Tatiana se despertó cuando entró la luz por la ventana. Refregó sus ojos y se acercó a ver como estaba el clima. Era domingo, no pensaba salir de la casa, menos con el día así de nublado. Se giró hacia la cama y lo vio a Licha dormir. El día anterior, el United había jugado, la adrenalina y los nervios del partido los cansaba a ambos. Se cambió el pijama por algo un poco más abrigado y bajó a la cocina a desayunar. Cuando terminó, agarró el libro que Licha le había regalado y se sentó en el living a leer. Quedó totalmente sumergida en este. Licha había elegido bien.
Al rato, cuando ella ya iba por la mitad del libro, él bajó con cara de dormido. La saludó con un beso en los labios y fue a la cocina. Tati siguió con su libro, sabía que Licha era de esos que "tarda en reaccionar" cuando recién se levanta. Cuando volvió, agarró el control de la televisión, la prendió y se puso a ver programas de deportes, algunos hablaban sobre el partido del United, otros, de los partidos de hoy, nada muy interesante.
– ¿Está bueno el libro? – Ella ni lo escuchó – Gorda – Nada – ¡Tati! – La pobre chica se sobresaltó.
– ¿Qué? – Miró a su novio confundida.
– Creo que no necesito respuesta, está entretenido el libro – Dijo entre risas, la chica se acercó y lo besó en los labios.
– Está... – Hizo una pausa – Interesante – Le dijo riéndose.
– ¿Está interesante? O ¿Está "interesante"? – Hizo las comillas en el aire. Tati no pudo evitar soltar una carcajada.
– Está "interesante" – Le hizo el mismo gesto. No era sorpresa para Licha que a su mujer le gustaran los libros algo subidos de tono.
– Me alegro que te haya gustado entonces – La dejó volver a lo que estaba haciendo.
Licha miró a su mujer. Su respiración era algo acelerada, sus mejillas rojas y, la señal más obvia, sus pechos se notaban en su remera. Estaba excitada. Le molestó que no era él quien la hacía sentir así. Decidió cambiar eso. Licha se acomodó en el sillón para apoyar su cabeza en las piernas de ella. Tati bajó la vista a Licha mientras se acomodaba, él seguía mirando la televisión mientras le hacía mimos en las piernas. Ella pasó su mano por el pelo de él por algunos segundos y volvió al libro. Sentía como las caricias de Licha la excitaban. No pudo evitar soltar un jadeo cuando la mano de Licha se acercó a su femineidad, éste soltó una risa para sí mismo. Licha se giró para mirarla y Tatiana lo ignoró, siguió leyendo como si nada hubiera pasado.
– ¿Qué pasó? – Lo miró haciéndose la desentendida.
– Nada. Seguí leyendo – El tono de Licha era duro y autoritario. Tati le hizo caso y volvió a su libro. Le costaba concentrase. Licha subía su mano pero se alejaba rápidamente.
– Licha – su nombre salió casi como un jadeo.
– ¿Qué pasa gorda? – Licha se hacía el tonto. Tati lo miró enojada y él rió. Ella intentó concentrarse de nuevo. No podía, con cada toque, Licha la excitaba más. Ella le sacó las manos y lo miró amenazante.
– Me estás desconcentrando – Licha se acomodó en el sillón y le levantó los brazos en señal de que no estaba haciendo nada. No se iba a rendir tan fácilmente.
– No estoy haciendo nada – Su tono era inocente. Tati le asintió como que creía lo que decía y siguió con su libro. Ni siquiera se dio cuenta de que su novio se había levantado del sillón, arrodillándose frente a ella. Licha le separó las piernas y le dejó besos en el interior de sus muslos. Tati siguió leyendo. Ella jadeaba bajito pero seguía leyendo. El morocho levantó las piernas de la chica para tener más acceso. Le dejaba besos sobre la ropa interior y ella ni lo miraba. Licha se enojaba cada vez más. Lo estaba ignorando y apropósito. Corrió la ropa interior y pasó sus dedos por el clítoris de la mujer. Ella tiró su cabeza para atrás y gimió. Entre el libro y las caricias, Tati era pura excitación.
– Licha – Tati jadeó su nombre y tiró la cabeza hacia atrás disfrutando de su novio. Licha dejó de tocarla y ella se quejó.
– Seguí leyendo – El tono autoritario de Licha le encantaba. Volvió a su libro y lo sostuvo un poco más alto, así podía verlo. Tapaba la vista de Licha con el libro cuando tiraba la cabeza para atrás. Tati simulaba que leía para que Licha siguiera complaciéndola.
