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-lo siento Maggie, no podemos seguir juntos- dijo un chico pelinegro

-¿En serio? ¿Tú eres el que me dice eso?- lo miró molesta -tú fuiste al que encontré revolcándose con su ex-

-bueno nena, tú casi no estás conmigo, necesitaba a alguien que me prestara atención-

-¡Ahhhhh!- le lanzó un florero que se partió en mil pedazos al chocar contra la pared -¡Lárgate de mi casa maldito bueno para nada!-

-tranquila- sonrió

-¡Soy mucho para alguien como tú! ¡Maldito gusano!- lo empujó hasta la salida y cerró la puerta

Por el alboroto, William, el hermano de Maggie se acercó despacio a su hermana menor y le dió un pequeño abrazo.

-¿Por qué siempre me pasa esto?- abrazó a su hermano

-a veces debemos pasar por algunos patanes para encontrar a nuestra media naranja- acarició el rubio cabello de su hermana

-si, puede ser- sonrió -debo ir a mi habitación, quiero descansar un rato de todo esto-

-claro, ve- sonrió de vuelta -te llamaré para cenar ¿Tallarines?-

-me encanta como los preparas- le dió otro abrazo -te quiero hermano-

-y yo a ti galletita-

-ya tengo 26, no me puedes seguir diciendo así- rió

-claro que si, para mí siempre serás mi hermanita bebé- besó su mejilla

-y tú mi hermanote, iré a descansar-

Se soltó del abrazo y subió las escaleras para ir a su habitación, su madre aún no había llegado del trabajo, era sábado así que la rubia tenía el día libre.

-tal vez deba llamar a Eri...- miró su teléfono -necesito hablar con una amiga-

Llamó a su amiga y está rápidamente le contestó, al saber la situación le colgó.

-¿Hola?- miró su teléfono -me cortó-

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-esto va a quedar delicioso- decía el hermano mayor en la cocina, pero el timbre lo detuvo de sus actividades -¿Quién será?-

Abrió la puerta y pudo ver a cierta pelinegra algo agitada con bolsas de una tienda, su mochila y con la sudadera a medio poner.

-hola Eri- saludó y la dejó pasar

-hola Wil ¿Dónde está?- lo miró cerrar la puerta

-en su habitación- señaló -¿Te quedas a cenar? Preparo tallarines-

-wow, fue duro- suspiró -traje algo de pan y una mantequilla con ajo-

Ella se los dio y William los tomó con gusto, le encantaba la cocina, a veces iba con el padre de la pelinegra a aprender varias cosas, ella subió y abrió la puerta del cuarto de Maggie.

-¡Ya vine! ¿A quién hay que matar?- entró con todas sus cosas y las dejó en el escritorio de su amiga

-encontré a Michael teniendo sexo con su ex- dijo para luego gritar en una almohada

-ay amiga, en serio lo lamento, parecía buen chico- dijo sacando unas latas de soda

-lo sé, por eso no sospeché- la miró triste -¿Por qué siempre me tocan los patanes? ¿Seré muy tonta?-

-claro que no, lo que pasa es que tal vez debes expandir tus horizontes con respecto a los chicos- sonrió y le dió una lata -eres demasiado permisiva amiga, eres increíble pero tú confías plenamente a los 2 días de conocerlos-

Limón y Pop tarts (Donatello TMNT x Oc)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora