DARKNESS [+21]

seis

Me removía en la misma cama una y otra vez tratando de volver a dormir pero no podía, me acordé que debía salir justo ahora, estaba perdida con la hora no sabía si ir o no, si ese hombre me está engañando pero no pierdo nada con intentarlo si me desánimo en el camino puedo escapar de aquí y comenzar de nuevo, miraba por la ventana los hombres que vigilaban la casa estaban profundamente dormidos esta era mi oportunidad además Lilith está herida supongo que Hard está con ella esto hace que mi salida sea más fácil, camine tratando de no hacer ningún sonido con el zapato que llevaba puesto por el largo pasillo que me daba mucho miedo, quería saltar por la ventana pero esta era muy alta si lo hacía era una muerte segura.

Una voz se escuchó. —Tranquila será rápido, te lo prometo. — la voz de asmodeo, estaba con una sirvienta, se hacía la que no pero sabía muy bien que esa sirvienta quería más de asmodeo.

—Si mi prince se entera me va matar. — la sirvienta aviso asmodeo, sin querer vote un florero rápidamente camine asustada. Soy muy estúpida no me costaba nada ir sin mirar atrás.

No sé cómo o por arte de magia o talvez alguien del más allá me este ayudando, muchos árboles que impedían mi paso, los sonidos de los animales se hacían presentes, miraba a mi alrededor por cada paso que daba, sentí como aquel animal se aventó en mi, grite por ayuda sin pensar que podrían escucharme de la mansión, no muy lejos de ahí. Ese animal me mordió el brazo con el dolor puesto no tenía ganas ya defenderme, aquel animal se fue y por fin pude respirar tranquila.

La chica de la mañana me dió la mano. —Sabia que no podrías cruzar, vine ayudarte. — tome su mano para levantarme. —has llamado la atención de todos en la mansión, te dije que lo hicieras con cuidado. — me tomo de la mano para llevarme quien sabe dónde.

En una cabaña en su interior estaba una señora que parecía ser mi madre, ella estaba con un bebé ignorando sus llantos, ella tenía una navaja, velas que lo encendió luego una estrella en el medio, mi madre estaba muy enferma mentalmente talvez por eso mi padre la dejo, lo que hubiera dado por qué mi padre me lleve con el y no me dejara con mi madre, no tengo recuerdos lindos siempre fue hambre, fue su rituales, nunca nadie nos ayudó porque los vecinos no sabían de nuestra existencia.

Corto la piel de la bebé está lloro sin parar, la sangre gordo en la estrella tres veces luego vendo a la bebé que por tanto llorar se había quedado dormida.

—Nunca logré entender a mi madre. — estaba con aquella sirvienta viendo todo de una esquina. 

—¿Sabes quién es esa bebé? — aquella sirvienta pregunto con una sonrisa de lado, negué varias veces. —Eres tu, aunque pienses que hizo mal talvez si talvez no ya que por lo que hizo tu madre tu te volviste intocable si no hubieras corrido la misma suerte que tú hermana mayor y tus hermanos, desde ese día donde tu madre regalo tu sangre al ser tan maligno como lucifer, te volviste incotable. — seguí mirando a mi madre, las velas se apagaban mi madre salía de esa cabaña.