In Repair

¿Risas?

Narración de Frannk:

Tengo un presentimiento extraño, nada me encaja y no puedo hacer nada por el hecho de que no hay señales de que el paciente podría estar en peligro y formar un espectáculo cuando el paciente a afirmado con más de un testigo solo por mis "instintos" me traería un gran problema.
No quedaba de otra que volver a mi puesto junto con Eliza para seguir mi rutina.

Era inevitable no sentir o notar las miradas de Eliza analizándome porque seguramente reflejaban mis pensamientos.

-Ya dime. Me molesta como mueves las cejas seguidamente como de molestia o incomodidad. ¿Qué pasa?

-No me creo nada que ese sea familia de ella, no entiendo por qué mintió.

-Frannk, no le des tanta importancia a eso, ella sabe lo que hace, no parece ser un mal chico.

-Abril parece ruda pero, no sabe cuándo es bueno alejarse de gente que claramente no le hace bien. Para ser familia es extraño que la encontrara ahí, no crees?

-Capaz lo llamó o desde antes habían quedado para verse.

-Estaba bastante débil como para tener la fuerza suficiente para sacar su teléfono. Vistes esos moretones en su espalda?

-No tiene sentido que ese chico haya sido su agresor, haya llamado la ambulancia y haya tenido el interés de estar aquí para saber su estado. Ya cálmate y ve a pediatría a darle los medicamentos a Lucí, ya es su hora.

-De acuerdo. -Por cierta parte tenía razón, tampoco tenía sentido que estuviera aquí si hubiera sido su agresor. Pero, familia de ella no es, de eso estoy seguro. No entiendo por qué mintió.

Las rondas de los jueves siempre me agotan más que los demás días por alguna razón, iba a tomar las escaleras pero pude notar que mis piernas apenas se levantaban para caminar así que opto por tomar el elevador y de paso, ver a Abril. Cada vez que me acercaba escuchaba unas risas, por el tono de voz podría pensar que era ella, pero se me complicaba distinguir.

Asomé la cabeza un poco por la ventana que daba al pasillo y confirmé mis sospechas. Era ella. Verla feliz así me alegraba bastante. Esos niños ya deberían estar en su cama.

Camino un poco más dirigiéndome a la puerta, al entrar mi mirada se concentró inmediatamente en ese chico medio pálido alto y todo ojeroso, charlando y riendo junto a ella.

Ni por un segundo en mi mente llegó la idea de que podría ser él, pensé que se había ido. Ya tiene más de una hora aquí...

-¡Hola Frannk! -Abril riendo así pareciera otra persona.

-La hora de visita terminó hace un buen rato, si saben, no?- Reí poquito para mostrarme amable, ellos no tenían culpa de mi agotamiento. -Abi sabes que cuando se pasan de hora me traen problemas.

-Si, si, lo siento. Se nos pasó el tiempo, ni nos dimos cuenta-Abril Hortwards disculpándose y siendo amable? Qué le hiciste Alex?

-Lo siento mucho, no quería traerle problemas, si es necesario hablo con alguien o algo, así no lo regañan. Disculpe. -Solo podía ver cómo se levantaba rápido, tomando sus cosas.

-Tranquilo, no te preocupes. -le dediqué una pequeña sonrisa de lado, no podía ser tan malo con él cuando le hacía tan feliz a ella. -Pero ya deberías irte, así no te vas muy noche y te pase algo.

-Si. -Me dedicó una cálida sonrisa para luego cruzar la puerta y desaparecer.

-Descansa Abi, nos vemos mañana para tu chequeo de rutina. -Asintió con desganas, cubriéndose con las sabanas. Ha vuelto la Abril que conozco.

Salí sin más qué decir dirigiéndome directamente hacía mi puesto mientras leía las listas de pacientes.

-Frannk?

-Si? Pensé que ya te habías ido-Dije sin despegar mis ojos de los papeles.

-Qué le pasó? Cuándo le darán de alta?-Sus preguntas me tomaron de sorpresa, no sabía si las hacía por puro chismoso o porque realmente le interesaba.

-Entre mañana o pasado máximo, estará de alta. No fue nada grave, no te preocupes.

-Por qué tiene esos more...

-Se está haciendo muy de noche, anda con cuidado si? Y no te preocupes tanto, ella está bien. -Suspiró rindiéndose y oficialmente se marchó.

Procedí al fin sentarme en mi puesto a trabajar algunos expedientes, la pasé de aquí para allá, atendiendo a los que llegaban en las ambulancias etc. Los días de guardia son los más cansados.
Entre tantas cosas, no sé en qué momento ya era de mañana, tomé los expedientes para hacer una revisión express a los pacientes para luego, ir a descansar unas horas en las habitaciones especiales.

Durante la caminata a la sala de pediatría, antes de llegar pasé por la habitación de Abril a ver cómo estaba pero, ni necesité entrar para darme cuenta lo bien que se encontraba, entre risas y bromas, con nada más y nada menos que el Alex Doppler. Decidí no interrumpir y optar en seguir mis cosas.

(...)

Había terminado mis cosas, dispuesto a ir a los dormitorios de los residentes y justo de lejos pude ver al tal Alex dirigiéndose a los baños así que, yo di media vuelta hacía la habitación de Abril.
Entré y ahí estaba con un libro en la mano pretendiendo que si lee.

-Ahora lees?-No sé qué me daba más risa, su mirada burlona o el hecho de que estaba "viendo un libro" que no tenga que ver con comics.

-Es de Alex, me lo prestó para no sé qué quiere que apren...-Lo chismoso me superó, lo admito. Tenía que interrumpirla, era muy necesario.

-¿Por qué me mentiste? ¿De dónde lo conociste o qué?-Su sonrisa y su mirada de "Ya sabía" me dejaban confundido, más que toda la situación. -¿Qué? No me mires así.

-Mucho duraste, me sorprende-Se veía tan feliz, tan así que una vez más me contagió su felicidad.

-Si, si. Ya dímelo.

-Es un amigo-Le restó importancia, volviendo su mirada y concentración al libro. Quería decir algo más pero, se escuchó la puerta abrirse, miré de reojo siendo algo estúpido porque sabía quién era.

-Oh! Hola Frannk!-Se ve de lejos que es buena persona pero, sigo teniendo esos presentimientos que me sigue haciendo sospechar.

-Hola Alex. Bueno, tengo que irme, no he dormido nada y estoy bastante cansado.

-Hoy le darán de alta?

-Creo que si, se ve bastante bien y creo que sus últimos exámenes salieron bien. Le diré a su enfermera que venga a chequear.

-Gracias!-Sonriendo de oreja a oreja. Este chico es totalmente lo opuesto de Abril, cómo se pueden llevar tan bien?
Opté por dedicarle una media sonrisa, mirar de reojo a Abril que seguía viendo su libro bien enganchada para luego irme y por fin descansar al menos unos minutos.