– Licha – jadeo – Me estás desconcentrando – Le volvió a repetir entre gemidos. Licha subió sus manos hasta los pechos de su novia y apretó sus pezones con algo de fuerza.
– Seguí gimiendo mi nombre – Metió dos dedos dentro de ella. Tati sintió una descarga en su cuerpo, tiró el libro a un costado y tomó el pelo de Licha. Éste sonrió cuando ella dejó caer el libro. La tenía como quería. Tati sentía su orgasmo crecer en su zona baja. Tomaba el pelo de Licha para acercalo más a ella. Él aumentó el ritmo y Tati dejó caer su cabeza hacia atrás.
– Voy a acabar – Licha tocaba y apretaba su pezón con fuerza. La chica se tomó del sillón cuando acabó. Tenía los ojos cerrados y su pecho subía y bajaba, regulando su respiración. Tatiana miró a su novio, sus ojos eran deseo puro. La chica tomó al morocho de la remera y lo besó con intensidad. La chica lo empujó al sillón y Licha cayó sentado. Este se sacó la remera rápidamente. Ella le dejó besos en el cuello y el torso.
– Tati – jadeos – Calmate amor – La chica lo miró traviesa y le negó con la cabeza. Bajó hasta su erección, y pasó sus dedos despacio por encima de la tela.
– Te dije que me estabas distrayendo – Tati bajó el pantalón de Licha y su miembro golpeó su zona baja. Lo masajeó un poco y pasó la lengua por su glande. Licha miraba a su mujer, nunca la había visto así, la tenía desesperada solo para él. Tatiana metía el miembro de Licha en su boca, lo dejaba dentro algunos segundos y lo sacaba de nuevo. La chica podía sentir como el miembro de su novio se tensaba cada vez que ella se lo metía en la boca.
– Dios, que trola hermosa – La chica amaba que le hablara así. Licha la tomó del cuello para acercarla y besarla. La acomodó sobre él, con una pierna a cada lado de su cuerpo. Tomó su miembro y lo alineó con el cuerpo de su mujer. Lo introdujo despacio y la penetró lento.
– Licha – Tati se quejaba – Más rápido – La embistió despacio. La tenía agarrada de la cintura guiando sus movimientos. Tatiana movía sus caderas para sentir más a su novio. Después de algunos minutos, la envistió fuerte. La tomó por la cintura para hacer sus embestidas cortas y duras. Tati puso sus manos sobre los hombros de Licha para sostenerse. Tatiana tomó una de las manos de Licha y la llevó a su cuello. Ella subía y bajaba su cuerpo sobre el miembro de él.
– ¿Así te gusta trola? – Tatiana lo miró y le asintió con los ojos llorosos, él la apretó del cuello – Que puta que es mi mujer – La chica sentía su nudo crecer de nuevo.
– Licha – La chica cerró los ojos. Las estocadas eran cortas. A los pocos minutos, las piernas de Tatiana temblaron, había acabado sobre él. Licha salió de ella y, sin soltar su cuello, la giró para que quedara boca arriba en el sillón. El morocho también sentía su orgasmo crecer. Licha se acomodó y volvió a penetrarla. Tatiana lloriqueó pero a él no le importó. La tenía solo para él y no la iba a soltar. Ahora las estocadas eran más lentas pero profundas. Tatiana jadeaba cada vez que Licha la penetraba. Él puso su mano en el clítoris haciendo círculos rápidos. Esa mezcla de ritmos hizo que Tatiana acabara a los pocos minutos. Licha salió de ella y le acabó encima. Tati pasó un dedo por su cuerpo, llevó el semen de su novio hasta su boca y lo chupó su dedo inocentemente.
– Así de trola me gusta mi mujer – Licha se acercó y la besó. Tatiana lo miró y vio el brillo en sus ojos. Licha ya estaba para empezar de nuevo.
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Lo que me costó escribir este one shot genteeee, como digo yo, te escribo con una sola mano
Tengo uno de Scaloni, otro de Aimar y otro de Mac Allister a medio empezar, díganme si quieren el del colo primero o, andan necesitando una dosis de alguno de los daddys. Puede ser de cualquier otro también
La cantidad de pensamientos impuros que me provoca esa foto de licha
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ONE SHOTS +18 - la scaloneta -
Fanfictionalgunos de mis episodios esquizos van a estar acá, espero que los disfrutes