Casada con mi jefa - Freenbecky [Adaptación]

Capítulo 24

Becky agradeció que Grace se retirara a la cocina y no escuchara esa conversación.

— Ven, te mostrare la casa —dijo molesta.

Becky le dio un recorrido por toda la villa, Freen se quedó extasiada al ver la extensión del jardín posterior, era hermoso; Sofía disfrutaba mucha del paseo, pero en un momento se empezó a remover en los brazos de Freen para que Becky la cargara.

Ella felizmente lo hizo, amaba a su hija, y le encantaba tenerla en sus brazos y a su madre junto a ella.

Continuaron el recorrido hasta el pequeño establo, solo se encontraban tres caballos y un pequeño potro.

Sofía trataba de tocarlos pero Becky no la dejaba.

— ¿Son peligrosos? —Preguntó Freen al ver a Becky alejar a Sofía.

— No estoy segura, estos caballos son de los cuidadores y lugareños, algunos de ellos no tienen espacio para sus caballos y cuando compré la villa ya traía el establo, así que se los ofrecí a cambio de vigilancia.

— Es un trato inteligente concedió únicamente —trataba de no ser tan fría pero mantenía las distancias cosa que estaba exasperando a Becky. Odiaba sentirla tan distante.

Regresaron a la casa donde Grace les tenía la cena preparada, Freen se negó a comer en la mesa del comedor ya que no quería que Grace trasladara toda la comida hasta allá.

Así las cuatros comieron en el desayunador de la cocina.

Freen y Grace hablaban arduamente mientras Becky reía de sus ocurrencias, Grace contó un par de anécdotas sobre Becky y su fase rebelde.

— Una vez ella estaba castigada, pero la niña quería salir; tuvo la brillante idea de saltar de la terraza de su cuarto— contó Grace.

Freen estaba disfrutando tanto aprendiendo de su esposa.

— Pero Becky ignoró la altura y término con un yeso de tres semana —continuo.

— No me lo recuerdes; fueron las peores tres semanas de mi vida.

— Eso sucede cuando eres joven, tengan paciencia, cuando esta pequeña crezca y traiga a más de uno tras sus huesitos... conocerán las dificultades de ser madres... —Grace dejo la frase al aire al ver la cara de Becky.

— Falta mucho —para eso dijo ella aludida con el ceño fruncido.

Freen lanzo una carcajada, ver a Becky en pose de madre celosa le derrite el corazón.

— Bueno, ya es muy tarde, deberían de ir a descansar —les recomendó Grace.

— Sí, tienes razón —concedió Freen, a pesar de haber descansado en el avión, aun tenia sueño.

Se despidieron de Grace y tomaron a Sofía. Becky las guio hacia la segunda planta; ella había mandado a equipar el dormitorio de la niña hace una semana y quería ver la reacción de Freen.

Tenía la leve esperanza que si ella veía todo el esmero que había puesto en esa habitación, se daría cuenta que la amaba y la perdonara por la estupidez de besar a Amanda.

— Esta es la recamara de Sofía —al abrir la puerta dejo que ella entrara primero seguida por ella, encendió la luz dejándola impresionada.

Era muy similar a la recamara que tenía en casa, la cuna, una mecedora y el cambiador, pero hoy habían más detalles, ella se fijó en las frazadas rosas que adornaban su cuna y en las estrellas pegadas en el techo, estas también se encontraban en la pared pintadas.

Un móvil musical se encontraba sobre la cuna y daba luz para evitar que su pequeña se quedara a oscuras. Dentro de las figuras también había unas pequeñas estrellas.