甜蜜的有缺陷的狼³ [ YoonMin ]

N U E V E

Cuando Jimin despertó, no tuvo tiempo para avergonzarse sobre conciliar el sueño como lo había hecho. Yoongi estaba demasiado ocupado despertándolo con besos suaves, consiguiendo alejar el sueño de sus ojos, y luego habían hecho el amor de nuevo.

Probablemente sólo se sentía tan maravilloso y mágico para Jimin porque nunca había tenido relaciones sexuales como estas antes, con alguien que no estaba usándolo para algo y totalmente desnudo y dentro de una cama. Sus amantes anteriores, incluso si se les pudiera llamar así, a quienes habían estado con él, nunca habían sonreído de la forma en que Yoongi lo hizo, y a Jimin nunca le había gustado aún cuando trataron de besarlo.

Amaba los besos de Yoongi. Le encantaba la forma en que lo hacían sentir. Y mejor aún, le gustaba la sensación de control que tenía. Yoongi nunca lo empujó en el colchón, nunca hizo que Jimin se sintiera atrapado, como si no pudiera alejarse si realmente lo quisiera.

Era por eso que a Jimin le gustaba estar arriba. Había una bonita sensación de libertad y control que venía con eso, aun cuando todavía era el que estaba recibiendo, por así decirlo.

Jimin logró mantenerse despierto después del segundo orgasmo, pero bostezó mucho, lo que le parecía gracioso a Yoongi. Parecía sonreír mucho más ahora que cuando se conocieron. Jimin aún no estaba del todo seguro de si Yoongi estaba en lo correcto al pensar que Jimin era su compañero, pero Jimin iba a ir con ello. Seguiría con esto hasta que estuviera seguro de que Yoongi no estaba cometiendo un error.

Yoongi había admitido tener una vez prejuicios contra los cambiaformas defectuosos y sin embargo, sus manos parecían no mantenerse lejos de las orejas de Jimin, las acariciaba y las rascaba suavemente.

Eso tenía que significar algo, ¿no?

Holgazanearon en la cama de Yoongi, hablando, discutiendo planes para el futuro. Jimin tuvo que admitir que tenía un poco de miedo de hacer planes que contemplaban meses e incluso años en el futuro, cuando el futuro más lejano que alguna vez había planeado era donde iba a conseguir su próxima cena sin tener que huir de Duncan.

Yoongi acarició las orejas un poco más y lo acercó para que Jimin quedara extendido sobre la parte superior de su perfecto pecho.

―No te preocupes por eso. Te ayudaré a sobrellevarlo. No va a ser tan difícil como piensas que será. Te lo prometo.― Yoongi le dijo.

Jimin quería creerle. Yoongi también le dio una leve advertencia.

―Sé que he estado diciendo la palabra defecto y defectuoso a tu alrededor mucho.

―Está bien. No me importa.― dijo Jimin rápidamente.

―Bueno pues a Namjoon y a Seokjin sí― dijo Yoongi, y no hubo falta de amabilidad ni advertencia en su voz, por lo que Jimin no sintió la necesidad de tener miedo. ―Supongo que todavía utilizo esas palabras contigo, porque no sé de qué otra forma llamarlo, pero Namjoon y Seokjin no quieren que sus hijos sean criados pensando que uno es mejor que el otro. Ellos saben que con el tiempo su hijo va a averiguar las diferencias entre ellos, y también lo hará su hija, pero quieren que sus infancias sean lo suficientemente normales.