven, no podían negar el sentimiento de incomodidad que les provocaba aquellas presencias.

La puerta del bagón de Gryffindor se abrió, dejando entrar a dos hombres vestidos de negro buscando entre los alumnos a una persona en concreto, algo que provocó que uno de ellos se levantará irritado y hablase por todos los presentes.

Sanji - Eh escorias. -los llamó a la vez que Nami trataba de sentarlo. - Ella no está aquí.

Zoro sonrió viendo al rubio mientras que Ussop se escondía debajo de la mesa asustado.

Horas más tarde...

(Tn) se encontraba con los ojos cerrados fuera de la tienda de campaña. Trataba de controlar una ira y malestar que no dejaba de crecer con cada minuto que pasaba.

Robin se acercaba a ella con un ramillete de romero en sus manos recién recolectado del bosque.

Robin - He tomado romero para realizar un ungüento curativo. -informó cuando estaba a pocos pasos de ella.

Nuevamente en el interior de aquella tienda, el sonido de la emisora de la radio encenderse provocó que la joven se girase enojada.

(Tn) - ¡Diles que apaguen de una maldita vez esa radio!. -gritó molesta.

Robin - Le ayudan a calmarse. -dijo en tono calmado.

(Tn) - ¡Nadie puede calmarse escuchando los nombres de los fallecidos!.

Robin - Tan solo esperan no oír malas noticias.

La chica se levantó de mala gana y pasó por el lado de Robin. - ¡Y haz algo útil en vez de preparar una maldita crema de romero!.

Robin cerró los ojos durante unos segundos y habló con voz firme.

Robin - Dame el collar. -ordenó.

La joven la miró.

Robin - Dame. -repitió extendiendo la mano.

(Tn) se lo quitó de mala gana y justo cuando lo dejó caer sobre la mano de su amiga, una sensación de calma invadió su cuerpo.

Robin - ¿Mejor?.

(Tn) - Si... -susurró. - ¿Qué ha pasado...?

Robin - La energía del horrocrux es demasiado contaminante. -informó. - Lo llevaremos por turnos.