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El tiempo pasó, las heridas empezaron a cerrar y el futuro empezaba a brillar un poco más

—Feliz cumpleaños Ayla!— había pasado un año desde que se unió aquel grupo... y ahora eran sus mejores amigos, jamás podría haber pedido unos compañeros tan geniales como ellos realmente se sentía tan afortunada

—De verdad Gracias, ahora comamos antes de que se enfríe— estaba feliz, este había sido su primer cumpleaños y aniversario de su unida al grupo

La sala en la que habían decorado con globos de colores brillantes, serpentinas y una gran pancarta que dice "¡Feliz cumpleaños!". La mesa del centro está cubierta con un mantel festivo y está llena de regalos envueltos con lazos coloridos. La luz del sol entra por las ventanas, creando un ambiente cálido y acogedor.

Se escuchan risas y murmullos de emoción mientras todos esperan ansiosamente el momento de abrir los regalos.

Ayla nunca había vivido aquello, había estado en los cumpleaños de sus ahora amigos... pero era la primera vez que ella era la protagonista de aquella fiesta

—¡Feliz cumpleaños! Espero que te guste— la sonrisa de ... mostraba toda su felicidad, creo que todos en aquel lugar solo podían sentir felicidad y emoción y más si recordaban lo que sufrieron meses atrás

...

No sabían cómo habían llegado tan repentinamente ante aquel bosque rodeado de árboles altos y frondosos. Los rayos de sol se filtran a través de las ramas, creando un juego de luces y sombras en el suelo cubierto de hojas. Cuatro amigos, ahora mismo corrían a toda velocidad entre los árboles, con expresiones de terror en sus rostros, después de todo algo que no habían podido identificar estaba atrás suyo

El sonido de ramas rompiéndose y gruñidos amenazantes se escucha cada vez más cerca... logrando que aquellos jóvenes tuvieran que salir rápidamente de ese lugar

Ayla estaba jadeando, habían estado corriendo por tanto rato que su cuerpo simplemente estaba cansado de todo, pero aun así seguía —¡Vamos, chicos! ¡Tenemos que encontrar una salida! —

El grupo de amigos se adentra en un claro abierto, pero el monstruo sigue persiguiéndolos de cerca, emitiendo rugidos intimidantes. Asher, en un acto de valentía, se detiene y arroja una piedra hacia el monstruo para distraerlo.

—¡Aquí, monstruo horrible! ¡Ven a por mí si te atreves! — dijo con determinación no dejaría que sus amigos les pasara algo

El monstruo se detiene momentáneamente, fijando su mirada en Asher. Los del grupo habían aprovechado en dar un momentáneo respiro y continúan corriendo en busca de una ruta de escape. En su huida, Lucía tropieza y cae al suelo en eso Daniel se da cuenta y se vuelve para ayudarla, después de todo eran un grupo y juntos irían a todos lados, así que se levantan rápidamente y continúan corriendo, manteniendo el ritmo mientras el aquel horrible ser se acerca.

Ayla encuentra una pequeña cueva entre las rocas y señala a sus amigos.

—¡Rápido, aquí! ¡Podemos escondernos en la cueva!— grito con todo lo que tenía, señalando donde era 

Los cuatro amigos se apresuran hacia la cueva y se arrastran hacia su interior, mientras el monstruo se acerca peligrosamente y Apenas entran, el monstruo se detiene en la entrada, gruñendo con furia, incapaz de alcanzarlos. Desde el interior de la cueva, los amigos contienen la respiración, temerosos de hacer cualquier ruido que pueda alertar al monstruo de su presencia. El sonido de los latidos de sus corazones llena el aire mientras esperan en silencio.

Después de un momento tenso, el monstruo se aleja, frustrado por su incapacidad para llegar a ellos. Los amigos dejan escapar un suspiro colectivo de alivio.

—¡Eso estuvo cerca!— decía agitado, pero a la vez aliviado que todo al fin se había solucionado

— ¿Creen que se haya ido del todo?— esta vez pregunto lucia, a pesar de todo estaba temerosa aun

— no lo se, pero lo que si se es que no podemos quedarnos aquí mucho tiempo. Necesitamos encontrar una salida y alejarnos de este bosque maldito— dijo asher

Los amigos salen cautelosamente de la cueva y reanudan su huida, con renovado sentido de urgencia. Mientras corren, buscan señales de una ruta de escape, manteniendo la esperanza de que puedan dejar atrás al monstruo y regresar a salvo, pero a pesar de todo se logro fue más tiempo del esperado, aunque nadie se quejo 

...

Ayla no sabían cómo debía abrir aquel regalo que se notaba la dedicación al envolverlo así que decide abrirlo poco a poco, con mucha calma y cuando por fin termina de abrir aquel regalo, sus ojos se llenan de lágrimas de alegría.

—¡...! ¿Como pudiste? Esto es maravilloso— no podía creer que aquel tonto le había regalado un álbum... tal vez muchos pensaran que era un regalo normal, pero para Ayla era todo... podía ver y revivir aquellos maravillosos recuerdos con sus amigos

Luego continuaron con aquella celebración, donde casi todo era risas y diversión hasta que la fiesta ya debía terminarse

—¡Feliz cumpleaños, ayla! ¡Te mereces esto y mucho más! — dijeron todos al unísono, sabían que la fiesta debía terminar e irse a dormir de otra manera amanecerían muertos de sueño

En un momento las lágrimas no podían contenerse y fluyeron

—Gracias... de verdad muchas gracias, Estoy tan bendecida de tenerlos en mi vida. Estos regalos son preciosos, pero ustedes son los verdaderos tesoros en mi corazón—

La sala se llena de abrazos y palabras de cariño. La escena se desborda con emociones genuinas y un sentido profundo de conexión, aunque no compartieran sangre eran una familia

¿Quien soy?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora