~EXTRA~

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Ya han pasado un par de semanas viviendo con los soviéticos, y es clara la "Tensión'' que hay entre Urss y Reich. Urss estubo viendo las cosas que compró en aquella licorería, y el hecho de pensar hacer a Reich suyo le era inevitable.

Llegó la noche de aquel día, Reich estaba hambriento después de aquel largo día, y Urss decidió darle un pequeño postre. Sabía que Reich era un amante del chocolate, así que le preparó una rebanada de tarta de chocolate. Y esta tenía un ingrediente secreto; ¿Amor? Algo así... una droga que lo haría sumiso y que no se resistiera mucho con él.

—¿Qué tal está?~

—Oh! Está muy buena! Muchas gracias Urss!

Urss fué a su habitación y sacó lo que iba a usar. Un pequeño vibrador, unas esposas y correas de cuero, lubricantes y más drogas. Metió todo en una caja de cartón y la colocó en su cama. Al volver a la cocina pudo ver a Reich ya un poco mareado.

—¿Todo bien, Reichy?

—Ah... ¿Q-qué tenía el pas-t-tel?

—No suelo revelar mis ingredientes secretos, pero... digamos que... mucho amor~ —Dijo el Alfa para cargar a su felino.

Lo acostó en la cama, y comenzó a quitarse la ropa, para Reich no hizo falta, ya que él ya estaba en su forma de tigre. Su pelaje cubría sus genitales, por lo que cuando un cambiaformas está en su forma salvaje sin ropa no se considera desnudo.

Se subió a la cama y se montó encima de Reich, este de inmediato entendió lo que estaba a punto de pasar y se levantó rapidamente para huir a la puerta. Resulta que la había cerrado con llave. Reich estaba muy asustado, más aún conociendo la mala fama que tienen los osos al aparearse.

Urss lo acorraló contra la pared y empezó a oler, lamer y besar su cuello, para después acariciar y masajear su pelaje. Reich por los nervios volvió a intentar huir, pero el más grande se le tiró encima, quedando así contra el piso y el mayor encima, dominandolo y obligandole a tomar una postura sumisa.

Con una de sus garras punzando su abdomen bajo, el mayor le obligó al menor a estirar las piernas, Urss se reacomodó y pasó sus brazos por debajo de los del contrario para así dominarlo y controlarlo. La posición que poseen los animales al aparearse.

El pobre Reich ya entrando en pánico sintió como los colmillos de Urss empezaban a morder su nuca sin hacerle mucho daño. Sin embargo dolía, y los aterrados ojos de Reich se empezaban a aguar. No quería ser violado por semejante semental. No podía negar que estaba exitado por la droga pero... Las cosas son como son.

Urss notó que Reich tenía su cola entre las patas, jadeaba, lágrimas pequeñas de terror comenzaban a salir. Sus pupilas dilatadas, el temblor en su cuerpo... podía oler el miedo del contrario.

Urss no quería que viese esto como una violación o un abuso en su contra, quería que lo viera como algo que disfrutarían los dos, así que le susurró al oido;

—Sh sh sh sh shhh... Hey, respira, tranquilo, no te va a doler. Seré gentíl, no te voy a partir tan rápido pequeño~

—P-porfavor... n-no me hagas nada... n-no quiero... —Comentó ahogandose con el aire, esto hizo que Urss se apiadara de aquella criaturita pequeña e indefensa.

—Oh amor mío... sere cuidadoso, lo prométo.

Le llenó de palabras alagadoras y le dijo todo lo que sentía por él, quería hacerlo sentír especial, amado, necesario. Seguro, protegido bajo sus brazos... quería darle una buena primera impresión. Quería que fuera como un refugio, en el que el menor se podría esconder y huir de los problemas.

ℂ𝕠𝕣𝕒𝕫𝕠𝕟 𝕀𝕟𝕕𝕠𝕞𝕒𝕓𝕝𝕖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora