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Leonarda claro que había notado el comportamiento distante de sus padres, más que nada entre ellos pues si bien no se hablaban, le daban toda la atención que una niña de su edad requería.

Aún así, no estaba feliz.

Leonarda no quería que sus padres estuvieran peleados pues a la niña le daba vida el simple hecho de que sus padres se tratarán cómo siempre lo hacían ya que la niña sentía, eran una familia cálida de esa forma y sobre todo, real.

La pequeña apesar de estar recibiendo las mejores atenciones, solo podía pensar en cómo hacer para que sus papis se reconcilien.

Su cabeza se iluminó cómo un foco al tener la solución perfecta para evitar el divorcio de sus padres.

La niña mucho más emocionada, le preguntó a sus padres si le podían poner algo de música y bailar con ella. Estos aceptaron con gusto pues la niña había estado un poco ida por alguna extraña razón, incluso pensaron que su gripe había empeorado y eso les asustó un poco.

- ¡Pues claro, para mí niña lo mejor! -ya se había vuelto una nueva frase del mayor El decir aquello y que su esposo se riera por su tono orgulloso y a la vez dulce al decirlo. Eso no pasó, pues foolish seguía enojado y vegetta de cierta forma, se encontraba extrañando un poco la risa del rubio dirigida a su persona. Se encontraba algo arrepentido y solo pudo dirigir su mano a uno de sus brazos, algo incomodo por qué el otro no se haya reído aunque sea un poco- bueno... Que ponemos, mija?

La niña comenzó a dar brinquitos antes de poner uno de sus carteles y escribir, pidiéndole a su papá que pusiera una clásica y suave melodía. Los ojos amatistas del chico brillaron con intensidad, haciendo que parte de la molestia de foolish desapareciera al verle algo adorable en ese momento, aún así, no desapareciendo por completo.

- ¡Oh, está te va a encantar mija! -dijo antes de bajar a su zona de cofres, comenzando a buscar su tocadisco y agarrar también un disco, por supuesto, regalado por foolish quien le había recomendado ese para cuando se sentía estresado con algo de su construcción. realmente se entendían entre fanáticos de la construcción, pues a vegetta le encantó el disco y foolish se apresuró a recomendarle y regalarle más; vegetta comenzaba extrañar el estar bien con el rubio, cosa que también pensaba este al ver el disco que trajo el mayor, acordándose de aquel día en el que habló animadamente con este de sus discos y fue escuchado apesar de que el otro no le entendía para nada.

Foolish volvió a la tierra cuando sintió las hondas musicales recorrer ahora por el aire, haciendo que inconscientemente su cuerpo bailaste y fuera rápidamente seguido por la niña quien llamó a su otro padre para que les acompañase, este sonrió con calidez mientras se unía a ambos, claro que tomando la debida distancia de el chico; a leonarda no le gustó y rápidamente tomó las riendas de la situación, claro que no sin antes estar segura de hacerlo en el momento justo.

La pequeña no la pensó cuando vió a su padre pelinegro acercarse un poco más a ella, pasando rápidamente a su lado y haciéndole tropezar al frente debido a la rápida leonarda que pasó cómo un rayo a su lado, haciendole caer para delante y terminando en los brazos del rubio. Vegetta chocó contra algo firme por lo que se quejó un poco, poniendo sus manos sobre el pecho del contrario y percatandose al momento de en donde había aterrizado su rostro, haciendo que se alejara para mirar algo sorprendido y apenado al contrario, comenzando a disculparse con clara vergüenza implantada en su rostro y sintiendo sus mejillas teñirse de un suave tono carmesí.

Foolish finalmente después de tanto tiempo (no más de dos horas) río de forma que contagió al pelinegro, quien también se rió de si mismo. El híbrido con una sonrisa se acercó al oído del contrario y susurró una suaves palabras en su oreja, haciendo que su cuerpo se erizase un poco por su caliente aliento sobre su oído.

- I think it was Leonarda's plan... quite an effective one -[creo que fue un plan de leonarda.. uno bastante efectivo] foolish río algo apenado antes de comenzar a disculparse, enterneciendo al pelinegro quien solo le escuchó antes de hablar- i'm sorry, vegitta... I shouldn't have said things about your build when I agreed to do it.. -vegetta solo pudo pensar que el rubio se veía cómo un cachorro triste al verlo tan desanimado, sonriendo por lo tierno que se veía aunque a su vez extrañandose un poco por el haber pensado que el otro era tierno y que por alguna razón tenía ganas de abrazarle. Rápidamente negó con la cabeza, confundiendo un poco al chico antes de responderle.

- no foolish, yo me disculpo.. i'm sorry for sai shit of style construction and uhh.. ponerme borde -se mostró levemente frustrado al no haber podido decir lo último, pero aún así expectante a lo que diría el contrario acerca de, bueno, lo que dijo en un casi perfecto inglés- ¿Cant yu.. perdonarme..? -no hizo falta nada más para que el rubio le sonriera y asintiera animado, contento de que hayan solucionado las cosas en su pelea de amigos.. aunque, ciertamente pareció una pelea de esposos-

- ¡Yeah, Of course I forgive you! now let's have fun with leonarda -vegetta entendió tres de cada 10 palabras, aún así sonrió y río, asintiendo igualmente antes de separarse de foolish y extender la mano hacia la pequeña quien ya estaba mucho más feliz de lo que lo había estado antes-

- ¡Vamos, mija! -la niña no dudó en tomar su mano y nuevamente colocarse en medio de sus padres, comenzando a bailar con ellos y sonriendo por el simple hecho de ver las sonrisas de sus papis, completamente ajena a los días oscuros que se acercarían.

Leonarda no lo sabía, pero puede desaparezca en unos días y con ello, se llevaría la sonrisa de sus padres.




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«𝑀𝑌 𝐵𝐹𝑅𝐼𝐸𝑁𝐷»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora