Delirio

9.

12 de abril de 2043

Hoy empezaban las clases oficiales de Enfermería. Nos habían separado por secciones para que fuera más especializada la enseñanza. Aunque por suerte me tocó de nuevo cerca de Iida, y por doble suerte lejos de Rouka, que desde el viernes no había decidido en dirigirme la palabra, ni un mensaje, nada. Solo su silencio. Quizás era toda la respuesta. Quizás Katsuki tenía razón, quizás su plan era solo una noche y no una tonta ida al cine. Suspiro.

Debi haber entendido que en este mundo los omegas no solemos ser nada, ni para alfas ni para betas, es mas suelen aceptar mas a los Sigma o cualquier otro tipo, es mas despreciable ser un omega.

-¿Todo bien, joven midoriya?- Asenti

Ni sabia que habia salido aquella tarde con Rouka, asi que deberia evitar el tema. Yo mismo me habia ilusionado con cosas que nisiquiera empezaron, cree un mundo en mi cabeza que no existe. Un mundo donde aman a un omega, que absurdo.

No pude poner atencion en ese dia, mi mente seguia divagando el porque naci siendo un omega, hoy era uno de esos dias en lo que me arrepentia ser, y por mas motivacion que tuviera por seguir todo venia encima, se que queria ser enfermero y curar a todo el mundo sin importar que sean, sin discriminar, solo atender. Sentia que este camino no llegaria a nada, que quizas estaba tocando piso que no me correspondia. No senti cuando todos salian de la aula pero Iida estaba esperandome meter mis cuadernos, no mostraba nada su rostro sin embargo se quedo en silencio, agradeci su gesto. No queria hablar que me sentia una mierda.

En el pasillo seguiamos en un silencio comodo, se que yo no escogi ser omega sin embargo esta ese sentimiento del hubiera, antes de llegar a la salida estaba Rouka recargado en la pared, cuando me vio se acerco, no queria verlo.

-¿Me permites hablar con el, Iida?- él me observo, aunque no queria necesitaba respuestas. Asenti. Solo observe como seguia caminando IIda alejandose de mi vista, supongo ira a su casa me comento que tenia un asunto que atender.

-Antes que nada me disculpo, se que hice mal en dejarte aquel dia solo en el cine pero me surgio una urgencia que no podia ignorar de la nada... y.. no pude avisarte- sabia que mentia, pero necesitaba creer esa mentira.

-Esta bien, ¿fue grave?- nego pero abrio los ojos al darse cuenta que se estaba contradiciendo

-Fue algo grave en su momento, ya se calmo la cosa...¿podemos seguir siendo amigos?- senti mi ilusion quebrarse, el jamas me habia visto como algo mas que un individuo u amigo, mientras yo me ilusionaba en mi interior. Asenti.

-Claro, por supuesto- el me sonrio, no quiero verlo mas. -¿Podemos ya irnos? Tengo tarea que hacer y son demasiados documentos que leer-

-Oh si si, vamos afuera..- seguimos caminando, odiaba este silencio, porque no era nada comodo comparado con hace un momento con mi amigo de verdad.

Observe a mama en el coche esperandome, pero antes de siquiera despedirme del susodicho escuche un grito.

-Rouka, hoy se va armar una fiesta igual que el viernes, DEBERIAS VENIR-

Era katsuki, se que era su voz asi que no voltee a mirarlo, sabia que habia detras de esas palabras, no me dolia mas que hace rato, sentia un balde de agua fria.

-Yo yo midoriya, no les hagas caso, no fui con ellos- No dije nada y opte por subir al carro.

-¿Todo bien, zuku?- Asenti

-Todo bien, mama, ¿podemos ir a casa?- No habia lugar donde me sintiera más seguro que en ese lugar

***

Son mas de las nueve de la noche, y por mas que he llorado todo el tiempo no sale ese sentimiento de mi. Lo peor es que no se que pensar y por mas que quiera se que lo que dijo Katsuki era verdad, por muy dolorosa que sea la verdad no la puedo ocultar, ¿donde queda mi sueño de tener una pareja y ser feliz? queria ser feliz, ser amado como no tenia idea. Quizas porque no tuve a papá, quizas haya sido un determinante en ansiar una familia feliz.