Strawberry smell.

Capítulo final

Tres años después.

Baekhyun actualmente trabaja en la granja de frutillas de la familia, mientras que Aeri, quién cumplió seis años hace dos semanas, empezó la escuela primaria. Por otro lado, Eun era cuidado por su madre porque no quería mandarlo al jardín todavía.

Los señores Park se habían mudado hace un par de años a una casa a pocos kilómetros de la suya y los fines de semana se llevaban a los niños para pasar tiempo con ellos, dejando que Baekhyun tome unos días para sí mismo, sin embargo, a veces solía terminar yendo también porque extrañaba mucho a sus pequeños. Incluso una vez que se apareció, se encontró que estaba Yoora de visita y pensó que la mujer le diría algo, pero únicamente lo trató con cordialidad. Más tarde se enteró que ella seguía siendo amiga de Gayoung y aunque aceptaba a los niños, no podría tener ninguna relación. Su amistad con la ex esposa de Chanyeol era mucho más importante que formar una relación con el amante de su hermano y que no se vendería tan fácilmente como sus padres. Baekhyun entendía su posición y de todas maneras no le afectaba nada en su vida no tener un vínculo con Yoora.

Sehun y Junmyeon iban a visitarlos una vez al mes, trayendo con ellos muchos regalos y amor para sus hijos. Baekhyun no podía estar más agradecido con ambos, por lo que les pidió que fueran los padrinos de Aeri y Eun, ya que además de ellos, no tenía ningún amigo cercano y en parte, los eligió como agradecimiento por ayudarlo siempre.

A Chanyeol no lo había vuelto a ver desde aquel día en el apartamento y lo último que supo un par de semanas después de ese encuentro, fue que había sido trasladado a una sucursal de otro país. La verdad es que a pesar de los años que pasaron, Baekhyun seguía teniendo sentimientos encontrados por el hombre mayor, pero era algo que lo vinculaba al hecho de que tenían hijos juntos, además llamenlo tonto o lo que sea, pero él creía que si una persona estuviera destinada a otra, volverían a encontrarse para estar juntos y superar cualquier desafío que se le interpusiera, pero por el momento estaba bien como estaba, viviendo tranquilamente con sus más allegados, esperando que Chanyeol también estuviera haciéndolo bien.

- ¡Baek! - El mencionado estaba arrodillado en el suelo, por lo que volteó su cabeza y entrecerró los ojos por el sol para ver a Jongin corriendo hacia él.

- Hey, Innie. ¿Cómo estás? ¿Cuándo llegaste? - Baekhyun lo saludó felizmente, mientras se paraba.

Kim Jongin había sido su amigo en la infancia, pero por cuestiones de trabajo de su padre, se habían mudado a la ciudad y hace un par de meses ellos habían vuelto, así que un día cuando Baekhyun fue a comprar víveres al pueblo, se reencontró con el moreno, ya que solía visitarlos a menudo.

- Estoy bien, ¿y tú? - Respondió cuando estuvo más cerca, a la vez que envolvía en un abrazo al más bajo, que se lo devolvió. - Y vine a pasar unos días en casa de mis padres.

- Oh, eso es bueno. - Ambos se separaron y Baekhyun le dio una sonrisa. - Y yo estoy bien, por cierto.

Jongin asintió sonriendo.

- ¿Te falta mucho? Mi mamá me mandó a buscarlos a ti y a los niños para que cenen con nosotros, así que pensaba que podíamos ir por Aeri a la escuela y luego pasar por la tienda por algunas cosas.

Baekhyun frunció los labios, pensativo. No era un mal plan aquel, además podía dejarles a sus padres una noche libre de ellos.

- Me gusta eso, así que déjame ir a cambiar y preparar a Eun para que podamos marcharnos, ¿bien?

- Si, por supuesto, vamos. - Jongin respondió entusiasmado, tomando al pequeño de la mano, a pesar de estar llena de tierra, y arrastrarlo en dirección a la casa de los Byun. En el camino hablaron de un montón de cosas triviales, hasta que el moreno contó que estaba ansioso porque que en la empresa en la que trabaja, llegaría un nuevo empleado a tomar el puesto de CEO y haciendo seguramente que muchas cosas vayan a cambiar.