𝐀𝐫𝐨 𝐝𝐞 𝐄𝐭𝐢𝐨𝐩í𝐚 - Dekubaku -

𝑬𝒑𝒊𝒔𝒐𝒅𝒊𝒐 4

Ambos se miraron y ninguno testificó algo.

– Bakubro, ¿qué haces acá?. . .¡¿también eres fan de All Might?! – dijo entusiasmado Kirishima

– ¡¿Yo?!. . .Nonono, solo vine a acompañar al niño que cuido, él en verdad si es fan – mentía, él era sumamente fan de All Might, solo que le daba vergüenza admitirlo.

Buscaba con la mirada a Izuku, tanto que dejó de escuchar lo que parloteaba su amigo pelinegro.

– Bakubro, ¿me estás escuchando?

¿A dónde te fuiste Zuzu? – pensó un rubio preocupado

– Pelos de mierda ahora vuelvo, creo que voy a perder el empleo – se fue buscando por todos lados al pecoso, no se dio cuenta que su amigo lo estaba siguiendo.

[. . .]

¿Quién es él y por qué habla con Kacchan con tanta familiaridad? – Desde ya hace buen rato Izuku había estado observando toda la interacción que su Kacchan cargaba con cierto pelinegro.
De alguna manera aquello lo hacía tener un mal presentimiento, la forma en la que el pelinegro tocaba a su niñero innecesariamente, dejó sus cosas a un lado y se fue a sentar en una esquina a esperar pacientemente a Kacchan, él sabía que Katsuki lo buscaba y Midoriya quería ser encontrado por él.

[. . .]

Despertó todo sudado encima de su cómoda cama, le sorprendió este hecho, o sea, ¿cómo? ¿cuándo? y sobre todo ¿dónde está Kacchan?

Su mamá entro a la habitación – Oh cielo, ya despertaste – la madre de Izuku traía un par de cobijas, que al parecer iba a dárselas a su único hijo para que se abrigará mejor – Katsuki ya se fue, te dejó acá bien dormidito hace media hora – una vez que terminó de escuchar eso, dirigió su mirada al reloj al lado de su cama. . .6:30 de la tarde marcaban las agujas del reloj con forma All Might pequeño.

Ni siquiera me pude despedir – este pensamiento lo entristeció y su madre notó esto, se acercó al pecoso y lo envolvió en una tibia manta – ¿Qué sucede cielo? ¿todo bien? – le preguntó con aquel suave tono de voz que toda madre posee. . .algunas.

Izuku solo se acurruco en los brazos de su mamá. Y así quedó profundamente dormido hasta el día siguiente.

[. . .]

15 de julio, nuevo día, nuevas emociones, nuevo dígito de edad, en verdad agradecía mucho que su cumpleaños este año cayera un sábado porque ya se estaba preparando mentalmente para todo lo que se le venía en el colegio, pero viendo que es fin de semana, lo alivio, no feliz pero aliviado. Lamentablemente sabía lo que el lunes le tocaba, por eso prefería no tocar ese tema.

Se levantó entusiasmado de la cama, ese día su mamá lo iba a llevar al nuevo restaurante que se había inaugurado recientemente en la ciudad con temática de All Might. Emocionado era poco para describir los sentimientos del pequeño Izuku al imaginar estar en ese posiblemente fantástico lugar.

Hizo su rutina de todas las mañanas, se lavo los dientes, se cambió la ropa a una más casual y finalmente se dirigió a la cocina, observó a una persona que no pensaba ver en esa mañana.

– ¿Kacchan? – preguntó curioso el peliverde, no era que le molestase la presencia de Kacchan ni nada de eso, pero se esperaba la presencia de la mujer que le dio la vida. 

– Buenos días, Deku – pasó de largo de su menor.

