Capítulo 5: Encuentro

13 7 3
                                    

Sara Castillo

Muchos pensamientos pasaron por mí cuando el avión había despegado hacia Francia.
¿Qué locura acababa de hacer? No lo sé pero quería salir de esa casa, quiero sanar de todo lo que me enteré y volver sin culpa.

Me puse a escuchar música en todo el viaje y dormir por un rato, dejar todos mis problemas y simplemente descansar bien como hace días que no lo hacía.

Mi trayecto hacia Francia en unas 14hs o más  se terminó y un nuevo país me tocaba pisar.

Había cumplido con todos los requisitos para entrar al país, menos mal.

Salí del aeropuerto con mis cosas y me quedé mirando alrededor ¿Y ahora qué hago? ¿A dónde me llevará esta decisión? Ya no tenía idea de que paso debería dar y el día en que mis tíos me contaron la verdad se pasó por mi mente.

Gabriel Steven

Salí de mi casa muy enojado y me dirigí al aeropuerto, amo los aviones y me dan algo de paz y rabia a la vez por lo que no puedo hacer, volver a mi país, a mi hogar.

Estaba sentado en la salida, mirando hacia la pista esperando que despejen los aviones.

De pronto se largó a llover y no había traído un paraguas entonces decido entrar a dentro, de camino a la puerta me cruzo con una mujer que estaba parada en medio de la lluvia, parecía perdida, sin saber que hacer. Yo decido seguir mi camino pero algo vi en esa chica que me dejó inquieto ¿Quién quiere mojarse con este frío? Muy raro por lo que voy de vuelta hacia donde estaba ella.

— ¿Te puedo ayudar en algo? — Le pregunté, mientras veía sus ojos cafes llorosos.

— ¿Quién eres? — Habló ella desconcertada.

— Me puedo presentar adecuadamente pero no aquí en medio de la lluvia, vamos adentro — Le dije mientras señalaba las puertas del aeropuerto.

Ella me siguió sin problema.

— Me presento, soy Gabriel, como verás no soy un francés común si no que soy latinoamericano por las dudas aclaro — digo un poco nervioso por la situación en la que la estaba conociendo, en la lluvia y con su mirada perdida y llorosa.

— Gracias por aclarar, yo soy Sara y lamento haberte interrumpido tu camino — Dijo ella, como si tuviera pena.

— Un gusto Sara y no me has quitado nada de tiempo, ¿Qué hacías afuera mientras llovía y por qué llorabas? Si puedo saber —

Mientras más pasaban los minutos más nos hacia frío.

— Es una historia larga y no sé si te pueda contar —

Antes de que pudiera contestarle su teléfono empezaba a sonar y sonar.

Sara Castillo

Qué momento incómodo y ya no sé que decirle, seguro se burlaría por la locura que acabo de hacer.

Justo cuando me quiere decir algo más mi celular empieza a sonar, era una llamada de Brisa, ya me había llamado muchas veces.

llamada de Brii❤️

"Hasta que contestas amiga, es tarde ¿Donde estás? Fui a tu casa y no estabas ahí y aparte ya sé que renunciaste al trabajo ¿Qué está pasando contigo Sara?"

Sonaba muy enojada y preucupada a la vez.

"Bri, no quería molestarte y ahora no puedo explicarte todo, te quiero mucho amiga, te llamo luego para contarte"

Corté la llamada y los ojos de ese chico estuvieron siempre mirándome ¿Por qué llegó a mi vida justo cuando no sé qué hacer con ella?

— ¿De dónde vienes? — Me preguntó el.

— Soy de Argentina —

— ¿Tienes algún pariente aquí o a donde piensas ir? —

— ¿Por qué tantas preguntas? — Le respondo con más seguridad, las preguntas no me están haciendo bien en este momento, estoy apunto de ponerme sensible.

— Oye no te enojes, solo quiero ayudarte —

— ¿Ayudarme en qué? Acabo de descubrir que la muerte de mis padres fue por mi culpa ¡Cómo piensas ayudarme dime como! — Dije llorando y me tiré al suelo, como si el mundo se me viniera abajo.

— Tranquila, si me cuentas desde el principio puedo ayudarte pero por favor deja de lastimarte — Me dijo sutilmente ayudándome a ponerme de pie, sus manos suaves y cálidas se sintieron tan bien en las mías.

— Lo siento, ya me calmo —

— ¿Vamos a un hotel para hablar cómodamente? —

— No sé si pueda pagar uno —

— De eso me encargo yo ¿Vamos? —

— De acuerdo —

Y sin tener conocimiento de quién es realmente, decido confiar en él, salimos del aeropuerto y nos subimos a un taxi, Gabriel da una dirección específica y el taxista comienza a ir a ese lugar.

CurándonosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora