Se sentía extraño el ya no contar con Greg a su lado, durante siete años el viejo había sido una parte infaltable en su rutina, y le dolía muchísimo. Todo el pueblo se había puesto en luto por la inmensa pérdida.
Ese día se había vuelto a abrir Styles' y todos chismoseaban sobre el nuevo dueño, quien a comparación de su tio era un total y absoluto gruñón, agregando una estúpida regla anti- celulares; echando al pobre bastardo quien se atrevía a incumplir la regla. Todos en el pueblo chismorreaban sobre su carácter y su físico.
Más Louis realmente no participaba de nada de esto, puesto que era consciente de la reciente pérdida — de quien parecía ser un familiar cercano — del joven, sumándole el estar mudándose a un lugar totalmente diferente del que parecía estar acostumbrado; realmente no estaban siendo muy empaticos con el por estar sumergidos en su cotilleo sin sentido alguno.
Miss patty y Babette chismorreaban sobre el — supuesto— genial trasero del alfa en el puesto de revistas que se encontraba al otro lado de la calle, más al omega no le importaba en absoluto si el muchacho era atractivo o no, lo único que a él le importaba era sabiendo si el sabor del café seguía siendo excelente como lo era con el dueño anterior.
Por lo que con un amigable saludo y una sonrisa preciosa, se despidió de las mujeres y se dedicó a cruzar la calle para llegar a la cafetería, al empujar la puerta de madera blanca, llamó la atención de cualquier persona que estuviera en el lugar gracias a la pequeña campanilla que se encontraba en la puerta.
Saludo a la mayoría de personas que se encontraban a su alrededor, notando como el nuevo dueño de la cafetería y el excéntrico Kirk se encontraban peleando por lo que parecía ser la subida en los precios del lugar.
—¡Son diez malditos centavos!.— rugió el dueño del lugar dejando a Kirk en su lugar mientras todos a su alrededor cuchicheaban.
La tensión se podía palpar en el ambiente, por lo que después de dar un pequeño recorrido por las mesas, decidió sentarse en la barra, pidiendo dulcemente un café.
El sobrino de greg estaba de espaldas, por lo que todavía no le veía realmente bien, hasta que este se giró tomando la cafetera; listo para tomar su orden. Y el aire salió despedida por sus pulmones, estaba viendo al alfa más jodidamente perfecto que había visto en su vida.
Un par de esmeraldas colocadas por ojos, cada facción combinando en perfecta armonía con las otras, esos deliciosos labios rosados y lo que parecía ser unos rizos chocolate escondidos bajo una deslavada gorra de beisbol roja.
Joder, le encantaba este hombre.
—¿Puedo tomar tu orden?.— preguntó con esa increíblemente sensual y ronca voz.
Tartamudeando y totalmente colorado por su sonrojo dijo:
— pancakes de doble chocolate y tocino, por favor. — pidió para proceder a bajar la mirada.
El alfa asintió — cosa que no vio — y se retiró a la cocina gritando su orden hacia el cocinero, quien gritó otra afirmativa en respuesta.
Pocos minutos pasaron para que le entregaran su orden, agradeció un poco intimidado por el hombre, mientras se concentraba en comer y conversar con cualquier persona que pudiera. Llamando al joven styles por segunda vez en el día, sólo que esta vez con un poco más de confianza.
—Doña de chocolate y más café, por favor.
La ceja alzada del hombre le causó una curiosidad que no iba a aceptar jamás.
— ¿No es suficiente cafeína y azúcar en un día?, te puede hacer daño.
Colocó sus mejores ojos de cachorro regañado para contestar:
—No, café y Dona por favor.— consiguiendo sacarle una carcajada al alfa.
Hola amores. Imaginen al Harry actual con el cabello de frat boy era. Podemos ver un claro: odio a todos mas soy soft contigo horneándose <3 Un peak de la cafeteria por si no han visto Gilmore girls :
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