Izuku sintió lo peor, se asustó solo por esa acción, ¿Acaso Kacchan estaba enojado con él? ¿qué había hecho? no tenía la respuesta de ninguno de los dos, solo un hecho era claro, no quería que el rubio estuviera así con él, o tal vez solo simplemente estaba sobre pensando todo y–

– ¡Hey, Deku! – el nombrado giró al escuchar la repentina voz del otro chico – Feliz cumpleaños. – el de ojos rojos le regaló una cálida sonrisa al contrario, en manos este tenía un enorme regalo, que tapaba casi la mitad de su cuerpo.

Al pequeño le brillaron los ojos al ver aquella escena – ¡Kacchan! – se abalanzó a abrazarlo, y sin querer empezó a derramar pequeñas gotas de llanto.

– Deku, ¿por qué lloras? – preguntó curioso, sabía que había personas emotivas pero no sabía que existían a tal nivel.

– Es que pensé que tú – gimoteó – estabas molesto conmigo, no quiero que Kach-

Katsuki lo detuvo – Ya Deku, no tengo porque enojarme contigo además, es tu cumpleaños.

Izuku se acurruco entre los brazos de Kacchan, otra vez el rubio brotaba un aroma muy relajante – ¿Deku vas a abrir el regalo? – ambos se encontraban en el suelo y el regalo tirado a un lado. Al pecoso se le olvidó completamente que había un regalo entre las manos de su mayor.

Se tuvo que separar de él y abrír su regalo ahí mismo, el paquete en verdad era grande, esta característica aumentó su curiosidad por saber su contenido. La abrió y lo que vio lo dejó seco – ¡Una figura de acción de All Might en tamaño mediano! Son muy difíciles de conseguir ¡Kacchan, gracias! – otra vez se abalanzó contra su opuesto.

El muñeco casi casi alcanzaba el tamaño de Izuku, y era para armar poco a poco las piezas – Si quieres después lo armamos, está algo pesada – dijo Bakugou

– ¿Kacchan, a quién se lo robaste? – lo miró con los ojos entre abiertos, fingiendo desconfianza. 

– Hey, yo no robó – le dio un pequeño golpe en su cabecita para que entendiera que él lo compro con esfuerzo – Tengo un amigo que tiene un amigo que necesita pasar de año, es todo lo que te diré – Izuku en verdad no había entendido algo pero lo importante era que se encontraba feliz.

– ¿Friki, me puedes soltar?

– . . .¿Friki?

[. . .]

Después de haber terminado de desayunar, recién tomó en cuenta que no había visto a su mamá en toda la mañana y que su principal duda era donde se encontraba ella. Volteó a buscar al rubio que se encontraba lavando los platos.  

– Kacchan, ¿dónde está mi mamá? – se acerco a su mayor para una mejor audición. 

Katsuki se tensó casi que derribaba un plato por la pregunta repentina.

– ¿Kacchan?

– Ell-Ella  salió, no vuelve hasta mañana – se apuró en hacer sus cosas para después quitarse su delantal y según él lograr escapar de aquella responsabilidad que cargaba. 

– ¡Que! – el niño abrió la boca por la sorpresa

– ¡Digo! Viene hoy ¡No! Viene viene este ¡Déjame! – salió de la habitación y se encerró en el baño.

Izuku que no sabía que era lo que sucedía, se quedó ahí estático en la cocina, repasando todo lo que vivió en esta mañana.

Una vez que captó todo se dirigió rápido al baño donde anteriormente Katsuki se escondió. 

 – Kacchan, ¿Qué es lo que sucede? tengo miedo – aquello último le llegó como una daga en el corazón para el omega. ¿Por qué le daban esa responsabilidad a él? No es justo. 

– Izuku. .  .debo contarte algo – terminando esa oración apoyó su cuerpo en la puerta, sentándose detrás de ella, e Izuku procedió a hacer casi lo mismo, solo que a diferencia de Bakugo, este miraba la puerta, esperando ansiosamente la respuesta de tanto misterio. 

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E𝒎𝒑𝒆𝒛𝒂𝒅𝒂: 28/04/23|9:34𝚊𝚖

Terminada: 11/05/23 | 7:45pm