Familia de Fantasmas

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De repente, la expresión de Ye Xiao se oscureció. Soltó las manos que sostenían la cara de Cen Pan. "¿Eso significa que realmente puedes ver fantasmas y puedes comunicarte con mi padre y mi abuelo?"

Cen Pan asintió honestamente.

"Entonces, ¿por qué me lo ocultaste? He estado casado contigo durante tanto tiempo y solo me enteré de esto hoy. ¿Por qué me tomas?

Ye Xiao saltó de la cama y gritó decepcionado mientras señalaba a Cen Pan.

Cen Pan miró rápidamente hacia la puerta y en secreto se pellizcó el muslo con la mano. Después de que sus ojos se pusieran rojos, recogió el vaso de agua de la mesita de noche y lo arrojó al suelo junto a Ye Xiao.

"¿Por qué eres tan feroz? Este es mi propio asunto. ¿Por qué debo decírtelo?

"¡Estallido!" La copa de vidrio se hizo añicos no muy lejos de los pies de Ye Xiao. Ye Xiao levantó ligeramente las cejas y elogió en secreto a Cen Pan por su precisión, pero su expresión era feroz.

"Pudiste ver a mi padre ya mi abuelo, pero observaste con impotencia cuando los extrañé y no me dijiste que estaban a mi lado. ¿Solo puedes ser feliz cuando me ves sufriendo?

Ye Xiao apretó los dientes mientras las venas de su frente se hinchaban y parecía estar furioso.

"Sí, tu dolor es mi placer. ¿Estás satisfecho ahora?" Cen Pan, con los ojos muy abiertos y la voz chillona, ​​parecía haberse enfadado.

"Vete al infierno con tu felicidad". Ye Xiao rápidamente miró a Cen Pan. Agarró la chaqueta del traje que cayó al suelo con enojo y cerró la puerta de un portazo.

El fuerte cierre de la puerta hizo temblar a toda la casa. Cen Pan se cubrió la cara con ambas manos y lloró de dolor.

Kitten Ye, que fue despertada por la discusión de los dos, no se atrevió a interrumpir. Siguió encogiéndose bajo la manta y fingió estar dormido. Ahora, vio que Cen Pan era el único que lloraba en la habitación, y se puso triste al instante.

Kitten Ye dudó durante mucho tiempo antes de reunir su coraje y gatear al lado de Cen Pan. Abrazó su cintura y metió su pequeño cuerpo en sus brazos. "Tía, no estés triste. Te acompañaré.

Cen Pan dejó de sollozar y se apretó los ojos con las palmas de las manos. Bajó las manos y dijo con una expresión de dolor: "Gatita, juega sola por un rato. La tía quiere estar sola.

Kitten Ye vio que los ojos de Cen Pan estaban rojos y su mirada estaba ligeramente desenfocada, como si hubiera sufrido un gran golpe. Él asintió obedientemente y salió a jugar solo con la arena.

"Buzz Buzz..."

Un fuerte estruendo vino desde fuera de la casa. Era el sonido de Ye Xiao alejándose.

Cen Pan calculó el tiempo y se puso de pie para caminar hacia la sala de estar. Despidió al mayordomo y a los sirvientes y casualmente tomó una botella de vino del gabinete de vino tinto. Luego se emborrachó sola con una mirada abatida.

En apenas diez minutos, se vació el vino tinto. Cen Pan, con los ojos nublados por el alcohol, miró la habitación vacía. Su rostro estaba sonrojado mientras murmuraba el nombre de Ye Xiao.

Ye Xiao le entregó su amado auto a Chen Feng a la mitad del camino. Condujo un automóvil discreto y se detuvo no lejos de su villa.

Sus ojos estaban pegados a las imágenes de vigilancia en la pantalla.

Para no causar ningún accidente, ya había discutido con Cen Pan para representar una discusión y hacerle saber al malvado fantasma que ya se había ido. Cen Pan también fingió bajar la guardia. Ya no había nadie mirando a Ye Kitten en todo momento. Mientras el fantasma actuara, tendría éxito.

Ahora, mientras vigilara de cerca a Ye Kitten, debería poder encontrar rastros del fantasma malvado muy rápidamente... Después de todo, definitivamente no dejaría pasar una oportunidad tan buena.