Jugamos con nuestros labios unos minutos. Nuestros apasionados besos iban cada vez a más y en seguida metió las manos por mí jersey y recorrió mi espalda hasta llegar al broche del sujetador. La habría tomado en ese mismo instante, encima de la mesa, sin tomar reparo en el precio del portátil o en los documentos a los que tantas horas había dedicado, sin embargo algo dentro de mí no me lo permitió. Separé mis labios unos centímetros y le pedí que parara.
Freen : No, para
Siguió su recorrido de besos por mi cuello sin sacar las manos y susurró.
Becky : ¿Por qué?
Moví la cabeza lentamente para liberar mí cuello, pero no podía apartar mis manos de su cadera. ¿A quién quería engañar? No deseaba que se detuviera, quería que me hiciera el amor en la silla, en la mesa y hasta en el suelo, pero no estaba bien.
Freen : Porque no
Me miró.
Becky : ¿Sigues enfadada?
Freen : Tienes novio
Cambió de posición para abrazarme, yo le respondí con ternura.
Freen : ¿Lo entiendes, verdad?
Me impregné de su olor. En ese momento sentí que no quería soltarla nunca. Quería que fuese mía, y pensar que podía irse con aquel otro me destrozaba.
Becky : ¿Qué quería Jim ?
Freen : No lo sé. –No quería darle explicaciones, pues, si ella iba a dormir con Nop no le haría mal un buen escarmiento.
Becky : Pero, ¿para qué va a tu casa?
Freen : Me ha dicho que teníamos que tener una conversación larga y tendida sobre un asunto
Becky : ¿Te echará de menos?
Freen : No lo sé, Becky. No sé nada.
Noté vibrar algo en su bolsillo. Se separó y miró el móvil.
Becky : ÉL está abajo esperándome. –Me miró.
Freen : Tú sabrás lo que tienes que hacer.
Me miró inquieta, casi con tribulación.
Becky : Quiero quedarme contigo.
Freen : Deshazte de él
Asintió y comenzó a deslizar el dedo por la pantalla. Cuándo hubo terminado se colocó el teléfono en la oreja.
Becky : Escucha Nop...
Se le escuchaba perfectamente. ¡Cómo gritaba ese hombre!
Yo continué recogiendo intentando disimular mi interés por la conversación.
Nop : Estoy abajo.
Becky : Sí, lo sé, es que voy a tardar más, la señorita Freen y yo tenemos trabajo pendiente
Nop : Pero tu horario ya ha terminado, además, iba a llevarte a cenar
Becky : Lo sé, pero son muchas cosas y no está bien que lo haga ella sola
Nop : Puedo esperarte, ¿qué tardarás? ¿Una hora?
Becky : ¡No, no! Tardaremos bastante, tres horas por lo menos. Vete a tu casa y yo dormiré en la mía.
Nop : ¡Esa mujer es una explotadora!
La miré de reojo. Ese sí que era un cretino.
Becky : He sido yo quién ha decidido quedarse, ella ni si quiera lo ha pedido.